Muñiz, Enriqueta
Historia de una investigación / Enriqueta Muñiz. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Planeta, 2019.
Libro digital, EPUB
Archivo Digital: descarga
ISBN 978-950-49-6840-5
1. Historia Argentina. 2. Periodismo. I. Título.
CDD 982
© 2019, Herederos de Enrique Muñiz
© 2019, Patricia Walsh y Victoria María Costa, por los textos de Rodolfo Walsh © 2019, por el Prólogo, Daniel Alejandro Link Diseño de cubierta e interior: Álvaro Caldelas Fotografías: gentileza familia Muñiz Todos los derechos reservados © 2019, Grupo Editorial Planeta S.A.I.C.
Publicado bajo el sello Planeta ®
Av. Independencia 1682, C1100ABQ, C.A.B.A.
www.editorialplaneta.com.ar Primera edición en formato digital: noviembre de 2019
Digitalización: Proyecto451
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ISBN edición digital (ePub): 978-950-49-6840-5
Walsh en fragmentos
POR DANIEL LINK
El libro que el lector tiene en las manos es una pieza fundamental para comprender una de las más singulares y de las más revolucionarias experiencias en el contexto de las letras americanas (subrayo la palabra para que se comprenda que la uso a conciencia). Aunque Operación masacre (como experiencia de escritura, como experiencia periodística, como experiencia literaria y como experiencia de vida) ocupa un lugar que hoy sólo los necios o los mal intencionados pueden negarle, toda prueba adicional que nos evite confrontarnos con la banalidad del mal (o la maldad de los banales) será siempre bienvenida.
Este libro incluye:
1) El diario de trabajo de Enriqueta Muñiz mientras asistía a Rodofo Walsh durante la investigación que culminó con la publicación de la primera edición de Operación masacre (1957), revisado y anotado por el propio Walsh (me emocionó reconocer su letra a primera vista).
2) Dos originales mecanografiados de cuentos publicados por Rodolfo Walsh (“Tres portugueses bajo un paraguas” y “Zugzwang”), acompañados de una breve nota mecanografiada (me emocionó reconocer la máquina de escribir de Walsh a primera vista) donde, entre otras cosas se lee: “En V. y L. [ Vea y Lea ] me han masacrado [la palabra aparece entrecomillada a mano] el cuento. Como en cierto modo lo escribí para vos, te dejo una copia por si alguna vez te dan ganas de leerlo. Pero a V. no le entregues el otro que te di, rompelo simplemente. Por las dudas te dejo también una copia de la carta que acabo de despacharte”.
3) La carta consta de tres folios mecanografiados titulados “Diario para H. –31 de agosto,1957” a los que se suman otros tres fechados en “Diciembre 19 y 20 (la segunda fecha agregada a mano), pero que parecen parte del mismo proyecto de escritura. Lo que allí se lee es extraordinario como índice de una intensísima relación afectiva, no comprometida por casi ninguno de los vicios a los que una sociedad sexista nos tiene acostumbrados. Incluye además un fragmento “de mi diario, de fecha 23 de setiembre de 1953, sin alterar nada”, un par de recuerdos sobre los años de internado de Walsh y el resumen de una novela policial en marcha.
4) La “Relación de Giunta” consta de dos folios mecanografiados que incluyen una transcripción incompleta de la declaración de Giunta sobre los sucesos del 9 de junio de 1956 que constituyen el núcleo de Operación masacre . Es un material valiosísimo para confrontar con la reconstrucción que realiza Walsh en la segunda parte del libro, “Los hechos”.
5) Tres poemas mecanografiados: dos sin título (en el mismo folio) fechados en 1953; otro “A un benteveo”, fechado en 1956:
tu pico se hundió en mi corazón:
te veo con mi corazón sangrante en el pico,
bien te veo, bien te veo.
6) Una breve nota de Walsh, manuscrita, a propósito del arte de fotografiar.
