Julieta Quiñonez Castaños - El Juego de La Vida

El Juego de la Vida

Julieta | Quiñonez Castaños

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INDICE

“La vida es un juego del que nadie puede en un momento retirarse llevándose sus ganancias.”

André Maurois (1885-1967) Novelista francés.

Dedicado a mi madre,

Que con su ejemplo de amor, me enseñó que en este juego loco de la vida, no se debe sufrir, se debe hacer todo con amor y se debe intentar cada día ser feliz.

Gracias madre, agradezco infinito lo que hiciste de mi.

Julieta Castaños Amezcua | 1939 - 2003

Agradezco mi juego de vida, perfecto, loco, feliz, accidentado, con sus tristezas y divinas casualidades.

De todo corazón agradezco a Kevin Morris, mi esposo, por estar siempre, por darme la familia con la que desde niña soñé y en especial por cocinar como un chef para todos los míos, a mi hijo Kevin Allen, mi inspiración y mi mas grande amor; con la ilusión de que cuando aprendas a leer, conozcas un poquito de los dichos de tu abuela, a mi hermana Magdalena Castaños, mi roble, mi siempre incondicional, mi cómplice de juego, gracias por ser la mejor hermana, y a la hermana que escogí, Angèlica Labrada mi compañera de aventuras y desventuras, sin ti, simplemente el café no me sabe igual, a mi padre Ramón Quiñones Sosa, por regresar a mi vida, a mi sobrina Kenia a quien con todo mi amor deseo acompañar en su juego, a mi sobrina Geovana, porque esta segura de su juego, a mi nuevo sobrino Andrés, como omitir a mi tía Ofelia y mi tía Laura, gracias por estar desde antes, pero más agradecida por estar con nosotras después de la muerte de mi madre, las disfrutamos tanto. A mis entrañables amigos especialmente a: Ana Catalina Quiñonez mi amiga desde los 12. A Raffaele Frazzi hasta mi querida Italia, por esa realmente increíble historia. A Roberto Hedos, memorable, gracias por compartir esa locura con la que vives tu juego e inspirarme, a mi querido Pablo Fastag Cwikel, QPD por todos tus consejos raros, toda tu enseñanza y porque creías en mi, a “La familia de la oficina Morris”, no imagino mi aventura del día a día sin ellos, gracias a todos porque cada uno es un personaje digno de una novela, Claudia Ponce, Arianna Jiménez, Ernesto Martín, Marco Almaraz, Gaby Sanchez, Juan Cazares, Karlita, Maricruz y por supuesto a Carmina.

A esos amigos entrañables de la universidad, Ligia y Leonardo Mercado, Cecilia Hernandez, Omar Ruiz, Douglas Woolfolk, Juan Ley y Eduardo Navarro, y como olvidar a Roberto Belanger, por enseñarme entre otras cosas a vender, a mi contadora Beatriz Hernandez por esas pláticas inteligentes que son todo un masaje para mi cerebro, y a Mauricio Bolaños por compartir sus producciones, que el ignora, empero son parte importante de mi juego.

A todos y cada uno de mis Clientes, gracias por ser los patrocinadores de mi juego.

Julieta Quiñonez Castaños | Junio 2011

“No se tome la vida demasiado en serio; nunca saldrá vivo de ella.”

Elbert Hubbard (1856-1915) Ensayista estadounidense.

Sin duda alguna, la primera vez que escuche el término “juego de la vida” vino de palabras de mi madre; ella fue una mujer sabia, y no me refiero a ese conocimiento de aulas, no, ella poseía una sabiduría de vida, envidiable, era todo un personaje, es difícil describir toda la energía que irradiaba, parecía que nunca se cansaba, siempre se le veía de buen humor, siempre con una sonrisa, y créanme que no siempre la vida le sonreía, pero ella siempre le sonreía a la vida, y a todos, creo que como yo la describo la describiría cualquiera que la conoció, es hermoso recoger de tantas de sus amistades bonitas palabras y el común denominador es “No se como le hacia tu madre, pero siempre estaba de buenas”, se le veía feliz, y siempre con una sonrisa la gorda…

Como no he conocido persona más feliz que mi madre, pues he puesto en práctica sus particulares consejos y aún me deleita el vivir mi vida en apego a la forma que ella vivió y percibía el juego de la vida, como ella se refería al vivir la vida.

Sin palabrería, solo con su ejemplo de vida, nos enseñó a mi hermana y a mi, que se puede ser feliz, aun en soledad, aun en la pobreza, aun cuando el juego de la vida no te da buenos motivos, nos dejó muy claro que es una decisión y un deber en la vida de cada persona, el hacer las cosas con amor, ser responsable de nuestros actos y siempre, siempre intentar ser felices.

Así que quiero hacer lo propio para hacer longevos estos sabios consejos de vida y que mejor que dejar esto plasmado en el objeto que mas aprecio de este mundo material; un libro.

Julieta Quiñonez Castaños.

Capítulo I

“L a vida es un juego del que nadie puede en un momento retirarse llevándo se sus ganancias.”

André Maurois (1885-1967) Novelista francés.

La vida, es un juego.

Versar de la vida, es un tema bastante tratado, pero nunca por ello desgastado, faltan por servir millones y millones de tazas de café y copas de vino entre amigos alrededor de todo el mundo, y aun así, no creo que el tema se agote.

Hay quienes incluso se colocan en el papel de fríos e insensibles para evadirlo, pero tarde que temprano el tema les alcanza, con la madurez, con los años, con alguna enfermedad, con el amor, el tema de la vida y la búsqueda de la felicidad nos alcanza, nos seduce y nos atrapa.

Me encanta acercar la palabra “juego” a la de “vida”, porque creo que no debe de tomarse tan en serio la vida, aun con nuestras creencias, religiones, posiciones o posesiones, hay lugar para dar entrada a la palabra juego y dejarse llevar por la vida.

Voy a iniciar con la definición de la palabra “juego”, porque por mas fácil y común que nos parezca, cuantos de nosotros hemos reparado en buscarla en el diccionario (o bueno ahora debiera decir, teclearla en Google o googlearla.) todo porque somos adultos y asumimos que sabemos su significado, pues aquí va;

Definición de Juego

Etimológicamente, los investigadores refieren que la palabra juego procede de dos vocablos en latín: “iocum y ludus-ludere” ambos hacen referencia a broma, diversión, chiste, y se suelen usar indistintamente junto con la expresión actividad lúdica.

La primera referencia sobre juegos que existe es del año 3000 a. C. Los juegos son considerados como parte de una experiencia humana y están presentes en todas las culturas.

El diccionario de la Real Academia de la Lengua lo contempla como un ejercicio recreativo sometido a reglas en el cual se gana o se pierde. Se puede afirmar que el juego, como cualquier realidad sociocultural, es imposible de definir en términos absolutos, y por ello las definiciones describen algunas de sus características. Entre las conceptualizaciones más conocidas apuntamos las siguientes: