Javier Pérez Campos - Los ecos de la tragedia

Hay historias que parecen destinadas a permanecer en el olvido, pero finalmente encuentran un camino para llegar al público, siempre interesado en descubrir la verdad. Ésta es una de ellas. Durante meses, el periodista Javier Pérez Campos se ha sumergido de lleno en la investigación de hechos que parecían prohibidos. Ha acudido allí donde un día la fatalidad cobró forma, generando un escenario de dolor y sufrimiento. Lugares donde numerosos testigos, que nada tienen que ver con lo que ocurrió, aseguran haber oído los ecos del pasado muchos años después. Desde Los Alfaques hasta tierras de Zamora, en un viaje de más de veinte mil kilómetros, el autor ha entrevistado a decenas de personas y ha encontrado documentos oficiales de las fuerzas de seguridad del Estado sobre fenómenos inexplicables: coches sin luces, extrañas figuras en la carretera, mensajes del más allá, siniestros personajes portadores de serias advertencias, pistas anónimas… Una aventura vertiginosa y auténtica que arroja luz sobre algunos de los episodios más oscuros de nuestra historia.

Javier Pérez Campos

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Titivillus 21.04.15

Título original: Los ecos de la tragedia

Javier Pérez Campos, 2013

Retoque de cubierta: Titivillus

Editor digital: Titivillus

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A todas las víctimas de la gran tragedia española de 1978

Y a quienes, aún hoy, aseguran haber escuchado sus ecos…

JAVIER PÉREZ CAMPOS (Ciudad Real, 1989) es un periodista español. Desde los 16 años colabora en diversos medios de comunicación divulgando sus investigaciones sobre el mundo del misterio. Ha participado en programas de Punto Radio, Onda Cero y Cadena SER, entre otros y escrito artículos en revistas como Año Cero o Más Allá. Es redactor del programa Cuarto Milenio, que dirige Iker Jímenez responsable de una sección en su versión radiofónica Milenio3.

[1] Uno de los últimos que entrevistaron a Palanques en relación con la tragedia de Los Alfaques antes de su defunción en septiembre de 2008 fue el periodista Iker Jiménez, que reprodujo sus palabras en su libro La noche del miedo

[2] Los periodistas Francisco Pérez Abellán y Manuel Escalera narrarían este hecho en sus crónicas para Diario 16

[3] Declaraciones ofrecidas por el periodista al programa radiofónico Milenio3 (Cadena SER) el 1 de septiembre de 2004.

[4] Aunque esta posibilidad ha sido muy discutida a lo largo de diversas investigaciones posteriores sobre la tragedia de Los Alfaques, testigos presenciales como el reportero José Palanques y otros que hicieron declaraciones a medios como ABC (14 de julio de 1978, p. 43) o Gaceta Ilustrada (agosto de 1978) confirmaron este hecho.

[5] Los medios de comunicación de toda Europa, especialmente franceses, alemanes y belgas, recurrieron a titulares como « L’enfer d’Alcanar » (el infierno de Alcanar). Le Soir, 12 de julio de 1978, p. 4.

[6] Daniel de la Fuente, «El camping parece haber sido bombardeado con napalm», La Nueva España, 13 de julio de 1978, p. 5.

[7] Con el fin de salvaguardar su identidad, la propia testigo ha pedido que se emplee un seudónimo para referirse a ella.

[8] San Carlos de la Rápita, en la provincia de Tarragona, es conocido también por su topónimo acortado, La Rápita. El pueblo se encuentra situado a menos de diez kilómetros del camping Los Alfaques.

[9] «Llegan a Alemania y Bélgica los heridos del camping de Tarragona», La Nueva España, 13 de julio de 1978, p. 4.

[10] «Toda la prensa europea dedica sus primeras páginas a la catástrofe», ABC, 13 de julio de 1978, p. 46.

[11] «Los teléfonos de la Embajada alemana, bloqueados», ABC, 12 de julio de 1978, p. 33.

[12] «Radiografías de boca y huesos para identificar los cadáveres», ABC, 13 de julio de 1978, p. 44.

[13] «Hay gente sin nariz, sin labios. Ni una bomba hubiera hecho algo así», Diario 16, 12 de julio de 1978, p. 16.

[14] Concepto que viene a representar una «forma pensamiento» o «mente colectiva de grupo», es decir, una visión generada por una especie de mente colectiva, en ocasiones del subconsciente, como definiría el investigador Gaetan Delaforge en la revista Gnosis en 1987.

[15] El artículo publicado por Interviú, «¿Crimen sin culpables?», firmado por Juan Antonio Hervada justo un año después del accidente, hablaba de «un exceso de carga de 4100 kilos». También el semanario El Caso apuntó dicha cantidad el 30 de enero de 1982, en el artículo titulado «El camión era una bomba ambulante». Además, en palabras del fiscal, recogidas en su escrito de conclusiones provisionales y publicadas por el periódico El País en su edición del 11 de julio de 1980: «el servicio de cargadero carecía de contador, no poseía parada automática de llenado ni sistema compresor que permitiera eliminar posibles excesos de carga en circuito. La eventualidad de sobrellenado sólo podía ser constatada en báscula a la salida de la factoría, por la diferencia de peso en tara y peso en carga, y remediada mediante decisión del conductor, exigiendo la destrucción del exceso a través de antorcha».

[16] «El propileno sirve para la fabricación de plásticos, neumáticos y adhesivos», ABC, 12 de julio de 1978, p. 35.

[17] «Más de cinco mil camiones cisterna circulan en España», ABC, 13 de julio de 1978, p. 45.

[18] «Technology Economics Program: Propylene Production from Methanol», Intratec Report #TEC002A, Q2-2012 . ISBN: 978-0615-64811-8.

[19] M. Box, «El camión era una bomba ambulante», El Caso, 30 de enero de 1982, pp. 11-12 .

[20] «El conductor del camión obró mal al abandonar la autopista», ABC, 13 de julio de 1978, p. 45.

[21] «El siniestro (doscientos quince muertos) se debió a una serie de fallos técnicos», ABC, 11 de julio de 1980, p. 41.

[22] Pedro Costa Muste, «Tragedia en el camping: Así mata el progreso», Interviú, 20 de julio de 1978, p. 48.

[23] «Un camión cargado con gas inflamable calcinó un camping repleto de turistas», Diario 16, 12 de julio de 1978, p. 14.

[24] Varios supervivientes coincidirían en dicha apreciación. En declaraciones de uno de ellos para Interviú: «No vi el fuego. Lo primero que vi fue una luminosidad extraña, blanquecina, y luego vino la explosión. En un primer momento, y hasta varias semanas después, pensé que había sido un fenómeno natural, un meteorito» (Pedro Rodríguez, «Y viven para contarlo», Interviú, 4 de marzo de 1995, p. 63).

[25] Francisco Pérez Abellán y Manuel Escalera, «Los Alfaques: Morirán muchos heridos», Diario 16, 12 de julio de 1978, p. 15.

[26] «El conductor del camión obró mal al abandonar la autopista», ABC, 13 de julio de 1978, p. 45.

[27] Francisco Pérez Abellán y Manuel Escalera, «Los Alfaques: Morirán muchos heridos», Diario 16, 12 de julio de 1978, p. 15.

[28] Juan Antonio Hervada, «La muerte llegó silbando», Interviú, julio de 1979, p. 39.

[29] «Un camión cargado con gas inflamable calcinó un camping repleto de turistas»,