El decenio 1956-1965 marca una época crítica para la ciencia ficción. La reciente respetabilidad del género motivó la atención, muchas veces peligrosa, del cine y la televisión. El inicio de la Era espacial en octubre de 1957 parecía confirmar aquello de que la realidad supera a la ficción.
Pero la crisis condujo a la renovación del género: cuantitativa, por la aparición de una pléyade de nuevos autores; cualitativa, por la revolución de la temática, que abandona de una vez por todas la fascinación por la cacharrería espacial, sentándose nuevas normas de calidad, como demuestra el presente volumen:
• Kenneth Bulmer - El bebé del señor Culpeper
• Brian W. Aldiss - Todas las lágrimas del mundo
• Robert Silverberg - Ozymandias
• Kate Wilhelm - El amor y las estrellas… ¡hoy!
• Daniel Keyes - El loco Maro
• J. G. Balllard - El hombre sobrecargado
• Harry Harrison - Las calles de Ascalón
• A. E. Van Vogt - Los sacrificables
• Arthur Porges - Niño problema
• John Brunner - Bueno es hablar, pero mejor es callar
Michael Ashley
(recopilador)
Los mejores relatos de ciencia ficción
La era del cambio
1956-1965
ePUB r1.0
GONZALEZ05.04.13
A mi madre,
por su fe y su paciencia
AUTORIZACIONES
• El bebé del señor Culpeper («Mr Culpeper’s Baby»), por Kenneth Bulmer:
© 1956 by Hamilton & Co. (Stafford) Ltd, por «Authentic Science Fiction», abril de 1956.
Reeditado con permiso del autor y su representante, E. J. Carnell Literary Agency.
• Todas las lágrimas del mundo («All the World’s Tears»), por Brian W. Aldiss:
© 1957 by Crownpoint Publications Ltd, por «Nebula Science Fiction», mayo de 1957.
Reeditado con permiso del autor.
• Ozymandias («Ozymandias»), por Robert Silverberg:
© 1958 by Royal Publications, Inc., por «Infinity Science Fiction», noviembre de 1958.
Reeditado con permiso del autor y su representante, A.M. Heath & Co. Ltd.
• El Amor y Las Estrellas… ¡Hoy! («Love and the Stars - Today!»), por Kate Wilhelm:
© 1959 by Columbia Publications, Inc., por «Future Science Fiction», junio de 1959.
Reeditado con permiso del autor.
• El Loco Maro («Crazy Maro»), por Daniel Keyes:
© 1960 by Mercury Press, Inc., por «Magazine of Fantasy and Science Fiction», abril de 1960.
Reeditado con permiso del autor.
• El Hombre Sobrecargado («The Overloaded Man»), por J. G. Ballard:
© 1961 by Nova Publications Ltd, por «New Worlds Science Fiction», julio de 1961.
Reeditado con permiso del representante del autor, John Wolfers Ltd.
• Las Calles De Ascalón («The Streets of Ashkalon»), por Harry Harrison:
© 1962 by Nova Publications Ltd, por «New Worlds Science Fiction», septiembre de 1962.
Reeditado con permiso del autor.
• Los Sacrificables («The Expendables»), por A. E. van Vogt:
© 1963 by Galaxy Publishing Corporation, por «Worlds of If Science Fiction», septiembre de 1963.
Reeditado con permiso del representante del autor, E. J. Carnell Literary Agency.
• Niño problema («Problem Child»), por Arthur Porges:
© 1964 by The Condé Nast Publications, Inc., por «Analog Science Fact & Fiction», abril de 1964.
Reeditado con permiso del autor.
• Bueno es hablar, pero mejor es callar («Speech is Silver»), por John Brunner:
© 1965 by Ziff-Davis Publishing Co., por «Amazing Stories», abril de 1965.
Reeditado con permiso del autor y su representante, John Farquharson Ltd.
NOTA DE AGRADECIMIENTO
Aunque la compilación de esta historia y antología es obra y responsabilidad mía, incluyendo sus posibles errores, no la habría efectuado de modo tan completo sin la inestimable ayuda de un gran número de personas. Entre ellas, me gustaría expresar especialmente mi agradecimiento a Brian Aldiss, Leslie Flood, Robert P. Mills, Frederick Pohl, E. C. Tubb y Donald Wollheim, quienes me proporcionaron numerosos y fascinantes detalles, no conocidos del público en general. Mis más expresivas gracias a Sam Lundwall, por su animosa colaboración, llevada más allá del deber, clarificando y detallando la información procedente de revistas en lengua extranjera. Gracias también a Thomas G. L. Cockroft, de Nueva Zelanda, por corregirme varios errores y evitarme muchos más. Y finalmente, como siempre, mi agradecimiento a Phil Harbottle, por su siempre disponible consejo y asistencia. Para ellos, y para todos aquellos a quienes involuntariamente haya omitido mencionar, mi gratitud más sincera.
PREFACIO
Mi intención en esta serie era relatar, de la forma más completa posible, la historia y el desarrollo de las revistas de ciencia ficción, mostrando cómo editores y autores trabajaron al unísono para elevar el nivel del género desde sus sencillos comienzos hasta convertirlo en una rama compleja y madura de la literatura. Pero todos los escritores y editores actuaron para su bien. He tratado de mostrar todos los estratos de la ciencia ficción. Inútil negar que la mayor parte de ella no vale nada, quedando así incluida en la ley general de Theodore Sturgeon según la cual el noventa por cien de todo es pura basura.
No obstante, lo bueno acaba siempre por imponerse, y la ciencia ficción se acepta ya como un verdadero género literario. La generación de autores que logró abrir brecha tiene sus raíces en las revistas de la década que cubre este volumen, de 1956 a 1965. Harlan Ellison, Robert Silverberg, Roger Zelazny, Thomas M. Disch, Brian Aldiss, J. G. Ballard… Todos ellos se incluyen en esa década turbulenta y problemática que vio el amanecer de la era espacial. Por aquella época, muchos escritores ajenos al tema dijeron: «Ahora que el hombre ha salido al espacio, ¿de qué van a escribir los autores de ciencia ficción? Aun ahora, tan absurda pregunta la repiten constantemente personas engreídas, incapaces de comprender y leer uno solo de los libros de ciencia ficción actuales. ¿Alguna vez la resolución de un crimen impidió que se siguieran escribiendo novelas policíacas?».
La prueba está aquí. La ciencia ficción no se detuvo cuando el Sputnik 1 fue lanzado al espacio. Todo lo más, el hecho sirvió para revitalizar el género. Puso fin a una época y dio vida a una perspectiva totalmente nueva.
Mientras escribo esto, el mundillo de las revistas de ciencia ficción ha entrado de nuevo en efervescencia. Desaparecen publicaciones, mientras que otras se adentran llenas de optimismo en este campo. La historia continúa en marcha.
El lector puede explorar a voluntad las interminables sorpresas de la cuarta década de las revistas de ciencia ficción, leyendo los diez relatos representativos que he seleccionado.
Mike Ashley
Febrero de 1976
Introducción
Reflujo y nueva ola
Mike Ashley
1
Treinta años en marcha
En abril de 1956, Amazing Stories celebró su trigésimo aniversario con un número especial de doble número de páginas. Incluía fundamentalmente catorce relatos —seleccionados en números atrasados de