Maffía, Diana Prostitución/trabajo sexual / Diana Maffía ; Claudia Korol. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Paidós, 2021. Libro digital, EPUB Archivo Digital: descarga ISBN 978-950-12-0330-1 1. Ensayo Sociológico. I. Korol, Claudia. II. Título. CDD 306.74 |
El 21 de septiembre de 2006 se realizó un diálogo sobre el tema prostitución-trabajo sexual,
que fue publicado en el año 2007 por Feminaria Editora.
Aquí publicamos nuevamente aquel diálogo y las entrevistas posteriores, que actualizan el debate.
El diálogo fue iniciativa del Programa para América Latina y El Caribe, de la Comisión Internacional
de los Derechos Humanos IGLHRC-LAC, el Grupo de Trabajo Latinoamericano sobre Derechos
Sexuales (MULABI) y la Asociación de Lucha por la Identidad Travesti y Transexual (ALITT).
© 2021, Diana Helena Maffía y Claudia Korol
Lohana Berkins y Claudia Korol
compiladoras de la edición 2007
Diana Maffía y Claudia Korol
compiladoras de la edición 2020
Diseño de cubierta: Departamento de Arte de Grupo Editorial Planeta S.A.I.C.
Todos los derechos reservados
© 2021, de todas las ediciones:
Editorial Paidós SAICF
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Primera edición en formato digital: abril de 2021
Digitalización: Proyecto 451
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parcial o total de esta obra por cualquier medio o procedimiento, incluidos
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Inscripción ley 11.723 en trámite
ISBN edición digital (ePub): 978-950-12-0330-1
A Lohana Berkins. En este libro –como en nuestras vidas–, Lohana está presente desde el comienzo hasta el final. En los diálogos que aquí se generan, nos sentimos acompañadas por la mirada amorosa y a la vez crítica de Lohana. Ser consecuentes con ella, con su lucha, es un desafío que intentamos asumir, promoviendo y continuando los diálogos que Lohana abrió con su querida y desbordante presencia.
Agradecimientos
Nuestro agradecimiento a las compañeras que promovieron y participaron en el diálogo original, algunas de las cuales lamentablemente ya no están entre nosotras.
A quienes volvieron a dar su testimonio catorce años después y dan cuenta de distintas estrategias pero de la misma persistencia en la defensa de los derechos humanos.
A quienes en las entrevistas actuales, tomadas en medio de la pandemia y su especial golpe demoledor sobre las vidas de las personas en prostitución y de lxs trabajadorxs sexuales, mostraron disposición y compromiso para ser parte de este intercambio, y valoraron que era necesario compartir esfuerzos para superar estas situaciones.
Las compiladoras de este libro estamos a favor de usar el llamado “lenguaje inclusivo”, pero, dado que no hay aún acuerdos acerca de las soluciones gramaticales con que se expresa, hemos decidido respetar el modo en que cada entrevistada elige hacerlo, sin uniformar el estilo a lo largo del libro.
Prólogo a la edición de 2020
Diana Maffía
Hace ya más de una década, en 2007, Lohana Berkins y Claudia Korol publicaron un libro singular que se agotó pronto sin que pudiéramos reeditarlo. Se siguió leyendo con interés, justamente por la diferencia con otras publicaciones sobre prostitución, centradas en defender posiciones claramente abolicionistas o claramente regulacionistas (en nuestro país no suele haber posiciones prohibicionistas). Pero, fundamentalmente, porque el intercambio no era entre feministas académicas o expertxs en políticas públicas e intervenciones estatales, sino entre las propias mujeres, travestis y trans en situación de prostitución y trabajadoras sexuales. Reproducía un diálogo pautado abierto y franco sobre reclamos de derechos y propuestas de intervención que partían de sus propias experiencias individuales y colectivas, de la forma de organizar sus luchas y fortalecerse frente a las muchas violencias que las acosaban. Ellas eran las expertas; quienes escuchamos y leímos sus palabras nos sentimos interpeladxs por sus demandas. Los nombres significativos del activismo de mujeres, travestis y trans, el respeto por las autodefiniciones y el asomo de la posibilidad de acciones en común fueron la marca de ese encuentro, complementado por entrevistas que Lohana y Claudia supieron agregar para profundizar las voces y explicitar los acuerdos y desacuerdos. Surgían de esas voces propuestas para una vida mejor y diferencias que no eran insalvables, porque ese diálogo abría la posibilidad de acciones en común y estaba pendiente el reconocimiento por parte del Estado de la significación de estas demandas.
