Un joven oficial me decía en el umbral de una puerta mientras caían las bombas: esta guerra me ha enseñado muchas cosas. Entre otras, que hay militares de profesión que jamás serán guerreros y civiles que por naturaleza son guerreros.
Los oficiales de la Tercera Sección fueron enviados por primera vez a la frontera. Guardianes del Estado, especialistas en intentos de sedición, devotos de la verdad, doctores en interrogatorios.
J. M. C OETZEE, Esperando a los bárbaros.
Archivos
Archivos familiares:
Martín Illana.
Jara Hernández.
Herrero Cirujano.
Zamorano Zamorano.
ADPG, Archivo de Presidencia de Gobierno, Madrid.
AFPI, Archivo Fundación Pablo Iglesias (Alcalá de Henares).
AGA, Archivo General de la Administración (Alcalá de Henares).
AGMAV, Archivo General Militar de Ávila.
AGMGU, Archivo General Militar de Guadalajara.
AGP, Archivo General de la Policía, Ministerio del Interior, Madrid.
AGUN, Archivo General Universidad de Navarra (Pamplona).
AHGD, Archivo Histórico General de Defensa (Madrid).
AHMS, Archivo Histórico Militar de Sevilla.
AHN, Archivo Histórico Nacional (Madrid).
AHPC, Archivo Histórico Partido Comunista (Madrid).
AHPT, Archivo Histórico Provincial de Toledo (Toledo).
AMASJ, Archivo Municipal de Alcázar de San Juan (Ciudad Real).
AMCAR, Archivo Militar de Cartagena (Murcia).
ATMA, núm. 21, Archivo Togado Militar (Almería).
CDMH, Centro Documental Memoria Histórica (Salamanca).
DGCSH, Dirección General de la Guardia Civil, Servicios Históricos (Madrid).
IISG, Instituto Internacional de Historia Social (Ámsterdam).
The National Archives, Foreign Office, Londres.
Agradecimientos
Una gran parte de los documentos utilizados en este trabajo han sido conservados, con no poco riesgo, por las propias familias como su patrimonio más valioso. Nuestro agradecimiento en primer lugar debe ir para ellos. Elisa Martín Escalonilla, biznieta de Licinio Ávila Illana, puso a nuestra disposición toda la correspondencia que conservaba la familia. José Antonio Zamorano Herrera no solo hizo lo propio con sus familiares, sino que se puso en contacto con varios de ellos y nos facilitó la documentación completa que poseían. Todas las fotos y material gráfico de los casos de El Romeral se los debemos a él. Las cartas que conservaba Ignacio Gadella Jara nos han abierto la puerta de la cárcel de Porlier para poner rostro al dolor y a la inocencia. Ha sido imposible localizar a la familia de Francisco Peral Serrano, cuyas últimas pertenencias siguen aún en el Archivo Histórico de Defensa de Madrid. Gracias, una vez más, a todos los profesionales de los archivos y centros documentales públicos y privados mencionados al comienzo.
Esta investigación no ha llevado tanto tiempo únicamente por la documentación manejada. Ha pasado por varios proyectos de libro y no se habría realizado en absoluto sin el apoyo y la ayuda de varias personas, empezando, claro, por Noelia. Luis Enrique Otero me animó a recopilar lo que podría ser un libro de cartas y se molestó en leerlo. Carmen Ortiz lo revisó pacientemente y me sugirió cambios importantes. Miguel Ángel del Arco, Jorge Marco o Rubén Pallol también sufrieron los ataques de aquel primer manuscrito, que fue dando paso a otro tipo de trabajo. Para su definición ha sido clave el impulso de una nueva generación de historiadores jóvenes que están renovando el estudio de la guerra civil y la dictadura y con los que tengo la suerte de compartir un proyecto de investigación más amplio: Ainhoa Campos, Alejandro Pérez-Olivares, Daniel Oviedo, Juan Carlos García Funes y Carlos Píriz han leído total o parcialmente este texto, algunos incluso varias veces, por lo que les pido además disculpas. No puedo olvidarme de Jesús Espinosa, Alicia Quintero, Aurelio Martín Nájera, Aurelio Velázquez, Víctor Moraleda, Armand Balsebre, Rosario Fontova, Gregorio García-Dotor, Régulo Alonso y Juan José Rubio. Tengo que mencionar muy especialmente a Charo Baglietto, que leyó y anotó con sumo cuidado esta última versión, y desde luego al editor de Cátedra, Raúl García Bravo, que apostó siempre por el libro y no se desesperó ante tantas versiones. Un proyecto que continúa y que sigue abierto gracias a Héctor y a Iñaki, con su batería de preguntas y su imaginación histórica.
Madrid 1936-1948: capital, frente, retaguardiay ciudad en guerra, I+D HAR 2014-52065-P del Ministerio de Economía y Competitividad, Grupo de Investigación Complutense Espacio, Cultura y Sociedad en la Edad Contemporánea.
Introducción
Los pueblos cercanos a la primera línea, especialmente los que han sido rojos y pasan a ser ocupados por nosotros, deben ser objeto de una vigilancia especial, lo mismo de hombres que mujeres y niños.
El Cuartel General de Franco en Salamanca emitió, entre finales de 1936 y comienzos de 1937, una serie de instrucciones reservadas, como la anterior, destinadas a coordinar la ocupación de localidades y el control de la población civil. Las unidades de policía secreta de cada división, compuestas con vecinos de la zona, remitían semanalmente los datos al Servicio de Información Militar en Burgos, que empezó a organizar un «fichero de criminalidad» por pueblos y provincias. Pocos días después, los ayuntamientos próximos al frente del norte recibían el siguiente oficio de la Delegación de Orden Público:
1) Conducta que han de seguir los elementos de izquierda en la jurisdicción de esta delegación.
1.º Cada ayuntamiento fijará un día y me lo participará con ocho de anticipación para concurrir al acto que ha de celebrarse y al mismo tiempo que el aviso me remitirá el total de los individuos de izquierda que hay en la localidad incluyendo los nacionalistas, con sus nombres, apellidos y número de familia que tiene, así como la edad de esta, en cuya relación se harían las indicaciones que estime pertinente el alcalde, para mayor ilustración por mi parte, de antecedentes políticos de izquierdistas de su localidad.
2) Labor que ha de desarrollarse en pro de la salvación de las almas de los izquierdistas y para su regeneración patriótica.
1.º El día en que se haga la apertura, que será aquel en que se refiere el apartado primero, serán avisados para que a determinada hora señalada estén en un local donde les dirigirá la palabra el Sr. Párroco, un representante del Ayuntamiento, un representante de las milicias en nombre de todos, y el resumen de todo lo expuesto será hecho por el Delegado que suscribe, el que a la vez señalará a todos la marcha que han de seguir para ingresar en la España que se está saturando por la sangre de nuestros mártires y el arrojo de nuestros héroes, pues sería inútil pretender pertenecer a nuestra España sin haber pasado por el crisol de purificación y conocer los sabios preceptos de nuestra Religión y nuestro patriotismo.
2.º Para este acto serán invitadas las personas que desempeñen cargos oficiales dentro de la localidad. Lo que participo a Vd a fin de que se dé el mayor cumplimiento y fijen en ese Ayuntamiento a ser posible el día (a mano 18) del actual y hora de las CINCO de la tarde. Dios guarde a Ud. muchos años. Burgos 13 de enero de 1937. El Delegado Gubernativo.