Índice
Gracias por adquirir este eBook
Visita Planetadelibros.com y descubre una
nueva forma de disfrutar de la lectura
Sinopsis
Timothy Morton argumenta en este nuevo libro que la conciencia ecológica adopta, en la actual época antropocena, una extraña forma de bucle o cinta de Möbius. Tomando como punto de partida al personaje de Deckart de Blade Runner (1982), que se da cuenta de que él mismo podría ser el enemigo al que le han ordenado perseguir, Morton sugiere que esta misma situación se da con los fenómenos ecológicos, pues, al estar todo conectado, nos hemos convertido en enemigos de nosotros mismos.
Ecología oscura
Sobre la coexistencia futura
Timothy Morton
Traducción de Fernando Borrajo
Las Conferencias de Teoría Crítica de la Biblioteca Wellek se imparten todos los años en la Universidad de California (Irvine), bajo los auspicios del Critical Theory Institute. Las siguientes conferencias se pronunciaron en mayo de 2014.
G ABRIELE S CHWAB,
directora de The Critical Theory Institute
Para Allan
Asombrosa era la pureza del sentimiento de pérdida: en cierto sentido es porque los seres no humanos no hacen tan buenos oficios con los seres humanos. Es decir, tú sabes que tu abuela, o quien fuere, está enferma y que hay un hospital, hay algún marco temporal. Aparte de que el «exterior» (ya debería saberlo a estas alturas) es en realidad el interior (humano), así que se parece extrañamente a perder a un hijo en la guerra. Es una zona de guerra contra los seres no humanos.
Al gato lo atropelló el furgón de Correos, pues el nuevo cartero tenía la costumbre de subirse a la acera. Lo peor es que intentó llegar a casa con el cuello y la cabeza aplastados, de modo que me lo encontré justo delante de su caseta, en pleno rigor mortis. Lo enterramos como a un egipcio, con sus cosas favoritas, y enseguida le hicimos unas exequias budistas. Durante los días siguientes estuvimos sumidos en la depresión, que poco a poco se fue diluyendo.
No lo asesinaron, aunque por un momento la brutalidad del golpe parecía indicarlo. Una amiga mía tenía un gato al que sí mataron; lo mató un psicópata que luego le enseñó el cadáver metido en el congelador. No obstante, Allan Whiskersworth fue un «daño colateral» del «fuego amigo». Los gatos simbolizan de manera extraña la ambigua frontera entre la logística agrícola y su (indeslindable) exterior. A los perros no los dejamos sueltos por ahí. Es como si quisiéramos usar a los gatos para convencernos a nosotros mismos de que existe la naturaleza. Allan era muy feliz erizándose entre la hierba y charlando con su amigo, el gato gris. Vivió a lo Neil Young (ardiendo) y murió con solo dos años de edad. Siempre me gustó la respuesta de John Lennon, cuando dijo que prefería mil veces desvanecerse (y mira lo que le pasó).
Justo después de su muerte, el gato gris Caronte vino a presentar sus respetos; no había venido antes y no volvió a venir jamás.
Progreso significa «la humanidad emerge de su estado de alelamiento, ya sin el hechizo del progreso, naturaleza ella misma, tomando conciencia de su propia autoctonía y deteniendo la dominación de la naturaleza mediante la cual la naturaleza continúa su dominación».
T HEODOR A DORNO
La oscuridad es peligrosa. No se ve nada en la oscuridad, y tienes miedo. No te muevas, que te puedes caer. Sobre todo, no te adentres en el bosque. Y así hemos interiorizado ese horror a la oscuridad.
H ÉLÈNE C IXOUS
Empezar después del final
Hay pensamientos que podemos prever atisbándolos a lo lejos, en las vías de pensamiento existentes.
Hay un futuro que no es más que la prolongación del presente.
Hay un «aún no presente» que nunca llega; y sin embargo aquí estamos pensándolo en el paradójico destello de esta misma oración.
Si queremos un pensamiento distinto del presente —si queremos cambiar el presente—, entonces el pensamiento debe ser consciente de esa clase de futuro.
No es un futuro que nos permita progresar.
Este futuro es impensable. Y, sin embargo, aquí estamos, pensándolo.
Al coexistir, estamos pensando en la coexistencia futura. Previéndolo y aún más: dejando abierto lo imprevisible.
Pero un futuro así, el futuro abierto, se ha vuelto tabú.
Porque es real, aunque esté más allá de cualquier concepto.
Porque es raro.
El arte es pensamiento procedente del futuro. De momento no podemos pensar de manera explícita en el pensamiento. No podemos, de ningún modo, pensar en el pensamiento ni hablar de él.
Si queremos un pensamiento distinto del presente, entonces el pensamiento debe virar hacia el arte.
Ser una cosa —una piedra, un lagarto, un ser humano— es estar girando.
¡Cómo ansía el pensamiento girar y retorcerse como la poesía serpentina!
¿O está el arte virando hacia el pensamiento? ¿Llegará alguna vez?
Los hilos del destino nos han atado la lengua.
Trabalenguas propensos al sinsentido.
La lógica contiene sinsentidos, siempre y cuando digan la verdad.
La lógica del sinsentido.
La aguja se saltó el surco del presente.
En este bosque oscuro ya te has adentrado.
Presente significa para mí «durante los últimos doce mil años». Un interminable beso de mariposa.
El primer hilo
Cada grito de la liebre herida arranca una fibra del cerebro
¿Qué está pasando?
El campo ya estaba «abierto», es decir, ya habían segado una faja de pocos centímetros de ancho en el trigo, en torno a todo el campo, a fin de que pudieran entrar por allí los caballos y la máquina.
Dos grupos, de hombres y mozos el uno y de mujeres el otro, habían llegado por el camino a la hora en que las sombras de las puntas del seto oriental se proyectaban a mitad de la altura del seto de poniente, de forma que las cabezas de aquellas gentes gozaban ya del amanecer, mientras sus pies permanecían todavía en el crepúsculo [...].
En aquel instante se dejó oír un rumor parecido al que produce la langosta en la época del celo. Había empezado la máquina, y desde el portón se veía avanzar un tiro de tres caballos y la destartalada máquina susodicha [...]. El tren agrícola avanzó, siguiendo una de las lindes del campo, y los brazos de la segadora giraron en pausada revolución [...].