La generosidad de Enriqueta Muñiz, en primer término, y la de sus derechohabientes, ahora, nos permite conocer estos materiales preciosos que no modifican lo que sabíamos de Operación masacre pero le dan un alcance nuevo.
Como la mayoría de los papeles de Walsh fueron secuestrados de su casa, cada página que se agrega a su archivo supone un tesoro inconmensurable. La “obra”, que tiende a congelarse y, por lo tanto, a normalizarse en el lugar (más o menos majestuoso) de lo ya sabido y a fetichizarse en la forma mercancía, recupera su plasticidad, se despereza y empieza a caminar de nuevo para toparse quién sabe con qué nuevas aventuras (de lectura).
De hecho, la publicación del diario de trabajo de Enriqueta Muñiz nos permite subrayar aquello que por lo general olvidamos de Operación masacre , que no es sólo un libro extraordinariamente bien escrito, ni un “reportaje” de una complejidad desconocida para la época, sino también una intervención de archivo : el expediente “Livraga”, los protocolos judiciales, los libros de anotaciones de la radio, las leyes y decretos, las sentencias, todo aquello que, en algún sentido, Walsh y Enriqueta revuelven son la condición de posibilidad de ver lo que ocurrió de un cierto modo y de decirlo como lo hace Operación masacre.
Bien de archivo
La definición que Arlette Farge propone del archivo ( La atracción del archivo , 1989) le calza como un guante a Operación masacre :
El archivo es una desgarradura en el tejido de los días, el bosquejo realizado de un acontecimiento inesperado. Todo él esta enfocado sobre algunos instantes de la vida de personajes ordinarios, pocas veces visitados por la historia, excepto si un día les da por reunirse en muchedumbres y por construir lo que más tarde se denominará historia. El archivo no escribe páginas de historia. Describe con palabras de todos los días lo irrisorio y lo trágico en el mismo tono, en el cual lo importante para la administración es saber quiénes son los responsables y cómo castigarlos.
Por supuesto, el gesto de Walsh no se limita a la mera constatación de un hecho en un archivo, sino que, con el gesto del anarchivista, discute las funciones normalizadoras, objetivistas e institucionales del archivo. Como buen anarchivista, Walsh desautoriza a los legitimadores de las nociones de sentido común, cultura de élite, buen gusto, superioridad moral o discurso objetivo. Usa el archivo como prueba de una verdad que no necesariamente es la de la institución que lo resguarda. Vuelve a los “personajes ordinarios” y las vidas infames un asunto de la Historia.
De modo que restaurar el archivo de la investigación que desemboca en el libro Operación masacre ilumina no sólo un pensamiento sobre la literatura o un pensamiento sobre la verdad, sino sobre todo, un pensamiento sobre el método (de escritura, de investigación, de intervención política).
En Operación masacre se lee: “Así nace aquella investigación, este libro”. Sobre el libro nos parece que lo sabemos casi todo, mucho más de lo que sabíamos sobre la investigación. Ahora tenemos unas páginas, la “Relación de Giunta”, que nos permite contrastar aquello con esto, la distancia entre el gesto idiota del que copia o que transcribe una palabra pronunciada por otro y la del escritor que encuentra en el idiotismo la posibilidad de sobreponerse a unas imposibilidades históricas (las de la literatura, las de la política). El gesto idiota no debe entenderse, que quede claro, como el de un incapaz, sino como el que libera precisamente toda la potencia negativa con la cual se puede dar vuelta como un guante el “no pasa nada” de los tiempos que corren (que en la Historia de una investigación de Enriqueta Muñiz vuelve como un mantra página tras página), lo que arranca al sujeto de sí mismo y lo libera en la inconmensurabilidad del tiempo vacío. El idiota no es ningún sujeto sino más bien una existencia floral: simple apertura hacia la luz. O, como escribe Enriqueta en su Historia de una investigación : “Walsh, en todo caso, se ha sobrepasado a sí mismo”.