• Quejarse

Thomas Wright - La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey

Aquí puedes leer online Thomas Wright - La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 2016, Editor: Fondo de Cultura Económica, Género: Historia. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

Thomas Wright La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey
  • Libro:
    La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey
  • Autor:
  • Editor:
    Fondo de Cultura Económica
  • Genre:
  • Año:
    2016
  • Índice:
    4 / 5
  • Favoritos:
    Añadir a favoritos
  • Tu marca:
    • 80
    • 1
    • 2
    • 3
    • 4
    • 5

La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

Thomas Wright: otros libros del autor


¿Quién escribió La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

BREVIARIOS del FONDO DE CULTURA ECONÓMICA Traducción VIRGINIA AGUIRRE MUÑOZ - photo 1 BREVIARIOS del FONDO DE CULTURA ECONÓMICA Traducción VIRGINIA AGUIRRE MUÑOZ Thomas Wright La circulación de la sangre LA REVOLUCIONARIA IDEA DE WILLIAM - photo 2 Thomas Wright La circulación de la sangre LA REVOLUCIONARIA IDEA DE WILLIAM HARVEY Primera edición en inglés 2012 Primera edición en español 2016 Primera - photo 3 Primera edición, en inglés, 2012 Primera edición, en español, 2016 Primera edición electrónica, 2016 Título original: Circulation. William Harvey’s Revolutionary Idea Copyright © Thomas Wright, 2012 Diseño de portada: Paola Álvarez Baldit D. R. © 2016, Fondo de Cultura Económica Carretera Picacho-Ajusco, 227; 14738 Ciudad de México Comentarios: Tel. (55) 5227-4672 Se prohíbe la reproducción total o parcial de esta obra, sea cual fuere el medio. son propiedad exclusiva del Fondo de Cultura Económica y están protegidos por las leyes mexicana e internacionales del copyright o derecho de autor. ISBN 978-607-16-4292-9 (mobi) Hecho en México - Made in Mexico ÍNDICE GENERAL I. II. III. IV. V. VI. VII. VIII. X. XI. XII. XIII. XIV. XV. Para S. Para S.

G., cor cordium ¿Uso de la facultad poética en la ciencia? Recordemos que los antiguos griegos tenían previsiones místicas de casi todas las grandes verdades científicas modernas; en realidad el problema es qué lugar ocupan la imaginación y las emociones en la ciencia, y sobre todo recordemos que el hombre debe usar todas sus facultades en busca de la verdad. En esta era somos tan inductivos que nuestros hechos están rebasando nuestro conocimiento, hay tanta observación, tantos experimentos y tanto análisis, y tan pocas concepciones generales… queremos más ideas y [menos] hechos; las magníficas generalizaciones de Newton y Harvey no podrían haberse realizado nunca en esta edad moderna donde la mirada se dirige a la tierra y lo particular. OSCA R WILDE, Oxford Notebooks PREFACIO En 1628 William Harvey publicó su revolucionaria teoría de la “circulación” acerca del movimiento de la sangre. Esta teoría echó por tierra siglos de ortodoxia anatómica y fisiológica e introdujo un concepto innovador del funcionamiento del cuerpo humano que tuvo profundas consecuencias culturales, pues influyó por igual en economistas, poetas y pensadores políticos. podría decirse que la repercusión que tuvo en lo que hoy conocemos como la “historia de la ciencia”, y en la cultura en general, fue tan importante como la teoría de la evolución de Darwin y la teoría de la gravedad de Newton. Harvey fue uno de los grandes héroes del Renacimiento inglés.

Iluminó Inglaterra con la llama del aprendizaje continental, tras forjar los cimientos de su visión intelectual en la Universidad de Padua. En el proceso, adquirió la fama entre sus contemporáneos ilustrados de ser el primer inglés con una profunda “curiosidad en la anatomía” y por hacer vivisecciones de “ranas, sapos y otros varios animales”. También se le reverenciaba por ser el único hombre en la historia que había logrado ver en vida una amplia aceptación de su revolucionaria idea. Sin embargo, a pesar de todo ello, Harvey no es tan conocido como muchos otros “científicos” (para usar un término del siglo XIX) ingleses o, en realidad, como muchos otros ingleses e inglesas notables de su época. Su vida y el relato de su búsqueda para entender el movimiento de la sangre y el funcionamiento del corazón merecen ser más difundidos. La circulación de la sangre presenta ese relato: es, en la misma medida, la biografía de una idea y la de un hombre.

