Copyright © 2014 Benjamín Amo
5ª Edición
Todos los derechos reservados.
ISBN: 1497592666
ISBN-13: 978-1497592667
AGRADECIMIENTOS
Gracias a todos los lectores y lectoras, murcianos en su mayoría, que con tanto cariño habéis acogido este libro, llegando hasta su 5ª edición.
Benjamín Amo
PRÓLOGO
POR JERÓNIMO TRISTANTE
Hemos terminado por creer que una historia de misterio ha de estar ambientada en el Londres del XIX, en Transilvania o en una tumba perdida en Oriente Medio. Ahora sabemos que no, que no es así. Cuando ustedes se adentren en esta obra de Benjamín Amo, que agota edición tras edición, podrán comprobar qué equivocados estábamos.
Todas las películas, novelas, series y relatos de terror que nos asustan en nuestros ratos de ocio proceden de viejos mitos y leyendas. Los vampiros, de los brukolakas griegos o los revinientes de Rumanía, las historias de psicokillers, de episodios como el de Jack el Destripador y los zombies, de tradiciones orales caribeñas. Me encantan las leyendas y Benjamín ha sabido reunir aquí un buen puñado de ellas demostrando que no hay que viajar muy lejos para conocer historias hermosas, con misterio y que pueden hacernos pasar un poco de miedo, historias que contaban nuestros abuelos en Cartagena, Murcia, Mula o Sierra Espuña mientras que charlaban a la lumbre. No había televisión. Es un trabajo fantástico por lo bien estructurado, divulgativo, con episodios independientes, fruto de una ardua labor de investigación y que anima a leer y a empaparse de historias que nos ayudan a comprender qué es lo que somos. Sólo espero que Benjamín siga recogiendo nuevas leyendas y nos de la satisfacción de una segunda y hasta tercera parte de esta obra que me he bebido en una tarde de invierno, junto a la chimenea y escuchando aullar el viento. ¿Se puede pedir más?
¿Saben ustedes que el primer abducido de España fue una jumillana? ¿Han oído hablar del sanatorio encantando de Sierra Espuña? ¿Qué suceso tuvo lugar en el Castillo de la Concepción que aún provoca algún que otro susto a los vigilantes?
Para saber la respuesta a estos interrogantes corran, corran y comiencen a leer. No les entretengo.
¿QUÉ ES UNA LEYENDA?
Tras haber leído documentos y viejas crónicas que hablaban sobre el origen y significado de la leyenda, y todo cuanto acontece en ellas. Sólo puedo definirlas como relatos increíbles, y creo que se puede decir increíble tomando la acepción propia del adjetivo, que no podía ser más concreta, definiendo a este como algo difícil de creer. Pero, tomando de nuevo el diccionario nos encontramos con la definición oficial de leyenda, diciendo que se trata de relación de sucesos que tienen más de tradicionales o maravillosos que de históricos o verdaderos.
Sin embargo, ¿cuántos de los que en algún momento hemos escuchado una historia llena de misteriosos matices, al pasar por el edificio o lugar en el que aconteció, no hemos dicho aquello ahí cuentan que...?
Al realizar una sutil búsqueda en la historia podemos llegar a saber que a partir del siglo XV, en la península Ibérica, las leyendas informan especialmente de aventuras y amor durante la época de los árabes, historias repletas de fantásticas hazañas, de valerosos héroes que se enfrentan al enemigo enardecidos por el amor de una joven dama. Pero sobre todo de las expediciones guerreras contra estos y de las luchas de poder dinástico en el interior de España. Ejemplo de este periodo podrían ser las leyendas de Don Rodrigo, los infantes de Lara y el cerco de Zamora.
La leyenda es una narración maravillosa, generalmente breve, de un suceso memorable, normalmente se difunde de modo tradicional, prácticamente de boca a boca, hasta que en algún momento alguien las recoge de forma escrita. Casi siempre la fantástica intervención de algún elemento sobrenatural potencia la historia, dejando así una marca en la memoria popular.
Pero cuidado, no se debe confundir con un cuento maravilloso con el que, cierto es, comparte muchas similitudes. No obstante, la leyenda siempre tiene unas referencias “históricas”. Toda leyenda está localizada en un ambiente y lugar concretos. Y precisamente, es el emplazamiento lo que determina, en la mayoría de los casos, el carácter de la leyenda. Reflejo de esto es que ciertas épocas favorecieron la aparición y difusión de leyendas. La Edad Media ha producido las mejores, las más trágicas y las más influyentes en la posterior literatura.
A partir de la época romántica, mediados del siglo XIX, en España despierta el interés por el estudio de lo legendario. Es entonces cuando aparecen las primeras antologías de leyendas populares, a la vez que escritores como Gustavo Adolfo Bécquer se interesan por la leyenda, dando nuevas formas literarias a estas.
Hoy en día nuestra cultura popular sigue produciendo leyendas, las conocidas como leyendas urbanas. La joven de la curva, esa llamada al móvil de una persona que falleció horas antes, extrañas historias que tienen más de rumor que de leyenda... Puede que ya no tengan el aire romántico de las de antaño, pero forman parte del legado de leyendas que recogerán generaciones venideras.
BREVE HISTORIA DE LA REGIÓN DE MURCIA
La presencia humana en el territorio de Murcia data, al menos, desde hace 1.500.000 de años. No obstante, comenzaría a tomar forma geopolítica cuando Escipión, en el año 209 a.C., conquista la ciudad de Carthago Nova, consolidándola como uno de los centros económicos y comerciales más importantes del Mediterráneo durante más de 600 años.
El dominio árabe comienza en el año 713 cuando Abdelaziz vence al ejército hispano-visigodo. Durante más de cien años la región se vio sumida en un completo caos donde se producían continuas guerras entre las diferentes etnias que habitaban en el territorio. Por eso, el citado emir, envió a sus hombres para pacificar toda la zona, fundando una ciudad en el centro del valle del río Segura. El lugar elegido fue una pequeña elevación del terreno que había junto al río.
Esa elevación, tal como lo indican numerosos hallazgos arqueológicos, podría hallarse bajo la actual Gran Vía Escultor Salzillo. La ciudad se creo cercada por una muralla de 15 metros de altura, que a su vez se encontraba jalonada con 95 torres de defensa, así como 9 puertas que la comunicaban con el exterior. Además, la urbe quedo resguardada por el cauce del río y por la acequia mayor que discurría por su zona norte.
Hoy en día, sólo algunos “trozos” de muralla quedan en pie, de las más importantes y mejor conservadas podríamos destacar una de esas 9 puertas y un trecho de muralla situada a la espalda del conocido Mercado de Verónicas, junto al Palacio Almudí.
Las murallas, las fortalezas, tan importantes en el desarrollo y defensa de las emergentes ciudades de la antigüedad. Capítulo aparte merecería la extensa y prolífica lista de castillos que pueblan toda la región, lugares todos ellos que, por lo tullidas de sus piedras o por el aire que silba por sus grietas, parecen mostrar impasibles el deseo de contar cuantas historias han ocurrido entre sus muros. En el entorno de las sierras el Valle-Carrascoy, Altaona y Escalona se asentaba un anillo defensivo de la ciudad islámica de Murcia que servía como defensa frente a incursiones piratas. El anillo estaba conformado por los castillos de la Asomada del Puerto, del Portazgo, de la Luz, el de Los Garres, el de Alquerías y el del Cabezo, todos ellos comunicados visualmente entre sí, y algunas leyendas (de esas que nos ocupan) cuentan que también lo estaban por extensos y misteriosos túneles.