• Quejarse

AA. VV. - Kenji Mizoguchi

Aquí puedes leer online AA. VV. - Kenji Mizoguchi texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 1999, Editor: ePubLibre, Género: Historia. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

AA. VV. Kenji Mizoguchi
  • Libro:
    Kenji Mizoguchi
  • Autor:
  • Editor:
    ePubLibre
  • Genre:
  • Año:
    1999
  • Índice:
    4 / 5
  • Favoritos:
    Añadir a favoritos
  • Tu marca:
    • 80
    • 1
    • 2
    • 3
    • 4
    • 5

Kenji Mizoguchi: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Kenji Mizoguchi" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

AA. VV.: otros libros del autor


¿Quién escribió Kenji Mizoguchi? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

Kenji Mizoguchi — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Kenji Mizoguchi " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer
La revista Nosferatu nace en octubre de 1989 en San Sebastián Donostia Kultura - photo 1

La revista Nosferatu nace en octubre de 1989 en San Sebastián. Donostia Kultura (Patronato Municipal de Cultura) comienza a organizar en 1988 unos ciclos de cine en el Teatro Principal de la ciudad, y decide publicar con cada uno de ellos una revista monográfica que complete la programación cinematográfica. Dicha revista aún no tenía nombre, pero los ciclos, una vez adquirieron una periodicidad fija, comenzaron a agruparse bajo la denominación de “Programación Nosferatu”, sin duda debido a que la primera retrospectiva estuvo dedicada al Expresionismo alemán. El primer número de Nosferatu sale a la calle en octubre de 1989: “Alfred Hitchcock en Inglaterra”. Comienzan a aparecer tres números cada año, siempre acompañando los ciclos correspondientes, lo que hizo que también cambiara la periodicidad a veces. En junio de 2007 se publica el último número de Nosferatu, dedicado al Nuevo Cine Coreano. En ese momento la revista desaparece y se transforma en una colección de libros con el mismo espíritu de ensayos colectivos de cine, pero cambiando el formato. Actualmente la periodicidad de estos libros es anual.

AA VV Kenji Mizoguchi Nosferatu - 29 ePub r10 Titivillus 010717 Título - photo 2

AA. VV.

Kenji Mizoguchi

Nosferatu - 29

ePub r1.0

Titivillus 01.07.17

Título original: Kenji Mizoguchi

AA. VV., 1999

Traducción: Bitez

Ilustraciones: Art&Maña

Diseño de cubierta: Art&Maña

Editor digital: Titivillus

ePub base r1.2

NOSFERATU Director del PATRONATO MUNICIPAL DE CULTURA José Antonio Arbelaiz - photo 3

NOSFERATU Director del PATRONATO MUNICIPAL DE CULTURA José Antonio Arbelaiz - photo 4

NOSFERATU. Director del PATRONATO MUNICIPAL DE CULTURA : José Antonio Arbelaiz. Director de NOSFERATU: José Luís Rebordinos. Equipo de redacción: Jesús Angulo, Sara Torres.

Kenji Mizoguchi: el hombre que amaba a las “geishas” [Jesús Angulo]
Historias de la luna pálida de agosto Cuentos de la luna pálida después de la - photo 5

Historias de la luna pálida de agosto / Cuentos de la luna pálida después de la lluvia

Kenji Mizoguchi:

el hombre que amaba a las geishas

JESÚS ANGULO

Kenji Mizoguchi zine japoniarrak inoiz izan duen zuzendaririk garrantzitsuenetako bat da. Bere karrera 1923 artean hasi zen Maitasuna itzultzen deneko eguna filmarekin eta 1956an amaitu zen Lotsaren katea filmarekin. Laurogei filmetik gora zuzendu zituen, eta hauen artean Znearen Historian klasiko bihurtu diren tituluak era badaude, hala Nota: Gioneko musikariak (1953). Yang Kurei-Fei enpertriza (1954) edo Sansho intendentea (1954).