Descendiente de pequeños hacendados del condado de Kent, William Harvey abrigaba dos grandes ambiciones: la prosperidad terrenal y la inmortalidad intelectual. Consideraba, al igual que William Shakespeare, que estas metas guardaban una estrecha relación. Para estos dos hijos de la burguesía inglesa, los logros intelectuales constituían la única vía para el ascenso social. Las dos ambiciones de Harvey también se vinculaban en un sentido práctico: sólo alcanzando el éxito material y haciéndose de un nombre como médico podría ganar tiempo para sus investigaciones y adeptos para su teoría. Nadie habría prestado atención a sus ideas insólitas de no haber contado con el apoyo del presidente del Colegio de Médicos o de su amado benefactor, el rey Carlos I. El ascenso profesional y social de Harvey establece el telón de fondo para mi relato de sus estudios anatómicos privados.

En la primera parte pongo de relieve su progreso terrenal, junto con su formación intelectual. La historia de su búsqueda propiamente dicha comienza en la segunda parte, donde describo sus incontables “experimentos” (como los llamaremos) en cadáveres humanos y animales vivos, y trazo la evolución de su idea revolucionaria. Los experimentos de Harvey —la disección y la observación— eran cruciales para su teoría. Sin embargo, pienso que su trabajo más importante no lo hacía con las manos y la mirada, sino con el cerebro. Debemos recordar que Harvey era un filósofo naturalista, embarcado en una empresa abiertamente filosófica, más que un prototipo del científico inductivo moderno; vestía jubón y medias, no una bata de laboratorio. Recordemos también que en su época la teoría de la circulación estaba lejos de ser evidente y no podía demostrarse por medio de los sentidos.

Así como era imposible que la gente viera la sangre corriendo por las arterias y las venas, entrando en el corazón y saliendo de él, tampoco podía percibir que la tierra giraba sobre su eje. Además, la teoría no tenía en su favor el peso de los datos “empíricos” (en todo caso, los datos empíricos no eran la prueba irrefutable de la verdad en el siglo XVII). La teoría de Harvey nació, y habría de triunfar, como una idea filosófica. El Harvey que recorre las páginas de este libro es un pensador; para ser más específicos, un pensador del siglo XVII. Poseía una mente increíblemente sensible al espíritu intelectual y cultural de su era, y sus ideas eran la expresión de ese espíritu. Por eso coloqué su obra en el contexto académico, cultural y social más amplio de su tiempo, en una serie de ensayos temáticos intercalados con los capítulos cronológicos.

En algunos, comparo las ideas de Harvey con las de poetas, dramaturgos, economistas, alquimistas y predicadores de la época, y considero la influencia que tal vez tuvieron ellos en su teoría; en otros, abordo la manera en que Londres y la tecnología de esos años dieron forma a su pensamiento. En los ensayos, que evocan el mundo del Renacimiento tardío en el que vivió Harvey, se ofrece al lector la oportunidad de atisbar en una notable mente del siglo XVII y entablar un diálogo con una cultura rica y extraña. Uno de los rasgos desconocidos de la cultura intelectual de aquel siglo es su homogeneidad: mientras que hoy la ciencia y las humanidades constituyen dos culturas distintas y muy especializadas, en aquella época un teólogo podía entender a un astrónomo sin mayor problema, y los estudiantes de leyes y los poetas asistían a lecciones de anatomía. Una gran afinidad, basada en un lenguaje compartido y un conjunto común de ideas y objetivos, conectaba todas las disciplinas entre sí. Estos conceptos y metáforas configuraron el paisaje de la imaginación de Harvey y determinaron los desplazamientos de su mente. Dieron forma y lugar a su teoría de la circulación, que nació orgánicamente, aunque no definida por completo, de la cultura del periodo.

Muchos de los documentos de investigación de Harvey fueron destruidos adrede en un acto de vandalismo político durante la Guerra Civil inglesa. Algunos de los manuscritos que compiló después se consumieron en las llamas del Gran Incendio de 1666, junto con su biblioteca personal. Sin embargo, hay muchas otras fuentes primarias disponibles, en las que fundamento mis conjeturas sobre sus investigaciones. ¿Usó Harvey a sus sirvientes como conejillos de Indias? No hay manera de saberlo, pero otros filósofos naturalistas contemporáneos sí lo hicieron (Robert Boyle llegó al grado de dar veneno a los suyos), de modo que mi planteamiento es que Harvey siguió la regla general. ¿Cómo era la sala de investigación privada de Harvey? Tampoco lo sabemos, pero he hecho una reconstrucción imaginaria a partir de referencias en sus escritos y las descripciones de las salas de otros filósofos naturalistas. Para todos los episodios dramatizados de este libro recurrí a fuentes que han llegado hasta nosotros.

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey»

Mira libros similares a La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey»

Discusión, reseñas del libro La circulación de la sangre. La revolucionaria idea de William Harvey y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.