• Quejarse

Susan Mallery - Un Oasis de Placer

Aquí puedes leer online Susan Mallery - Un Oasis de Placer texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Género: Novela romántica. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

No cover

Un Oasis de Placer: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Un Oasis de Placer" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

Siempre se había sentido enormemente intrigada por aquel palacio… y por el príncipe que vivía en él. Nadie podía negar que el príncipe Murat era un hombre misterioso, poderoso y muy inteligente, pero Daphne Snowden quería que su futuro esposo tuviera algo más. Quería a alguien que no sólo la viera como la mujer que le daría un heredero al trono. Alguien que la respetara. Alguien que la amara. Y sin embargo, no podía aplacar el deseo y la curiosidad que sentía por él… Aunque Murat había cambiado con el paso del tiempo, ella seguía sintiendo un profundo interés por el único hombre que había amado en su vida. Pero, ¿obedecer sus exigencias y casarse con él? ¡Jamás!

Susan Mallery: otros libros del autor


¿Quién escribió Un Oasis de Placer? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

Un Oasis de Placer — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Un Oasis de Placer " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer
Susan Mallery Un Oasis de Placer Un Oasis de Placer 2006 Título Original - photo 1

Susan Mallery

Un Oasis de Placer

Un Oasis de Placer (2006)

Título Original: The sheik and the bride who said No (2005)

Serie: Príncipes del Desierto

Capítulo 1

Ya sé que casarte con el príncipe heredero y ser reina algún día suena muy bien -dijo Daphne Snowden intentando mantener la calma-, pero la verdad es muy diferente. No conoces de nada al príncipe Murat, pero te aseguro que es un hombre difícil y testarudo -le explicó a su sobrina por propia experiencia-. Además, casi te dobla la edad.

Brittany levantó la mirada de la revista que estaba leyendo.

– No te preocupes tanto, tía Daphne. No me va a pasar nada. Todo irá bien.

¿Que no se preocupara por nada? ¿Que todo iba a ir bien?

Daphne se arrellanó en la lujosa butaca de cuero del avión privado e intentó no gritar. Aquello no podía estar sucediendo. Era una pesadilla. No se podía creer que su adorada sobrina hubiera accedido a casarse con un hombre al que ni siquiera conocía.

Fuera o no príncipe, aquello iba a ser un desastre. A pesar de que llevaba casi tres semanas rogándole a Brittany que se pensara muy bien lo que iba a hacer, se creyó en la obligación de volver a insistir.

– Quiero que seas feliz porque te quiero -le dijo.

Brittany, una adolescente alta y rubia con los preciosos rasgos de la familia Snowden, sonrió encantada.

– Yo también te quiero. Te preocupas demasiado. Ya sé que Murat es un viejo, pero no me importa.

Daphne apretó los dientes. Obviamente, a una chica de dieciocho años un hombre de treinta y cinco le debía de parecer un anciano; no como a ella, que sólo le quedaban cinco años para tener aquella edad.

– Pero es una monada -añadió su sobrina-. Además, tiene mucho dinero. Voy a viajar un montón y voy a vivir en un palacio -apuntó apartando la revista y mirándose los pies-. ¿Me quedaban mejor las otras sandalias?

– ¿Qué más da las sandalias que te pongas? Estamos hablando de tu vida. Casarte con el príncipe heredero no quiere decir que te vayas a pasar el día yendo de compras. Vas a tener responsabilidades para con el pueblo de Bahania, vas a tener que ocuparte de los dignatarios que os visiten, acudir a un montón de actos de beneficencia y, por supuesto, tener hijos.

Brittany asintió.

– Ya tengo todo eso en cuenta. Lo de las fiestas es genial. Invitaré a mis amigas y cotillearemos sobre, por ejemplo, lo que lleva puesto el Primer Ministro francés.

– ¿Y lo de los niños?

Brittany se encogió de hombros.

– Supongo que, como es un viejo, sabrá lo que se hace. Mi amiga Deanna se acostó con su novio de la universidad y me dijo que era muchísimo mejor que con su novio del colegio. La experiencia cuenta mucho.

Daphne tuvo que hacer un gran esfuerzo para no zarandear a su sobrina. Sabía por las numerosas conversaciones nocturnas que había tenido con ella cuando Brittany se había quedado a dormir en su casa que la adolescente no había mantenido relaciones sexuales con ninguno de sus novios.

¿Qué había ocurrido? ¿Cómo había cambiado tanto? ¿Qué había sido de aquella niña a la que adoraba y a la que prácticamente había criado? ¿Cómo era posible que se hubiera convertido en aquella jovencita fría y sin sentimientos?

Daphne consultó el reloj. No les quedaba mucho tiempo. En cuanto aterrizaran y llegaran a palacio, ya no habría marcha atrás. Una Snowden había dejado plantado a Murat prácticamente en el altar y tenía la sensación de que a Brittany no le iban a dar la oportunidad de que se pensara las cosas mejor.

– ¿En qué estaría pensando tu madre? -se preguntó Daphne en voz alta-. ¿Cómo es posible que haya dado su consentimiento?

