Constantin Maes - Miguel de Cervantes

• ¿Nombre? Miguel de Cervantes Saavedra.
• ¿Nacimiento? Nacido en torno al 29 de septiembre de 1547 en Alcalá de Henares (España).
• ¿Muerte? Enterrado el 23 de abril de 1616 en Madrid (España).
• ¿Contexto? Cervantes vive en un periodo de declive político para España, pero este debilitamiento se ve compensado por una intensa efervescencia cultural que llega a todas las artes y, más en especial, a la literatura.
• ¿Obras principales?
  • El cerco de Numancia (1585)
  • La Galatea (1585)
  • El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, abreviado como El Quijote (dos volúmenes publicados en 1605 y en 1615)
  • Novelas ejemplares (1613)
  • Los trabajos de Persiles y Sigismunda (1617)

Miguel de Cervantes, autor español imprescindible de los siglos XVI y XVII, está considerado a menudo el escritor más importante de la península ibérica. Proviene de una familia relativamente modesta y lleva una vida casi tan azarosa como la de sus protagonistas. Cervantes, que ejerce como criado de un futuro cardenal y, a continuación, pasa a ser soldado, prisionero de guerra, recaudador de impuestos y fugitivo implicado en un asesinato, logra sacar tiempo para componer poemas, obras de teatro, novelas cortas y novelas entre 1569 y el momento de su muerte.

Cabe señalar que este escritor rebelde se inscribe en un contexto cultural tremendamente estimulante: el Siglo de Oro español. Aunque, en el plano político, España ha iniciado su declive, su producción artística es especialmente abundante. Pintores, escritores, arquitectos y músicos ponen a prueba su imaginación para ofrecer a su país algunas de sus mejores obras maestras. No obstante, frente a las innovaciones de los dramaturgos y de los poetas de su época, Cervantes no da la talla, a pesar de su innegable talento; por lo tanto, serán sus novelas cortas y extensas las que marcarán la historia de la literatura. Cuando parodia antiguos modelos, en particular los relatos de caballería, termina de dar forma a la novela picaresca, un relato de aventuras donde el número de situaciones estrafalarias equivale a la variedad de personajes con los que los protagonistas se encuentran. Su famoso Don Quijote, que el escritor imagina mientras está en la cárcel, sigue a día de hoy fascinando a los lectores de todo el mundo por su humor y por su carácter absurdo.

Entre 1925 y 1930, en la plaza de España de Madrid, se erige un monumento en recuerdo de Cervantes, realizado por los arquitectos Rafael Martínez Zapatero y Pedro Muguruza, y por el escultor Lorenzo Coullaut Valera. Este hecho revela la importancia del autor en la literatura española. El monumento está conformado por esculturas de piedra que representan a Cervantes (en el centro) y a Aldonza Lorenzo, más conocida en El Quijote como Dulcinea del Toboso, así como por dos esculturas en bronce en las que se reconoce a don Quijote y a su escudero, Sancho Panza.

Retrato de Miguel de Cervantes.

Cervantes, nacido en 1547, probablemente el 29 de septiembre, en Alcalá de Henares, al lado de Madrid, proviene de una familia relativamente modesta. Poco se sabe sobre su madre, Leonor de Cortinas Sánchez, mientras que su padre, Rodrigo de Cervantes (1509-1585), es un cirujano un tanto problemático que reivindica una ascendencia noble, pero que en realidad es hijo de un médico de Córdoba. Rodrigo de Cervantes, que con frecuencia tiene problemas con la justicia y está endeudado, habría llevado a su esposa y a sus cinco hijos a merced de sus andanzas, según cuentan los rumores.

Se sabe que la familia de Miguel de Cervantes pasa por Valladolid y por Córdoba, pero lo cierto es que los primeros años de su vida siguen siendo bastante inciertos. El primer dato seguro que tenemos sobre él data de 1566: el joven es el alumno de un humanista madrileño, Juan López de Hoyos (1511-1583), que en 1569 publicará los primeros intentos poéticos del escritor.

En 1568, Cervantes toma parte en una misteriosa trifulca. ¿Se trata de un duelo por amor o de una pelea motivada por otra razón? Resulta imposible saberlo, pero un decreto real ordena el arresto de un hombre llamado Miguel de Cervantes, que habría herido a un tal Antonio de Sigura. ¿Es él? De nuevo, no podemos afirmarlo con total seguridad. Sin embargo, lo que sí puede comprobarse es que Cervantes se va precipitadamente a Italia en esa misma época. En Roma, se pone al servicio de un futuro cardenal, Giulio Acquaviva (1546-1574) y ejerce como su secretario.

Sin embargo, esta etapa de tranquilidad dura poco: por motivos difusos, bien porque no puede alargar su función junto a Acquaviva, bien porque quiere reafirmar su identidad como auténtico español de origen —dado que su familia tiene muchos rasgos de los judíos conversos, pesan sospechas sobre sus raíces en esta época—, Cervantes ingresa en el ejército. Tras haber saqueado varias regiones de Italia, triunfa a las órdenes de Juan de Austria (1545-1578), el hermanastro de Felipe II. En este contexto, participa en 1571 en la batalla naval de Lepanto, cuyo objetivo es frenar el avance otomano por el Mediterráneo. Aunque pierde la movilidad en su mano izquierda, sigue formando parte de las campañas del ejército austriaco durante unos años, antes de iniciar su regreso a España en 1575.

La expansión del Imperio otomano

El Imperio otomano (1299-1923) es una de las potencias más importantes de la Edad Media y de la era moderna. Se forma en la actual Turquía, con Constantinopla como capital a partir de 1453, y en su momento más álgido se extiende por Oriente Medio y Próximo y las costas del norte de África, y avanza por tierras europeas hasta Viena. En el siglo XVI, bajo el reinado de Solimán el Magnífico (1494-1566), Selim II (1524-1574) y Murad III (1546-1595), su expansión terrestre se ve acompañada de avances navales en el Mediterráneo, principalmente en detrimento de las ricas ciudades italianas. Los ataques otomanos llevan a los Estados del papa, la República de Venecia, España y otras potencias a aliarse para repeler al invasor. El enfrentamiento se produce en Lepanto el 7 de octubre de 1571, cerca de la costa occidental griega: la flota otomana, con fama de ser invencible, sufre graves pérdidas y, tras una jornada de combates violentos, se ve obligada a batirse en retirada. Esta batalla marca el freno de la expansión otomana por el Mediterráneo.

El barco de Cervantes, que parte de Nápoles, sufre los ataques de las embarcaciones otomanas en alta mar. El escritor, acompañado por su hermano, es hecho prisionero y es llevado a Argel, donde se le considera un preso importante, por el que podría pedirse un rescate. En 1577, la suma de dinero que acumula su madre permite la liberación de uno de los dos hombres: Cervantes se sacrifica, mientras que su hermano, Rodrigo, es liberado. Cervantes, que posee una gran imaginación, pone a punto cuatro intentos de fuga, a cada cual más pintoresco. Pero todos fracasan por falta de suerte o a causa de una traición entre los prisioneros o entre sus contactos de fuera de la cárcel. Estas aventuras marcarán durante mucho tiempo al autor y alimentarán varios de sus relatos. Para acabar, en 1580, una expedición liderada por los miembros de una orden religiosa logra negociar la liberación o la compra de los cautivos, entre los que se encuentra Cervantes, quien por fin puede volver junto a los suyos a Madrid.