Antonio García-Trevijano - Frente a la gran mentira
Aquí puedes leer online Antonio García-Trevijano - Frente a la gran mentira texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 1996, Editor: ePubLibre, Género: Historia. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:
Novela romántica
Ciencia ficción
Aventura
Detective
Ciencia
Historia
Hogar y familia
Prosa
Arte
Política
Ordenador
No ficción
Religión
Negocios
Niños
Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.
- Libro:Frente a la gran mentira
- Autor:
- Editor:ePubLibre
- Genre:
- Año:1996
- Índice:5 / 5
- Favoritos:Añadir a favoritos
- Tu marca:
- 100
- 1
- 2
- 3
- 4
- 5
Frente a la gran mentira: resumen, descripción y anotación
Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Frente a la gran mentira" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.
Frente a la gran mentira — leer online gratis el libro completo
A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Frente a la gran mentira " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.
Tamaño de fuente:
Intervalo:
Marcador:
«ESTO NO ES DEMOCRACIA», denuncia Antonio Garía-Trevijano en las primeras páginas de su obra. Frente a la gran mentira, arraigada en todo un pueblo que confunde las libertades de que goza con la libertad política de la que carece, el autor construye una teoría realista de la democracia, para acabar con la idea falsa de que la corrupción, el crimen de Estado y la inmoralidad pública son productos (indeseables) de la democracia, y no frutos naturales e inevitables del régimen oligárquico de las Monarquías o Repúblicas de partidos. A través de un magnifico repaso de los hechos que jalonan la historia de la democracia, el autor va descubriendo los obstáculos que, desde la revolución inglesa del siglo XVII, la guerra de la Independencia de Estados Unidos y la Revolución francesa, se fueron oponiendo a la libertad política, desviando las posibilidades democráticas de las vieja Europa para desembocar en el actual Estado de partidos. Existen teorías importantes del Estado y de la Constitución, pero ninguna que pueda ser llamada teoría de la democracia. La original obra de Antonio García-Trevijano, síntesis moderna de la democracia pura de Rousseau y de la libertad política de Montesquieu, responde a la necesidad europea de una teoría de la democracia como alternativa real al corrompido régimen de partidos que fue engendrando por el pragmatismo occidental de la guerra fría.
Antonio García-Trevijano
ePub r1.1
turolero 15.08.15
Título original: Frente a la gran mentira
Antonio García-Trevijano, 1996
Editor digital: turolero
Corrección de erratas: Strangelove
ePub base r1.2
A mi hijo Pablo
ANTONIO GARCÍA-TREVIJANO FORTE (Granada, 18 de julio de 1927) es un político y pensador español de ideología republicana, casado y con dos hijos. Fue profesor de Derecho mercantil en la Universidad de Granada y notario.
Republicano convencido desde su juventud (su padre, registrador de la propiedad, ya era republicano del grupo de Fernández de los Ríos), fue uno de los protagonistas más relevantes en la oposición a la dictadura de Francisco Franco.
Ya en 1967, fue el principal organizador de la reunión clandestina de Comisiones Obreras en la fábrica de Medias Vilma (Plaza de Castilla) que preparó la huelga de octubre de 1967.
En marzo de 1968, fue organizador del debate en el Hotel Meliá, ante dos mil personas, sobre El desafío americano de Servan-Schreiber, convirtiéndolo en manifestación de la libertad contra la dictadura y en conato de la rebelión de la juventud que dos meses después estallaría en París («Mayo del 68»). El mismo año ayudó a organizar y dirigir la independencia de Guinea Ecuatorial, para la que redactó una constitución democrática, que no llegó a entrar en vigor porque el gobierno de Franco impuso la constitución redactada por Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, con la que Francisco Macías Nguema se proclamó Presidente vitalicio.
En 1974 organizó en París los encuentros de Don Juan de Borbón con los grupos republicanos y Ruedo Ibérico, donde manifestó su rechazo del nombramiento de Juan Carlos como sucesor. Ese mismo año fue organizador y Coordinador de la Junta Democrática de España, redactando todos sus manifiestos y fundando un centenar de Juntas locales y sectoriales por toda España. Dio el discurso de presentación de la Junta al Parlamento Europeo en Estrasburgo. En 1976 organizó la fusión de la Junta Democrática de España y la Plataforma de Convergencia (Platajunta), de la que también fue coordinador.
