Introducción
Todos los estudiantes de inglés tienen preguntas: “¿Cuál es la diferencia entre specially y especially ?”, “¿Es further o farther ?”, “¿En serio que en inglés no se dice footing ?”, “¿Por qué los ingleses dicen sorry todo el tiempo?”, “¿Los phrasal verbs son demasiado informales para un texto escrito?”, “¿Qué demonios es un phrasal verb ?”... Tener preguntas es algo normal en un proceso de aprendizaje. También lo es encontrar respuestas.
Los tres autores de este libro somos profesores de inglés en el British Council de Madrid y, si sumamos nuestra experiencia profesional, superamos los cincuenta años de docencia aquí, en España. Como es fácil imaginar, durante todo ese tiempo hemos podido detectar sobre el terreno muchas de las preguntas que se plantean los hispanohablantes al afrontar el aprendizaje del inglés. En este libro hemos intentado dar respuesta a algunas de las que encontramos con mayor frecuencia en nuestras clases.
Conviene subrayar, por tanto, que las distintas dudas que aquí se recogen se basan en las preguntas que suelen hacernos nuestros alumnos y no son, necesariamente, los 500 errores que los hispanohablantes, en general, cometen con más frecuencia. Seguramente existe un alto grado de coincidencia entre las preguntas que nos plantean en clase y los errores que cometen los hispanohablantes que aprenden inglés en todo el mundo, pero no son la misma cosa. Las dudas que resolvemos aquí son las que nos plantean nuestros alumnos, a nosotros tres y a nuestros colegas.
La mayoría de esas dudas son bastante concretas, así que la mayoría de las respuestas que damos en este libro también lo son. Como es evidente, a menudo existen distintas maneras de plantear lo que es, básicamente, una misma duda sobre un mismo tema. Por ello hemos procurado titular cada entrada con la pregunta concreta con que más a menudo nuestros alumnos formulan sus dudas sobre un determinado asunto. Cuando esto no nos ha parecido adecuado, hemos optado por un título más genérico y/o sintético.
Por lo demás, hemos intentado responder a las distintas cuestiones como lo haríamos en clase. Siempre que ha sido posible, hemos empezado cada artículo con una respuesta corta y directa a la pregunta concreta que se plantea en el título, aportando ejemplos. Si lo que se necesita es una respuesta sencilla, se puede leer solo esa parte. Pero si uno sigue leyendo, encontrará una exposición más detallada. Esto no siempre es fácil. En inglés no existe un equivalente a la Real Academia Española, así que a menudo encontraremos distintos puntos de vista sobre cuál debería ser la respuesta correcta y varias teorías enfrentadas sobre la razón de esto o aquello.
Sin embargo, igual que sucede en nuestras clases, no nos detenemos ahí, porque los estudiantes de cualquier materia solo pueden hacer preguntas sobre lo que saben que no saben. Pero, ¿qué pasa con lo que no saben que no saben? Examinando ejemplos lingüísticos parecidos, analizando áreas relacionadas con la duda planteada o, algunas veces, recurriendo incluso un poco a la historia, esperamos ayudar al lector/estudiante a entender mejor el inglés, lo que, a su vez, le hará sentirse más seguro en su relación con el idioma y le permitirá avanzar con mayor rapidez.
Por si eso no fuera suficiente, al final de algunas entradas hemos añadido un apartado con información adicional que, sin ser estrictamente necesaria, pensamos que puede resultar de interés para complementar la explicación. Dicha información aparece bajo el encabezado ¿L O SABÍAS ?
Como cierre de muchas entradas puede aparecer también otro apartado titulado P ARA SABER MÁS , una invitación a moverse por el libro y viajar hasta otras “dudas” de otros capítulos donde se abordan aspectos del lenguaje similares a los tratados en la entrada que se acaba de leer, o relacionados de algún modo con ella. Este sistema de referencias internas amplía la variedad de consultas que el libro puede ayudar a resolver.
Como se puede suponer, todo esto significa que, aunque el título del libro hace referencia a 500 dudas, se aportan respuestas a muchas, muchas más. Así que, si no se encuentra un artículo que responda a la pregunta exacta que uno se plantea, conviene buscar entradas en cuyos títulos se reflejen dudas parecidas. El índice que aparece al final del libro puede ayudar a encontrarlas.
Esperamos que esta pequeña obra sea de gran utilidad para los estudiantes de inglés, y a todos ellos les decimos: ¡ánimo y mucho éxito!
D ANIEL B RINT ,M ICK G REEN ,K AY W ELSH
(junio 2016)
SIGNOS, MARCAS Y RECURSOS GRÁFICOS UTILIZADOS
¿Es correcto o no?
Muchos ejemplos aparecen marcados con alguno de los cuatro símbolos siguientes:
Cuando solo incluimos ejemplos adicionales sobre un determinado aspecto del idioma —normalmente en párrafos posteriores— no los hemos marcado con símbolos.
¿Inglés británico o inglés americano?
Aunque las diferencias entre ambas variantes del inglés se suelen exagerar —especialmente en lo que respecta a vocabulario y ortografía—, un gran número de entradas del libro hacen referencia al inglés británico (identificado como UK) y al inglés americano (identificado como USA).
El hecho de que nos limitemos a esas dos variantes del idioma no obedece a una intención de menospreciar el inglés que se habla en lugares como la India, Sudáfrica o Australia, sino a cuestiones más prosaicas de tiempo y espacio. No obstante, conviene precisar que, en su conjunto y mayoritariamente, se trata de la misma lengua, se hable donde se hable. Teniendo esto en cuenta, y a menos que se indique lo contrario, las referencias al inglés británico se aplican también al inglés que se habla en Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y el subcontinente indio. El caso de Canadá es un poco especial, ya que, aunque se considera dentro de la variante americana, en lo que a ortografía se refiere sigue básicamente las pautas del inglés británico.
Terminología
Publicar en español un libro sobre inglés significa que nos hemos visto constreñidos por la necesidad de simplificar las explicaciones, como sucede en la mayoría de los libros destinados al aprendizaje del inglés. Por otra parte, nos enfrenta con el problema de qué terminología utilizar. En el caso de muchos términos sencillos cuya traducción es muy evidente, hemos optado por utilizar el término castellano ( verbo en lugar de verb , por ejemplo).
Sin embargo, en otros casos, o bien no existe un verdadero equivalente en castellano o, a pesar de que la traducción parezca bastante evidente y directa, los límites de un término, o el concepto que este representa, son bastantes distintos. En estos casos, hemos conservado el término inglés. Estamos seguros de que, en este tipo de casos, cualquier estudiante del idioma estará familiarizado la mayoría de las veces con la terminología ( phrasal verb, past participle, present perfect ). Cuando se trate de términos menos frecuentes, se podrán encontrar sus definiciones bien en el propio artículo donde aparezcan, bien en el Glosario de términos ingleses (⇒ pág. ).
En este libro, el término infinitivo hace referencia a la forma sin to (por ejemplo, have ). Cuando se requiere la versión con to se especifica que se trata de “infinitivo con to ” (por ejemplo, to have ).
Pronunciación
Para mostrar la pronunciación usamos los símbolos fonéticos. Sabemos que habrá lectores que no estén muy familiarizados con estos símbolos, pero es el único sistema coherente. Cuando consultes el libro, verás que en muchas ocasiones, además de poner los símbolos, también hemos incluido una palabra que comparte el mismo sonido.
Cerrando esta introducción aparece una tabla con los caracteres fonéticos que representan los sonidos del inglés y un ejemplo de cada uno, que se puede usar como referencia. Merece la pena explicar tres puntos: