Gris - Maneras de cocinar verduras y hortalizas

A menudo se conciben las verduras y las hortalizas como una guarnición de otros ingredientes o un mero entrante ligero que hay que completar con un plato principal de mayor contundencia. Sin embargo, la variedad de aromas, texturas, colores y sabores de las verduras ofrece un abanico de posibilidades gastronómicas tan rico por sí solo que se merecen ser el plato estrella de nuestras mesas. A partir de esta idea nace el presente libro, en el cual encontrarás todo lo necesario para hacerlo posible, desde la tienda hasta tu mesa.

Y es que Maneras de cocinar verduras y hortalizas no solo te ofrece un recetario amplio y suculento, sino también información eminentemente práctica acerca de aspectos gastronómicos y culinarios y de nutrición. Así sabrás cómo clasificar las verduras, cómo comprarlas, cómo tratarlas, cómo conservarlas, con qué técnicas cocinarlas, con qué salsas aderezarlas... Porque al final, este libro es, sobre todo, una invitación para que te aventures a cocinar y experimentar con la riqueza de ingredientes que nos proporcionan una parte del reino vegetal.

Antes de cocinar, descubre la diferencia entre verduras y hortalizas

A menudo empleamos los términos verduras y hortalizas como sinónimos, pero aunque ambos pertenecen al reino vegetal, no lo son. Según el diccionario de la Real Academia Española, la hortaliza es una «planta comestible que se cultiva en las huertas.» De hecho, la palabra procede del latín hortal ( hortalis ), que significa «huerto».

Si seguimos esta definición, quedan excluidas del grupo de las hortalizas las frutas procedentes de árboles frutales y cereales, así como las legumbres que se consumen secas. Pero sí que son hortalizas las legumbres tiernas como las judías verdes, los guisantes o las habas. De hecho, su color hace que, a menudo, también se les considere verduras.

Y es que, según el Código Alimentario Español, las verduras son un grupo de hortalizas cuya parte comestible está formada por sus órganos verdes. En general, se consideran verduras aquellas hortalizas de las que se consume la hoja y el tallo tierno, aunque el límite no está establecido de forma clara. Lo que sí se puede concluir es que no todas los hortalizas son verduras, pero sí que todas las verduras son hortalizas.