Aforismos
Los peores lectores son quienes se comportan como soldados entregados al saqueo: se llevan cuanto puede serles útil, ensucian y revuelven el resto, y ultrajan todo.
Humano, demasiado humano,
libro II, sección 137
Llevamos más de cien años reconociéndonos en los aforismos de Nietzsche. A continuación sigue una selección personal de algunos que parecen tener una fuerte resonancia contemporánea. A menudo se contradicen entre sí, recordándonos lo mucho que le gustaba provocar a Nietzsche, que se llamaba a sí mismo el filósofo del «quizás». Su concisión, combinada con la facilidad para que el lector interprete su sentido como quiera (de forma bastante similar a las letras de Bob Dylan), implica que muchas de las máximas se hayan propagado en la cultura popular. Dado que sus ideas pasan al zeitgeist a través de una amplia variedad de diferentes traducciones, la fuente de sus escritos se da en la sección siguiente, pero el texto está extraído eclécticamente de las versiones más populares.
EL ABISMO
El hombre es una cuerda tendida entre el animal y el superhombre, una cuerda sobre el abismo.
Así habló Zaratustra, «Prólogo de Zaratustra», primera parte, sección 4
El que lucha con monstruos debería cuidarse de no acabar convertido también en un monstruo. Si mira largo tiempo al abismo, el abismo le devolverá la mirada a su interior.
Más allá del bien y del mal, «Sentencias e interludios», 146
ABURRIMIENTO
Ni siquiera los dioses pueden escapar al aburrimiento.
El Anticristo, sección 48
¿No es la vida cien veces demasiado breve para aburrirse?
Más allá del bien y del mal, «Nuestras virtudes», sección 227
El fin de todas las disposiciones humanas es dejar de ser consciente de la vida distrayendo sus pensamientos.
Consideraciones intempestivas, «Schopenhauer como educador», sección 4
La premura es universal porque todo el mundo está huyendo de sí mismo.
Consideraciones intempestivas, «Schopenhauer como educador», sección 5
ARTE
El arte es la tarea suprema, la actividad genuinamente metafísica en esta vida.
El nacimiento de la tragedia, prólogo a «Richard Wagner»
BIGOTES
El hombre más pacífico y conciliador, si tiene un gran bigote, puede descansar tranquilamente a la sombra de su gran mostacho. Como accesoria al gran bigote, causará la impresión de ser militar, irascible y a veces hasta violento, y será tratado en consecuencia.
Aurora, libro IV, sección 381
CRISTIANISMO
El cristianismo es una hipocondría romántica para quienes no tienen bien plantados los pies en el suelo.
Cuaderno 10, otoño de 1877, 127
El Reino de los Cielos es una enfermedad del corazón, no algo que se abate «sobre la tierra» ni llega «después de la muerte».
El Anticristo, sección 34
La propia palabra cristianismo es un malentendido. En verdad, sólo hubo un cristiano y ése murió en la cruz.
El Anticristo, sección 39
Versículo 14 de san Lucas 18 mejorado: El que se humilla desea ser exaltado.
Humano, demasiado humano, «Sobre la historia de los sentimientos morales», sección 87
DIOS
Dios ha muerto, pero, dada la manera de ser de los hombres, es posible que siga habiendo cavernas durante miles de años en las que se mostrará su sombra. Y nosotros todavía tenemos que vencer también su sombra.
La gaya ciencia, libro III, sección 108
¡Dios ha muerto! ¡Dios sigue muerto! Y nosotros lo hemos matado. ¿Cómo nos consolaremos, nosotros, asesinos entre los asesinos? Lo más sagrado y poderoso de todo lo que el mundo ha poseído hasta ahora se ha desangrado hasta morir bajo nuestros cuchillos: ¿quién nos limpiará esta sangre? ¿Qué agua hay para que nos lavemos? ¿Qué celebraciones de expiación, qué juegos sagrados tendremos que inventar? ¿No es la grandeza de este hecho demasiado colosal para nosotros? ¿No deberíamos convertirnos nosotros mismos en dioses simplemente para parecer dignos de ello?
