Adam Hochschild - El fantasma del rey Leopoldo
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- Libro:El fantasma del rey Leopoldo
- Autor:
- Editor:ePubLibre
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- Año:1998
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El fantasma del rey Leopoldo: resumen, descripción y anotación
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El fantasma del rey Leopoldo — leer online gratis el libro completo
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Quisiera expresar mi agradecimiento al personal empleado en la Royal Geographical Society de Londres, la asociación Anti-Slavery International de Londres, el Musée Royal de l’Afrique Centrale de Tervuren (Bélgica), el Musée Royal de l’Armée et d’Histoire Militaire de Bruselas, la Svenska Missionsförbundet de Estocolmo, la American Baptist Historical Society de Rochester (Nueva York), el Sanford Museum de Sanford (Florida) y el Departamento de Historia de la Iglesia Presbiteriana (EE. UU.) de Montreat (Carolina del Norte); todos ellos respondieron amablemente a mis demandas de información, fotografías y otros materiales. También a Enid Schildkrout del American Museum of Natural History de Nueva York, a los archiveros de la Universidad de Hampton (Virginia), que me permitieron consultar los documentos de Sheppard, a Ebba Segerberg por sus traducciones del sueco, y a David Raymond y Fritz Stern por algunas buenas sugerencias bibliográficas.
La redacción de este libro me ayudó a comprender la función esencial de las bibliotecas en la conservación de los documentos históricos que algunos intereses poderosos desearían ver olvidados o que la gente ha decidido ignorar. Me sentí agradecido por poder pedir libros prestados, aunque —como ocurrió en un caso— fuera la primera persona en consultarlos desde 1937. O examinar un libro conservado desde hacía décadas en una biblioteca y comprobar que sus páginas estaban aún sin abrir, lo que me sucedió dos veces. Doy las gracias a los numerosos miembros del personal de los distintos lugares donde estuve investigando: las bibliotecas de la Northwestern University, la Universidad de Yale y el Bates College; la Biblioteca Pública de Nueva York; la biblioteca del Union Theological Seminary de Nueva York; la bibliotecas Hoover y Green de la Universidad de Stanford y, sobre todo, las bibliotecas Doe, Moffitt y Bancroft de la Universidad de California en Berkeley, donde realicé la mayor parte de mi trabajo. La gran variedad de materiales de hace un siglo conservados en Berkeley es un testimonio elocuente de todo lo que existía antes de que unos políticos estrechos de mente y unos fanáticos de los recortes fiscales comenzaran a reducir de forma drástica los presupuestos para las bibliotecas norteamericanas públicas y de universidades estatales.
Aunque mi esposa, Arlie, se hallaba acabando un notable libro propio, habló conmigo de este proyecto y vivió y respiró con él en cada paso de su andadura. En el momento en que el manuscrito estaba listo para que ella lo leyera con la penetración que la caracteriza, conocía a los personajes de la historia del Congo casi como si fueran nuestros amigos íntimos. He tenido la suerte de contar con muchos amigos de la vida real que también lo leyeron e hicieron comentarios útiles, basándose a menudo en su experiencia como escritores, periodistas o historiadores. Mencionaré entre ellos a Ayi Kwei Armah, Harriet Barlow, Mary Felstiner, Laurie Flynn, David Hochschild, Patricia Labalme, Paul Solman, Allen Wheelis, Francis Wilson y Blaikie, Monty y Robert E. Worth. También estoy agradecido a mis agentes Denise Shannon y Georges Borchardt y a mi anterior editor en Houghton Mifflin, Dawn Seferian.
Casi todas las páginas de mi libro se han beneficiado inmen samente del intenso asesoramiento editorial de Tom Engelhardt. Entre los escritores norteamericanos que se preocupan por su oficio, el nombre de Tom es un secreto bien guardado. Hay pocas personas vivas para quienes el acto de leer críticamente, esclarecer y pulir una frase, un párrafo o un libro entero constituya en un grado tan alto un acto de suma destreza profesional. Si hubiera premios Óscar a la edición, Tom habría ganado el suyo hace ya tiempo.
En mi condición de recién llegado a esta trágica parcela de la historia, hubo varias personas que me ayudaron en mis indagaciones y que saben sobre ella bastante más que yo. Daniel Vangroenweghe leyó el manuscrito y compartió conmigo algunos documentos. Tengo una especial deuda de gratitud con los dos máximos especialistas de este periodo, el antropólogo Jan Vansina y el historiador Jules Marchal. Ambos respondieron generosamente a numerosas llamadas y cartas en que pedía información, y ambos leyeron el manuscrito con una atención meticulosa. Marchal lo hizo con dos borradores sucesivos, ahorrándome así innumerables errores. Ni uno ni otro son responsables de ningún fallo que haya podido colarse accidentalmente en mi posterior reescritura ni de los pocos puntos en que mi interpretación puede diferir de la suya. Me es imposible darles suficientemente las gracias.
ADAM HOCHSCHILD (Nueva York, Estados Unidos, 1942) es un escritor, periodista, historiador y profesor universitario de los Estados Unidos.
Hochschild se graduó en Historia y Literatura en la universidad de Harvard en 1963. Como estudiante, pasó un verano trabajando en un periódico anti-apartheid en Sudáfrica, una experiencia clave políticamente sobre la que escribiría más tarde. Seguidamente trabajó brevemente para el Movimiento Americano por los derechos civiles en Mississippi. En 1964, participó en movimientos contra la Guerra del Vietnam, y, tras varios años como reportero en diarios, trabajó como escritor y editor para la revista izquierdista Ramparts. A mitad de los ´70 fue uno de los cofundadores de la revista Mother Jones.
El primer libro de Hochschild fueron unas memorias publicadas en 1986, en las cuales describía la problemática relación mantenida con su padre. Tras varios libros y una colección de ensayos, publicó en 1998 El fantasma del rey Leopoldo, una historia de la conquista y colonización del Estado Libre del Congo por el rey Leopoldo II de Bélgica. El fantasma del rey Leopoldo ganó el premio Duff Cooper en Inglaterra y fue finalista en el del National Book Critics Circle Award de Estados Unidos. Su libro Enterrad las cadenas, publicado en 2005 acerca del movimiento antiesclavista en el Imperio Británico fue también finalista del National Book Award. Los libros de Hochschild han sido traducidos a doce idiomas y han sido galardonados con numerosos premios.
Hochschild ha escrito también para las revistas The New Yorker, Harper's Magazine, The New York Review of Books, The New York Times Magazine, y The Nation. Ha sido también comentarista de la National Public Radio.
Vive en San Francisco y ejerce la docencia como profesor de redacción en la Graduate School of Journalism de la Universidad de California en Berkeley, y durante el curso 1997-1998 fue profesor Fulbright en India. Está casado con la socióloga Arlie Russell Hochschild.
En 2012, su obra fue premiada por la Academia Estadounidense de las Artes y las Letras.
El investigador que desee disponer de la bibliografía más exhaustiva de la investigación moderna sobre el Congo colonial deberá consultar la Bibliographie historique du Zaïre à l’époque coloniale (1880-1960): travaux publiés en 1960-1996 (Lovaina, Bélgica: Enquêtes et Documents d’Histoire Africaine, 1996), editada por Jean-Luc Vellut. En las páginas siguientes doy una lista de las obras utilizadas por mí.
La tiranía del orden alfabético no hace justicia a la ayuda que me proporcionaron los libros de otros autores al escribir este. Se me ha de permitir, por tanto, que me incline de manera especial ante aquellas obras a las que más he recurrido.
Las fuentes primarias, escritas por algunos de los personajes principales de este relato, son las enumeradas en la lista. Tienen como autores al rey Alfonso I, Roger Casement, Joseph Conrad, William Sheppard, Henry Morton Stanley, George Washington Williams y E. D. Morel. No existe una edición completa de la voluminosa y reveladora producción de cartas y memorandos del rey Leopoldo II, pero en Édouard Van der Smissen, Leopoldo II et Beernaert: d’après leur correspondence inédite de 1884 à 1894, aparecen cientos de ellos. Algunos se han reimpreso también en François Bontinck, Aux Origines de l’État Indépendant du Congo, importante colección de cartas y documentos de los primeros tiempos. La nueva antología de Robert Benedetto ha hecho fácilmente accesible una extensa colección de material de fuentes sobre la obra de los misioneros presbiterianos en favor de los derechos humanos.
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