Esas acciones y ese intercambio, constituirse en sujeto de derechos frente al Estado y ser reconocidas como colectivo en su dignidad y ciudadanía siguen siendo la aspiración de muchas personas que no quieren quedar atrapadas en la violencia que divide el debate actual entre abolicionismo y regulacionismo. Hay mucho por hacer todavía. Así lo entendimos cuando decidimos actualizarlo y hacer una nueva edición, manteniendo el diálogo original, pero agregando entrevistas nuevas que dieran testimonio, por un lado, de los problemas que permanecen (criminalización, acoso policial, violencia, pobreza, explotación, falta de alternativas, falta de programas específicos) y, por otro, de la evolución del activismo, las experiencias y acontecimientos que consideran importantes, que van marcando un camino sinuoso en el diálogo (entre sí y con las autoridades), y las oportunidades de acceso a políticas públicas directas y suficientemente sensibles.
En el encuentro que dio origen a este libro, las personas estaban divididas en dos mesas, abolicionistas o reglamentaristas, y se nota, sobre todo en el comienzo, el peso emocional de una ruptura que fue traumática y todavía late en las voces más experimentadas.
En esta nueva instancia, aceptó volver a dar su testimonio Graciela Collantes, con quien Claudia Korol pudo repensar sus definiciones y alianzas, así como los logros en las responsabilidades de su persistente liderazgo. En sus palabras, Graciela manifiesta la decepción por que no se haya logrado salir del binarismo, tanto en las definiciones de cada posición como en las propuestas de intervención estatal. Ella había imaginado en 2006 un futuro con muchas más intervenciones desde el activismo y la sorprende que, lejos de expresar estrategias distintas, se haya vuelto a una rivalidad que desconoce otras posturas, una enemistad en las palabras y en las acciones, que es donde más solidaridad y acción común se necesita. Se advierte allí el sedimento de una historia de desencuentros. En el diálogo anterior, muchos de estos rencores estaban a flor de piel porque la ruptura era todavía reciente; en las luchadoras con más historia permanecen en forma de desconfianza para la construcción de una amistad política.
Es muy interesante el relato de María Eugenia Aravena sobre su comienzo en el encuentro con otras compañeras a través de la intervención de las monjas adoratrices, el condicionamiento desde la religión en el que sólo eran protegidas las que asistían a sus talleres. El presente de su organización le permite una mirada crítica sobre los intereses proxenetas que están detrás de la criminalización de la prostitución y el hostigamiento policial a la prostitución callejera: “Mientras más compañeras atormentaban en las calles, más se llenaban los lugares donde explotaban a las compañeras”. Su construcción de alianzas, a través del reconocimiento como trabajadoras sexuales, pone el acento en la amplitud y diversidad de ese universo. El estar involucradas en un intercambio económico supone, para Eugenia, autonomía; el problema, señala, es la informalidad y la precarización. Afirma: “Mientras nosotras sigamos ejerciendo esta actividad totalmente lícita como si fuera un delito” aunque no es un delito, será porque “existe un vacío legal que nos ha expulsado a los márgenes de la clandestinidad”. Demanda cosas tan básicas como obra social y jubilación, aspectos de políticas de previsión social que corresponde al Estado asegurar a toda la ciudadanía. La solución, para Eugenia, es reconocer la prostitución como práctica laboral.