La gaya ciencia, libro III, sección 125
¿Es el hombre un error de Dios? ¿O Dios sólo un error del hombre?
Crepúsculo de los ídolos, «Sentencias y flechas», sección 7
ESCLAVOS DEL TRABAJO
Trabajo excesivo, curiosidad y compasión: nuestros vicios modernos.
Cuaderno 9, otoño de 1887, sección 141
La desgracia de los hombres activos es que su actividad es casi siempre un poco irracional. No cabe, por ejemplo, preguntarse ante el banquero que amasa dinero por el fin de su incesante actividad: es irracional. Los hombres activos ruedan como la piedra, conforme a la estupidez de la mecánica.
Humano, demasiado humano, «Indicios de cultura superior e inferior», sección 283
Como en todas las épocas, así también hoy los hombres se dividen en dos categorías: esclavos y libres. Quien no dispone para sí de dos tercios de su día es un esclavo, sea por lo demás lo que quiera, político, comerciante, funcionario, erudito.
Humano, demasiado humano, «Indicios de cultura superior e inferior», sección 283
ESCRITORES
Hay algo cómico en la imagen de esos escritores que disfrutan arreglando los pliegues crujientes de sus largas y envolventes frases: están intentando ocultar los pies.
La gaya ciencia, libro IV, sección 282
Sólo aquellos con pulmones muy grandes tienen derecho a escribir frases largas.
Normas de escritura redactadas para Lou Salomé
Pensamientos en un poema. El poeta presenta sus pensamientos alegremente, en el carro del ritmo: habitualmente porque no podría ir a pie.
Humano, demasiado humano, «Acerca del alma de artistas y escritores», sección 189
Si es verdad que los bosques ralean, ¿llegará el momento en que las bibliotecas deberán utilizarse como leña? Dado que la mayoría de los libros nacieron del humo y el vapor del cerebro, tal vez deberían volver a ese estado. Si no arde un fuego en su interior, el fuego debería castigarlos por ello.
Consideraciones intempestivas, «Schopenhauer como educador», sección 4
Yo soy el primer alemán que ha dominado el aforismo, y los aforismos son una forma de eternidad. Es mi ambición decir en diez frases lo que todos los demás dicen en un libro, lo que todos los demás no dicen en un libro.
Crepúsculo de los ídolos, «Incursiones de un intempestivo», sección 51
EL ESTADO
El Estado quiere que los hombres lo idolatren igual que solían idolatrar a la Iglesia.
Consideraciones intempestivas, «Schopenhauer como educador», sección 4
Cuanto el Estado dice es mentira, y cuanto tiene es porque lo ha robado.
Así habló Zaratustra, primera parte, «Del nuevo ídolo»
Estado es el nombre que se da al más frío de todos los monstruos fríos. El Estado miente con toda frialdad, y de su boca sale esta mentira: «Yo, el Estado, soy el pueblo».
Así habló Zaratustra, primera parte I, «Del nuevo ídolo»
EXASPERADO POR SU FAMILIA
Con quien menos emparentado se está es con los propios padres; estar emparentado con ellos constituiría el signo extremo de la vulgaridad.
Ecce Homo, «Por qué soy tan sabio», sección 3
FAMA
Se paga cara la inmortalidad: por su causa se muere varias veces durante la vida.
Ecce homo, «Así habló Zaratustra», sección 5
Yo no soy un hombre, soy dinamita.
Ecce homo, «Por qué soy un destino», sección 1
FILOSOFÍA
Para vivir sólo hay que ser un animal o un dios, dice Aristóteles. Falta el tercer caso: hay que ser ambas cosas, un filósofo…
Crepúsculo de los ídolos, «Sentencias y flechas», sección 3
Platón es aburrido.
Crepúsculo de los ídolos, «Lo que debo a los antiguos», sección 2
No existiría en modo alguno una filosofía platónica si en Atenas no hubiera habido jóvenes tan bellos… La filosofía a la manera de Platón habría que definirla más bien como una competición erótica.