Walter Eyzaguirre - ¿Ahorrar o gastar?: ¿Cómo lograr el equilibrio perfecto en tus finanzas

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Índice

Dedico este libro a mi querido tío « UFO » Lucio Blanco, quien fuera como un padre para mí; y a mis dos queridos amigos Enrique Aguilar y Augusto Matto. Los tres se encuentran ahora disfrutando de la eternidad.

PRÓLOGO

¿Ahorrar o gastar? es una guía amena y didáctica para aquellas personas que buscan entender mejor y fortalecer sus finanzas personales. Walter Eyzaguirre acompaña al lector por un camino de múltiples capas concéntricas que va atendiendo una a una para que no queden dudas ni cabos sueltos. En el núcleo, el concepto de mayor fuerza es que las finanzas personales saludables nos deben traer tranquilidad, paz y diversión. Es decir, no se trata de vivir sujetos a rigideces ni ataduras, por el contrario, desarrollar habilidades para la planificación de nuestras metas y el uso informado de nuestros recursos son medios para poder llegar a ser ciudadanos responsables y capaces de ejercer nuestra ciudadanía económica plenamente. Son medios para un mayor bienestar.

A través de palabras clave, ejemplos, preguntas e, incluso, ejercicios, acompaña al lector en cada página, de una manera intuitiva, directa y aterrizada. Cuestiona los prejuicios sobre el dinero que normalmente nos acompañan y con una estrategia de mindfulness atraviesa con mucha naturalidad conceptos complejos como el propósito del ahorro, la utilidad de un presupuesto, el sentido del crédito, las ventajas de una tarjeta de crédito, la necesidad de invertir y la racionalidad de los emprendimientos empresariales.

Cálculos que involucran algún nivel de dificultad, como el del interés de un préstamo o el de la racionalidad de nuestras decisiones, son explicados con claridad recurriendo a ejemplos simples y concretos. Este esfuerzo es fundamental para acercar las finanzas a nuestras experiencias cotidianas y que sean parte del conjunto de información que define el equilibrio personal que todos buscamos.

Para mí, es un gusto poder dejarlos con este libro. Me consta que es parte de un esfuerzo inmenso y permanente del autor en favor de la educación financiera. Las competencias financieras son fundamentales para tomar mejores decisiones sobre el uso de nuestros recursos, reducir la vulnerabilidad de nuestras familias y alcanzar mayor bienestar y mayor libertad; en este sentido, las competencias financieras son también herramientas críticas para una inclusión financiera sostenible y responsable. Por ello, saludo esta entrega y, como dice el autor: ahorra, invierte y diviértete.

Martín Naranjo

Presidente del Directorio de la Asociación de Bancos del Perú

INTRODUCCIÓN

Equilibrio. Esta palabra es la ideal para poder explicar todo lo que he venido haciendo durante estos últimos quince años en los que mi vida cambió de una manera drástica. De estar acostumbrado a obtener todos los meses una remuneración fija con la seguridad de que los días treinta de cada mes recibiría mi sueldo, pasé a generar mis propias fuentes de ingresos. El tiempo transcurre demasiado rápido y no le damos la importancia suficiente. En muchos casos, cuando reaccionamos, el tiempo se ha convertido en un verdugo de nuestra vida. Por el contrario, si lo usamos como aliado, puede ser nuestro superhéroe, el mejor amigo que nos ayudará a lograr todas nuestras metas.

Buscar el equilibrio en las situaciones más inciertas de nuestra vida será la clave para nuestro desarrollo personal y profesional, y dentro de todo, el equilibrio económico será nuestro escudo ante cualquier situación desafiante relacionada con el dinero.

Me gusta mucho el significado de la palabra equilibrio. Su origen se encuentra en el latín aequus («igual») y libra («balanza»), (peso); equivalente a aequilibrium . Como vemos, la definición reside en darles igualdad a las cosas en la balanza, es decir, a que todo tenga el mismo peso.

Veamos algunos ejemplos del equilibrio en actividades que desarrollamos con frecuencia:

• En el deporte necesitamos de un equilibrio para, por ejemplo, poder montar una bicicleta y no caernos, darle la adecuada fuerza al patear un balón o correr con la pelota jugando fútbol. En cualquier deporte uno necesita poder sostener el cuerpo en la mejor posición.
• En la política es necesario el buen funcionamiento del gobierno mediante lo que se conoce como el «equilibrio de poderes», el cual garantiza que no surjan medidas dictatoriales, sino que más bien exista consenso para lograr las mejores decisiones.
• En la física, el equilibrio es el estado de un sistema en el que coexisten simultáneamente dos o más componentes que se contrarrestan recíprocamente, anulándose.

Podríamos citar mil ejemplos sobre la aplicación del equilibrio en nuestra vida diaria, de manera que el equilibrio se relaciona con una condición en la que todas las influencias se compensan. Es decir, donde todo está en perfecta armonía y funciona de la manera en la que queremos que esté en nuestra vida. Por eso tiene como sinónimos las palabras armonía y balance, que es lo que nosotros siempre estamos buscando en la vida; o, en todo caso, esa debería ser la situación correcta en nuestra búsqueda de la felicidad.

Por el contrario, su palabra antónima es el desequilibrio, y con tan solo leer o escuchar esa palabra la relacionamos directamente con muchas cosas malas en nuestra vida. Una persona con desequilibrio emocional puede acarrear consecuencias muy duras para su salud, una empresa que no encuentra su punto de equilibrio en las ventas no sabe si va a perder o ganar. El equilibrio trae paz y tranquilidad; por el contrario, el desequilibrio genera incertidumbres y problemas.

¿El equilibrio es estático? Yo diría que es lo más dinámico que existe

Pueden parecer dos palabras opuestas, «equilibrio y dinamismo», sin embargo, ambas tienen una conexión especial. No se puede estar en equilibrio sin tener una adaptación constante a tu entorno. Y es ahí precisamente donde surge la necesidad de entender cómo funciona nuestra relación con el dinero.

¿Cuántas veces pensaste que tenías todo controlado? Este es un pensamiento frecuente, pero cada vez que pensamos que todo está muy bien, que hemos hallado la tranquilidad deseada, de repente ocurre algo inesperado, sucede una emergencia y nos sentimos en cero, como si nada de lo que habíamos hecho hasta ese momento hubiera valido la pena, como si nuestra computadora de pronto se apagara y la información que teníamos ya no estuviese, simplemente desapareció. Esos golpes de realidad son los que en algún momento nos hacen aterrizar para darnos cuenta de que no tenemos nada controlado, de que la vida es más compleja de lo que pensamos y de que será muy complicado tratar de controlarla, pues existen diversos factores que están fuera de nuestro control. No obstante, si tenemos muchas cosas que dependen directamente de nosotros, solo es cuestión de identificarlas.