Juliet Sharman-Burke - El tarot. Aprenda a leer las cartas

El tarot, cuyo origen se remonta al siglo XIII , es una baraja que contiene 22 cartas pictóricas conocidas como Arcanos Mayores o Triunfos, además de 56 conocidas como Arcanos Menores. Los Arcanos Mayores muestran imágenes simbólicas y tienen nombres extraños como El Loco, La Emperatriz, La Muerte, El Diablo o La Rueda de la Fortuna. Los Arcanos Menores se dividen en cuatro palos, cuyas cartas están numeradas del As al Diez, y cuentan con una figura adicional entre los personajes de la corte, el Caballo. No se sabe si los Arcanos Mayores y Menores fueron creados para que formaran una única baraja y, de no ser este el caso, en qué momento se unieron.

Aunque no haya visto nunca una baraja de tarot, es posible que haya oído decir que se trata de algo temible y siniestro. Esta falsa creencia se debe a que la baraja contiene una imagen llamada La Muerte y otra llamada El Diablo, de modo que aquellas personas que no saben nada sobre el tarot tienden a pensar que estas cartas representan algo «malo», cuando la verdad es que sólo hacen referencia a algo real y presente en nuestras vida cotidiana. Al fin y al cabo, la muerte, ya sea en su forma física o como representación simbólica de un momento final, forma parte de la vida. Todos tendremos que enfrentarnos a la muerte física algún día, pero, mientras tanto, nuestras vidas están llenas de muertes en forma de finales, como dejar el colegio, el hogar familiar o el trabajo, mudarse a una nueva casa, casarse, tener hijos, divorciarse o jubilarse. Por lo tanto, cuando en una tirada aparece la carta de La Muerte, existen diversas interpretaciones que pueden considerarse y no tienen ninguna relación con la muerte física.

Del mismo modo, la carta del Diablo representa algunos aspectos negativos —pero no necesariamente malignos— de la psique humana a los que debemos hacer frente en vez de ignorarlos. En el tarot, El Diablo es la imagen de la tentación y de nuestra debilidad ante ella, no un poder maligno externo que puede obligarnos a actuar en contra de nuestra voluntad.

Cada uno de los Arcanos Mayores muestra imágenes de fases o etapas de la vida con las que todos nos podemos identificar. Las cartas pueden utilizarse para la interpretación o, lo que es lo mismo, para obtener una mejor perspectiva del futuro o comprender mejor lo desconocido.

El tarot existe hace siglos; de hecho, la primera aparición de la que tenemos constancia se remonta al Renacimiento italiano. Aunque nadie sabe con certeza el propósito con el que fue creado, es probable que fuera diseñado como un juego de cartas. El juego de los triunfos, que en la actualidad se conoce como tarot y aún es popular en Italia y Francia, es similar al bridge. Los Arcanos Mayores, que funcionan siempre como triunfos, pueden utilizarse independientemente del palo que se esté jugando y tienen una puntuación más alta que el resto de cartas.

También se dice que las 22 cartas de los Arcanos Mayores, con su extraño y enigmático simbolismo, fueron diseñadas como un mapa espiritual o sistema de memoria para adquirir la iluminación espiritual. Sin embargo, no existe ninguna prueba concreta que apoye esta teoría.

Esta excepcional baraja, que sobrevivió durante varios siglos sin sufrir apenas cambios, fue redescubierta a finales del siglo XIX por ocultistas franceses e ingleses, que supieron ver el simbolismo místico y mágico de las cartas. De hecho, su fascinación por estas misteriosas imágenes fue, en gran medida, la razón por la cual el tarot sigue manteniendo su reputación como herramienta de adivinación.

El tarot fue adoptado por diversos grupos esotéricos y pasó a ocupar un destacado puesto en las enseñanzas de la Orden Hermética de la Aurora Dorada. En los primeros años del siglo XX , A. E. Waite, un influyente miembro de la Orden, creó, junto con la artista Pamela Colman-Smith, una nueva baraja que se conoce como el tarot Rider-Waite. Waite cambió parte del simbolismo de las antiguas barajas y, lo que es más importante, añadió imágenes pictóricas a los Arcanos Menores para que fueran más claros y fáciles de entender que los tradicionales, que únicamente indicaban el número del palo.

Durante las últimas décadas, el tarot ha sido objeto de un interés creciente. Esta baraja ofrece tantas posibilidades a la imaginación que, desde principios de la década de 1980, muchos artistas y aficionados al tarot se han sentido impulsados a rediseñar las imágenes utilizando sus propios estilos y colores, aunque manteniendo siempre el simbolismo original. En la actualidad existen todo tipo de barajas, desde las más tradicionales —como las reproducciones de las barajas renacentistas— hasta las de estilo new age, diseñadas en las décadas de 1960 y 1970. Algunas utilizan como motivo central los gatos, las hierbas o las flores; otras hacen referencia a la mitología griega, romana, egipcia, celta, escandinava o amerindia; y otras se basan en asociaciones alquímicas y astrológicas. Las citadas son sólo una pequeña muestra, por lo que puede verse que la elección de una baraja no suele ser una tarea sencilla.

Existen tantas barajas distintas que, para un principiante, suele resultar difícil decidir cuál de ellas escoger. Por tanto, es esencial tomarse su tiempo y examinar todas las barajas posibles antes de elegir una; una vez tomada la decisión, es probable que quiera seguir buscando otras. Es cierto que a muchas personas les gusta coleccionar barajas, pero, para leer las cartas, es mejor que utilice siempre la misma, pues así evitará sentirse confuso.

Es importante que le atraigan los colores y temas utilizados en la baraja elegida, y que le gusten las ilustraciones. El objetivo es que se sienta cómodo con las cartas, pero no lo conseguirá si las imágenes le desagradan.

Además del estilo artístico de la baraja, también debe gustarle la manera en que haya sido tratada por el autor o el artista. Hay barajas de diferentes temáticas: algunas se aproximan al tarot desde la mitología y otras lo hacen desde la astrología, la alquimia o cualquier otro estilo artístico popular. También existen un par de barajas diseñadas por artistas famosos y otras que imitan el particular estilo de un tipo de arte. Todos estos factores incidirán en su decisión.