K enji Mizoguchi nació en un barrio popular de Tokio el 16 de mayo de 1898, apenas un año después de la primera proyección cinematográfica celebrada en Japón, con un éxito arrollador, el 16 de febrero de 1897 en Osaka. Hijo de un carpintero, de esquiva suerte en los negocios, sus padres ya tenían una hija —Suzu, siete años mayor que él—, que jugaría un papel esencial en los primeros años de la vida del realizador. En una perfecta cadencia de siete años, después del nacimiento de Kenji llegaría su hermano Yoshio. No eligió el pequeño de los Mizoguchi el momento más oportuno para venir al mundo. Su padre, un desastroso emprendedor nato, había concebido la astuta idea de lanzarse a la fabricación de gabardinas, destinadas a guarecer a los soldados japoneses de los rigores de la guerra ruso-japonesa, que estalló en 1904. Para ello se endeudó más allá de lo razonable, sobre todo si tenemos en cuenta que un año después finalizaba la guerra con todo el stock destinado a unos soldados que volvían con alivio a casa. Zentaro Mizoguchi, el padre, intentó reconducir su modesta industria, transformando las gabardinas en cinturones. Los magros resultados económicos de esta reconversión apresurada poco contribuyeron a tapar el “agujero” al que había ido a parar su ingeniosa iniciativa. Con tres hijos que alimentar y la casa familiar embargada por sus acreedores, Zentaro tuvo la poco piadosa idea de deshacerse de su hija mayor a la que Kenji adoraba. La mayoría de las fuentes cuentan que vendió a Suzu a una casa de geishas. Sin embargo, Audie Bock afirma que su padre se limitó a entregarla en adopción y fueron, precisamente, sus padres adoptivos los autores de esa venta pocos años después. Sea como fuere, el pequeño Kenji nunca perdonó a su padre la forzada separación. A esto se suma el hecho de que, en las relaciones con su esposa —hija de un comerciante de medicinas chinas—, Zentaro no se privó de ejercer un autoritarismo que a menudo desembocaba en malos tratos.

Contrariamente a lo que se podría esperar, la suerte no fue esquiva con Suzu, que acabó siendo la protegida de un rico comerciante. Éste la llevó a vivir a su casa y acabó casándose con ella tras la muerte de su esposa. A decir de su condiscípulo en los estudios primarios Matsutarô Kawaguchi, que años después se convertiría en asiduo guionista de sus películas y uno de sus más íntimos consejeros, Kenji no era un alumno especialmente brillante. De hecho, su primera juventud fue un continuo dar tumbos en el terreno laboral. Fue precisamente Suzu quien, en 1913, le encontraría un empleo como ayudante de diseñador de kimonos veraniegos. Su trabajo consistía en realizar los dibujos destinados a su estampación. En 1915 su madre muere tras una larga y dolorosa enfermedad. Desaparecido el único lazo que le unía al hogar familiar, Mizoguchi se va a vivir con su hermana, que sería durante muchos años su protectora. Tres años antes, se había dado por finalizado el periodo Meiji, que había traído consigo la restauración de la autoridad imperial y que tan presente estuvo a lo largo de la filmografía de nuestro realizador, para dar paso al periodo Taishô, que acabaría por aprobar en 1925 la ley sobre derecho a voto de todos los ciudadanos adultos (varones, eso sí).

Cómodamente instalado bajo la protección de su hermana, Mizoguchi practicó efímeramente diversas ocupaciones laborales. Sin embargo, sus auténticas pasiones eran la literatura, el teatro clásico japonés y la pintura. Leía con voracidad, no sólo autores japoneses, sino también occidentales, con especial dedicación a Tolstoi, Zola y Maupassant. Frecuentaba las representaciones de kabuki (teatro nacional tradicional), (dramas líricos en los que música y danza juegan un papel esencial) y bunraku (teatro de marionetas). En cuanto a la pintura, a los diecisiete años se diplomó en el Instituto de Pintura Europea de Aoibashi, en Tokio. Respecto a sus trabajos de aquellos años, destaca su paso por un periódico de Kobe, en la tradicional región de Kansai, que tantas veces recrearía en sus filmes como quintaesencia de las tradiciones japonesas. Fue allí donde se sumergió por primera vez en los placeres de las geishas y la bebida.

No tardó mucho tiempo en volver a Tokio, siempre a la sombra de Suzu. Allí empezó a recibir clases de biwa, una especie de laúd japonés. Fue precisamente con su profesor de biwa con quien comenzó a frecuentar los estudios de la Nikkatsu, una de las dos primeras grandes productoras japonesas, junto a la Shôchiku. Su primer impulso fue el de convertirse en actor, algo para lo que no parecía estar especialmente dotado. En cambio, el director de la casa, Osamu Wakayama, le ofrece que colabore en sus guiones. En junio de 1921 el también realizador Tadashi Oguchi le incorpora a su equipo, ahora ya como ayudante de dirección. Los primeros años veinte conocieron en el cine japonés el auge de las

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «Kenji Mizoguchi»

Mira libros similares a Kenji Mizoguchi. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «Kenji Mizoguchi»

Discusión, reseñas del libro Kenji Mizoguchi y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.