Published in 2020 by The Rosen Publishing Group, Inc.
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Translator: Zab Translation Solutions
Book Design: Haley W. Harasymiw
Photo Credits: Cover © Richard Sargeant/Shutterstock; p..
ISBN: 9781725373303 (paperback)
ISBN: 9781725373310 (paperback)
Manufactured in the United States of America
CONTENIDO
¿CÓMO LLEGAMOS ALLÍ?
Vivimos en un mundo acelerado. Cada vez que necesitamos cercanos y más alejados.
Cada día, millones de personas toman trenes que van por arriba o por abajo de la tierra y recorren las grandes ciudades. Otros trenes transportan pasajeros por todo el país. Si bien hoy los trenes no se usan tanto como los automóviles, hubo un tiempo en que fueron la forma de más conocida e importante. De hecho, los trenes y el sistema ferroviario de Estados Unidos cambiaron la vida de los estadounidenses para siempre. Descubramos cómo.
¿Cómo llegas de un lugar a otro? ¿Alguna vez viajaste en tren?
EL INICIO DEL AUGE DEL FERROCARRIL
Los primeros ferrocarriles eran impulsados por animales, como caballos o mulas. Algunos inventores trataron de usar velas para crear trenes impulsados por el viento. En 1804, un inventor inglés llamado Richard Trevithick usó una máquina a vapor para mover un carro de cuatro ruedas por una vía. Esta fue la primera a vapor. Aún más sorprendente fue el hecho de que el carro fuera capaz de arrastrar 10 toneladas (9 toneladas métricas) de hierro, setenta hombres y cinco vagones. Esto era muchísimo más de lo que cualquier carro tirado por caballos podía lograr.
La carrera de 1830 entre la Tom Thumb y el carro tirado por caballos, que se muestra aquí, inspiró a muchos inventores a construir mejores trenes. El primer servicio ferroviario para pasajeros impulsado a vapor comenzó ese mismo año.
Pronto, los ingenieros de Estados Unidos comenzaron a construir locomotoras a vapor. El más exitoso fue Peter Cooper. En 1830, construyó una máquina a vapor que era más pequeña que las primeras locomotoras, pero igual de potente. Cooper la usó para impulsar una locomotora a la que llamó la Tom Thumb. Una carrera entre la Tom Thumb y un carro tirado por caballos captó mucha atención. La locomotora iba más rápido que el caballo, hasta que el motor se dañó cerca del final de la carrera.
para formar empresas más grandes que transportaban grandes cantidades de personas y mercancías.
A mediados de los años 1800, gran parte del medio oeste y el sudoeste de Estados Unidos todavía no estaba poblado. Los trenes podían transportar personas de un lugar a otro con increíble rapidez. Viendo esto, el Gobierno les ofreció tierras a las empresas ferroviarias para que construyeran vías que atravesaran las áreas menos pobladas. Como lo imaginaron, las nuevas vías ferroviarias atrajeron a los pobladores hacia estas regiones. El ferrocarril estaba impulsando el crecimiento de Estados Unidos.
El descubrimiento de oro cerca de Sacramento, California, en 1848, hizo que las personas buscaran nuevas formas de transporte para cruzar Estados Unidos. Antes de los trenes, las personas demoraban meses en viajar entre las costas este y oeste, y lo hacían en carromatos similares a estos.
LA CARRERA PARA CRUZAR EL PAÍS
En 1861, estalló la . Las vías ferroviarias tuvieron un rol muy importante en la victoria del Norte. Gran parte de las líneas ferroviarias se habían construido cerca de las fábricas y empresas en el norte, en lugar de las comunidades agrícolas en el sur. Por ello, el Norte tenía más trenes para transportar soldados, armas y víveres cuando lo necesitaban.
Incluso antes de que comenzara la guerra, algunas personas comenzaron planear un proyecto que cambiaría Estados Unidos.
Esta foto muestra a soldados del sur transportando un arma durante la Guerra Civil estadounidense.
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Presidente Abraham Lincoln
Uno de los mayores problemas que se encontraron durante la planificación del ferrocarril transcontinental fue determinar cuál era la mejor ruta. Afortunadamente, en los años 1850, Grenville Dodge, un joven ingeniero que durante años había apoyado la idea de un ferrocarril que atravesara todo el país, había encontrado una ruta hacia el oeste. Era un camino que habían usado los indios cheyenne y sioux y que corría junto a ríos y cruzaba las montañas Rocosas.
La empresa Union Pacific Railroad se decidió a seguir la ruta de Dodge. Theodore Judah, de la Central Pacific Railroad, logró encontrar una ruta hacia el este a través de la cadena montañosa de Sierra Nevada. Tanto Dodge como Judah se aseguraron de que sus caminos fueran lo suficientemente anchos y planos como para tender las vías.
Grenville Dodge
Theodore Judah
Una vez que la ruta estuvo elegida, llegó el momento de construirla. Cada empresa sabía que, según la Ley de Ferrocarriles del Pacífico, cuantas más vías ferroviarias se tendieran, más dinero y tierras recibirían del Gobierno. ¡Comenzaba la carrera por el tendido de la mayor extensión de vías ferroviarias!
Este cartel de la Union Pacific Railroad de 1867 anuncia una nueva sección de vías que conecta Omaha con North Platte, Nebraska.
Esta fotografía de 1866 muestra a un empleado de la Union Pacific, Samuel Reed, verificando la ruta antes del tendido de vías ferroviarias en Omaha.
Construir el tren transcontinental no era una tarea sencilla. Aun con la ayuda del Gobierno, ambas compañías tuvieron problemas para reunir los fondos. La Ley de Ferrocarriles del Pacífico de 1864 alivió la carga financiera.
Cada empresa contrató a miles de trabajadores para hacer el trabajo más pesado y riesgoso. Los trabajadores talaban árboles, quitaban rocas y removían el suelo. Hacían estallar las montañas para crear túneles. Disponían los durmientes de madera, uno al lado del otro. Luego colocaban pesados rieles de hierro sobre los durmientes. ¡Cada riel pesaba unas 700 libras (318 kg)! Por último, clavaban los rieles con estacas de hierro.
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