Los vástagos de la rebeldía política padecen una suerte de severa incomprensión de lo público, que los empuja a buscar su camino en la dulce independencia de lo privado. Así devuelven a sus padres el tesoro de la vida íntima.
¿Qué haría yo en Roma si no sé mentir?
JUVENAL
He mirado y vivido la política con ojos y sentimientos españoles. Pero al mirar a España y sufrir sus falsas ilusiones y sus reales deficiencias, he visto y sentido la falta de naturaleza democrática en las formas de gobierno europeas de las que trae su causa el español. Una percepción directa y una reflexión genuina sobre la mendacidad particular de la transición española me llevaron de la mano a la conclusión de que la mentira institucional denuncia siempre y en todas partes la falta de democracia.
La libertad es ilusoria si los hechos que origina no son verídicos. El despotismo del engaño que las libertades disimulan es más difícil de abatir que la dictadura. Un pueblo perdido en el error puede vivir con dignidad, porque a nadie se le exige que sea verdadero. Pero en lo tocante al sentimiento de la veracidad en la vida pública todo estriba en la clase de temple que se forja en el corazón de un pueblo habituado a ser gobernado por la mentira. Las libertades públicas de que goza, confundidas con la libertad política de la que carece, en lugar de levantarlo sobre el miedo a la verdad, lo aplanan ante ella.
Es difícil escapar a la propensión psicológica de explicar la mentira política por sus razones sociales, y los acontecimientos históricos por sus causas finales. Pero el hombre no es de hielo para la verdad y de fuego para la mentira, y la Humanidad no ha cesado de dar respuestas azarosas a preguntas de sentido que sólo podrían contestar los dioses. Buscar el sentido de la vida y de la historia de los hombres acucia y despierta las imaginaciones, sin dar ocasión a la inteligencia de las situaciones. Pero basta desvelar una gran mentira, como la de la transición, y todo cobra sentido genuino. Sin este descubrimiento repentino de la verdad todo en España sería oscuridad. Nada se comprendería. Los efectos de la Gran Mentira son ya indisimulables. Pero atribuidos a la democracia, los crímenes y robos de la clase gobernante suprimen el sentido común, y hacen tan insensatos y peligrosos a los que mandan desde el Estado como a los que obedecen desde la sociedad. Sin saber que esto no es una democracia formal, sino una formal oligarquía, nadie tiene respuesta para explicar lo que nos pasa. Y los hechos estolidizan las opiniones. Sólo sabiendo que todo es mentira adquiere sentido inteligible la realidad política.
Aparte de la sibilina diferencia entre mentira y «falsiloquio» y del mentiri impudentissime del discurso jesuítico, la mentira no ha sido digna de análisis ni reflexión en la historia de las ideas políticas. Platón alabó en La República el mal intrínseco de la mentira que condenó en Las Leyes. Pero la elocuencia de la democracia sólo puede vivir de la verdad. De la verdad descriptiva de hechos y situaciones reales. Y no de la verdad ejecutiva o «performativa» de una proposición, verdadera o falsa, que llevó directamente desde el pragmatismo americano, con su noción de verdad como «aserto garantizado», o «creencia socialmente justificada» por su utilidad, al totalitarismo cognitivo de la propaganda nazi. A este género de mentiras útiles, socialmente justificadas, pertenece la especie política de la Gran Mentira.
Como auxiliar insustituible de las pasiones desaforadas de poder, de fama, de riqueza o de rivalidad —como la mentira de partido—, la mentira colectiva tiene una lógica tan rigurosa e inapelable que ya quisiera para sí la «paradoja del mentiroso», que al fin y al cabo sólo es de naturaleza semántica. La mentira política trasciende al lenguaje. Se aleja de la «magnánima mentira» del poeta (Tasso). Y se aproxima, en el sentimiento, a la religiosa.
Tamaño de fuente:
Intervalo:
Marcador:
Libros similares «Frente a la gran mentira»
Mira libros similares a Frente a la gran mentira. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.
Discusión, reseñas del libro Frente a la gran mentira y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.