– A mi madre todo esto le parece supercool -contestó Brittany-. Yo creo que es porque tiene la esperanza de que a la madre de la novia le regalen alguna joya o algo por el estilo. Además, que yo me case con un príncipe es mucho mejor que el hijo de la tía Grace vaya a Harvard cuando sea mayor, ¿no?

Daphne asintió sin decir nada.

Había familias cuyos miembros eran muy competitivos en los deportes, otras se echaban en cara su situación social y económica. En la suya, lo más importante era el poder, tanto político como de cualquier otra clase. Una de sus hermanas se había casado con un senador que tenía pensado presentarse a las elecciones presidenciales y la otra se había casado con un empresario con contactos a los más altos niveles.

Ella había sido la única que había elegido un camino diferente.

Daphne se sentó en el borde de la butaca y tomó las manos de Brittany entre las suyas.

– Te quiero -le dijo mirándola a los ojos-. Te quiero más que nadie en el mundo. Te considero prácticamente mi hija.

– Yo también te quiero mucho -contestó Brittany sinceramente -. Siempre me has ayudado. Incluso más que mi propia madre.

– Entonces, te pido por favor que pienses muy bien lo que vas a hacer. Eres joven e inteligente y puedes hacer con tu vida lo que tú quieras, puedes tener todo lo que desees en el mundo. ¿Por qué quieres atarte a un hombre al que ni siquiera conoces y vivir en un país en el que nunca has estado? ¿Y si no te gusta Bahania?

Daphne sabía que no era muy probable que eso sucediera porque Bahania era un país maravilloso, pero estaba dispuesta a intentar por todos los medios que su sobrina recapacitara sobre su decisión.

– Lo de viajar no es lo que tú te crees -añadió antes de que a Brittany le diera tiempo de interrumpirla-. Los viajes que hagas serán visitas de estado en las que no podrás salirte del protocolo ni lo más mínimo. En cuanto accedas a casarte con el príncipe, no podrás quedar con ninguna amiga para ir al centro comercial o al cine.

Brittany se quedó mirándola muy seria.

– ¿Cómo que no voy a poder ir al centro comercial?

– Brittany, serás la futura reina y no podrás ir corriendo a comprarte un jersey a las rebajas cuando te apetezca.

– ¿Por qué no?

Daphne suspiró.

– Eso es lo que llevo intentando un buen rato explicarte. Porque ya no serás tú misma. Vivirás una vida que no es tuya en un país extranjero regido por unas normas que no conoces y que tendrás que cumplir a rajatabla.

A pesar de lo que estaba diciendo, Daphne sabía que, de haber sido ella la que tuviera que cumplir aquellas normas, no le habría costado nada, pero no era ella la que se iba a casar con el príncipe Murat.

– No había pensado que tuviera que estar todo el día en el palacio -recapacitó Brittany-. Yo creía que podría tomar un avión cuando me diera la gana y volver a casa para estar con mis amigas.

– No, de eso nada. Vivirás en Bahania. Bahania se convertirá en tu hogar y no podrás moverte de allí.

– A mis padres no los echaría mucho de menos, pero a Deanna y a ti… -se lamentó Brittany mordiéndose el labio inferior-. Yo creo que estoy enamorada del príncipe…

– ¿De verdad? Pero si ni siquiera lo conoces. ¿De verdad estás dispuesta a renunciar a todo para casarte con él? Brittany, nunca has tenido una relación seria. ¿De verdad quieres darle la espalda a tu vida? ¿De verdad quieres quedarte sin ir a la universidad?

Brittany frunció el ceño.

– ¿No voy a poder ir a la universidad?

– ¿Tú te crees que los catedráticos van a querer tener a la futura reina en su clase? ¿Y cómo harían para ponerte las notas de los exámenes? En cualquier caso, no podrías vivir en el campus.

– No, tendría que estar en el palacio.

– Posiblemente embarazada -añadió Daphne.

– Yo no quiero tener un hijo ahora -protestó Brittany.

– ¿Y si el príncipe quiere?

– Estás intentando asustarme.

– Por supuesto. Estoy dispuesta a hacer lo que sea para evitar que tires tu vida por la borda. Si me dices que has conocido a alguien del que te has enamorado y con el que te quieres casar, me daría igual que fuera un príncipe o un extraterrestre, pero no ha sido así. Me hubiera gustado que habláramos de esto mucho antes, pero tu madre se ha guardado mucho de mantenerme al margen y de no informarme de lo que estaba sucediendo.

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «Un Oasis de Placer»

Mira libros similares a Un Oasis de Placer. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


No cover
No cover
Susan Mallery
No cover
No cover
Susan Mallery
No cover
No cover
Susan Mallery
No cover
No cover
Susan Mallery
No cover
No cover
Susan Mallery
No cover
No cover
Marion Lennox
No cover
No cover
Kate Hoffmann
No cover
No cover
Lisa Jackson
Reseñas sobre «Un Oasis de Placer»

Discusión, reseñas del libro Un Oasis de Placer y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.