Bertrand de Witte - Domina el arte del liderazgo

Bertrand de Witte, 2017

Traducción: Laura Bernal Martín

Editor digital: Titivillus

ePub base r2.1

• ¿Problemática? ¿Cómo convertirse en un líder ejemplar?
• ¿Utilidad? Adquirir liderazgo permite sentirse plenamente realizado como líder, así como reforzar la motivación de los compañeros y lograr grandes objetivos.
• ¿Contexto profesional? Gestión de equipos, gestión de empresas
• ¿Preguntas frecuentes?
  • ¿Cuáles son las 12 cualidades esenciales del líder?
  • ¿Puede un gestor convertirse en líder?
  • ¿Puede un líder convertirse en gestor?
  • ¿Cómo construir la confianza en mi equipo?
  • ¿Cómo restaurar mi papel de líder si surgen juegos de poder en el seno de mi equipo?
  • ¿Ejercer liderazgo es manipular?
  • ¿Qué debe hacer un líder en una organización en la que no se valora el liderazgo?

El liderazgo se manifiesta en cuatro ámbitos principales: las empresas privadas, las asociaciones, la política y las fuerzas armadas. En este caso, nos centraremos en el liderazgo empresarial.

El liderazgo en el mundo profesional es una cualidad cuyo aprecio depende en gran medida de la cultura de la empresa. El liderazgo, cada vez más valorado, se inscribe hoy por hoy en las descripciones de funciones, en las evaluaciones anuales y en los programas de formación. Son numerosas las empresas que están desarrollando el liderazgo en el seno de su equipo de gestión. Los trabajadores ambiciosos intentan ejercer su propia influencia. El liderazgo es una ventaja para el jefe de equipo o para aquel que quiera acceder a este puesto.

«No estoy aquí para ver lo que mis equipos producen, o si trabajan correctamente. Estoy aquí para asegurarme de que los trabajadores han entendido su misión, de que tienen los medios necesarios para tener éxito, de que la colaboración funciona, y de que pueden desarrollar sus talentos. Hacemos dos sondeos anuales para saber si los responsables son people managers y si los trabajadores siguen estando inspirados y motivados».
Thierry Geerts – Country Manager – Google Bélgica-Luxemburgo.

Para evitar cometer errores que puedan ser perjudiciales para tu carrera profesional, este libro ofrece numerosos consejos, ilustrados por testimonios de expertos y de responsables de empresas muy variadas. Con estas herramientas podrás mejorar tus prácticas profesionales y tus competencias de líder, que se verán reforzadas y te guiarán hacia una carrera evolutiva y saludable. Te convertirán en un líder seguro de ti mismo y valorado por tu (futuro) equipo.

En este número tratamos las nociones esenciales para comprender el liderazgo tal como se presenta hoy en día en empresas. Comprenderás por qué el liderazgo es una ventaja competitiva, y cuál es la diferencia entre gestión y liderazgo. Más adelante, nos dedicaremos a identificar los aspectos que construyen a un líder y las competencias que están en juego. Finalmente, observaremos que existen distintos tipos de líderes y diferentes estilos de liderazgo y de gestión de equipos.

El resto del libro se destina a la puesta en práctica de estos elementos mediante consejos, preguntas y respuestas y, para concluir, la aplicación de un método para impulsar tu carrera profesional mediante la evolución de gestor de operaciones a mánager líder.

Liderazgo y gestión

Es necesario realizar una pequeña aclaración sobre los papeles de líder y de gestor, que a menudo se confunden. La distinción entre gestión y liderazgo la establecieron, entre otros, Abraham Zaleznik (1976) y John P. Kotter (1999). ¿Qué dicen estos dos autores?

• La gestión es el empleo de la autoridad para gestionar recursos y limitaciones con el fin de producir bienes o servicios. Para ello, el gestor utilizará su autoridad formal, una autoridad que le otorga su jerarquía y que confirma la descripción de su función: ha recibido la confianza de sus superiores para ejercer determinadas tareas. El gestor se encarga de administrar la complejidad, organiza y controla. Transforma los problemas en soluciones. Planifica y gestiona su equipo con vistas a corto y medio plazo. Se mueve en lo operativo, en el funcionamiento. En su reflexión, el gestor generalmente formula preguntas que comienzan por «Cómo».
• El liderazgo, en cambio, es la capacidad de ejercer una influencia para alcanzar objetivos. Un líder es capaz de entusiasmar a sus empleados para que se adhieran a una idea o a un proyecto, y de movilizarlos para lograr los objetivos fijados. Tiene una visión a largo plazo que comparte y en torno a la cual construye un equipo. El líder busca la respuesta de preguntas que empiezan a menudo por «Por qué».

Por consecuencia, demostrar liderazgo corresponde a un enfoque más emocional que en el caso de la gestión. El líder motiva a sus compañeros creando un sentimiento de pertenencia y mostrando su gratitud. También gestiona los cambios con habilidad enfrentándose a las incertidumbres. Sus actos y sus gestos se convierten en ejemplos a seguir e inspiran a sus compañeros a creer en él y en ellos mismos. Expresa las cosas aportando significado y coherencia. Apetece seguirle porque genera confianza.

A pesar de todo, la línea que separa al gestor del líder sigue siendo bastante fina. Los grandes directivos superponen de forma natural sus competencias de gestores y su liderazgo. No pueden separar la una de la otra.

«Antes que el término liderazgo prefiero el de dirigir, que reúne nociones relacionadas con la influencia, la relación, la escucha, la autoridad, la confianza, la creatividad, la coherencia entre actos y palabras, el sentido de equipo, la acción, la decisión y la reflexión.
Por ello, segmentar las palabras al distinguir entre líder y gestor para mí no tiene ningún sentido. Como comandante de buque de guerra que pasa largas semanas en zonas de crisis internacional, he aprendido a dirigir, es decir, a ordenar desde el centro de la acción, cuando ya no hay tiempo para el diálogo, y a gestionar en los intervalos, cuando hay tiempo para la preparación y el desarrollo de la solidaridad de la tripulación. Lo que debe guiar los actos de un líder potencial es ante todo el contexto espacio-temporal en el que se encuentra».
Almirante Olivier Lajous – exdirector de RR. HH. de la marina nacional francesa.

Liderazgo y cultura de empresa

Una persona con mucho liderazgo se desarrollará con mayor plenitud en una cultura de empresa que le deje un gran espacio a su creatividad.

De hecho, el liderazgo puede difícilmente ejercerse en una organización muy taylorizada, en la que el trabajo está dividido, las tareas son simples y repetitivas y los empleados están supervisados por un superior con poder coercitivo, en el seno de un sistema altamente directivo. El poder de decisión está centralizado en la cúspide de la jerarquía, lo que deja poco lugar a la toma de iniciativa. Si bien el trabajo en cadena simboliza este tipo de empresas, son numerosos los gestores que aún explotan el taylorismo en sus prácticas profesionales, tanto en los sectores industriales y comerciales como en la administración.

Por el contrario, las start-up, empresas llamadas ágiles o liberadas (Getz 2012), evolucionan teniendo en cuenta la inestabilidad y encontrando respuestas innovadoras con rapidez. En este tipo de modelo, la cultura de empresa valora la iniciativa y la innovación. El liderazgo es colaborativo, lo comparten equipos autónomos fieles a los valores y a la razón de ser de la organización.