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Ramón Sender Barayón - Muerte en Zamora

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Ramón Sender Barayón Muerte en Zamora

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Estas memorias son al mismo tiempo un apasionante relato personal de la - photo 1

Estas memorias son, al mismo tiempo, un apasionante relato personal de la guerra civil española y la historia de un hombre —hijo del novelista Ramón J. Sender— que vuelve a descubrir sus raíces. Los padres del autor quedaron separados por la confusión de la guerra. Las autoridades fascistas ejecutaron a su madre en su ciudad natal de Zamora cuando el autor era un niño pequeño. Sender Barayón creció en los Estados Unidos, al cuidado de personas amigas, y no regresaría a España durante cuatro décadas. La muerte de su madre, Amparo, estaba rodeada de misterio, un misterio que acrecentaba la negativa de su padre a revelar información alguna acerca de ella. A los cuarenta y seis años, Sender Barayón desafió a su padre y regresó a España para volver a trazar los sucesos que llevaron a la muerte a su madre, y así consiguió reconciliarse con su pasado. Muerte en Zamora contiene todo el drama y la tensión de un buen misterio, pero es aún más apasionante, ya que los sucesos que relata son tan vergonzosos como verdaderos, con lo cual nos ofrece una imagen de la guerra más real y más conmovedora que las que encontramos en obras de historia convencionales.

Ramón Sender Barayón Muerte en Zamora ePub r11 Titivillus 120716 Título - photo 2

Ramón Sender Barayón

Muerte en Zamora

ePub r1.1

Titivillus 12.07.16

Título original: Muerte en Zamora

Ramón Sender Barayón, 1990

Traducción: Mercedes Esteban-Maes Kemp

Editor digital: Titivillus

ePub base r1.2

Notas 1 En castellano en el original N del E 2 Aunque está hablando - photo 3

Notas

[1] En castellano en el original. (N. del E.).

[2] Aunque está hablando de 1934, no se equivoca el autor. En esa época, Franco era Comandante Militar de Baleares y tenía su residencia en Palma de Mallorca. Pero, casualmente, se encontraba en Madrid disfrutando de una licencia. El ministro de la Guerra, Diego Hidalgo, le llamó para que asumiese la dirección de las operaciones militares contra los insurrectos de Asturias. (N. del E.).

[3] México no solamente no reconoció el régimen de Franco, sino que, hasta después de la muerte de éste, había una Embajada de la República española en su capital. Por lo tanto, si Ramón J. Sender quiso hacerse ciudadano mexicano sería por otros motivos de su conveniencia. Ver nota 12. (N. del E.).

[4] Lewis y Clark realizaron una expedición al noroeste de los Estados Unidos entre 1803 y 1806. (N. de la T.).

[5] Con el título Doble esplendor, lo publicó también, en castellano, la Editorial Atlante, de México, en 1944. (N. del E.).

[6] El autor se confunde de año. En marzo de 1937, Barcelona sólo fue bombardeada el día 16 (hubo dos muertos). En marzo de 1938, sí fue bombardeada (por la aviación italiana) durante tres días consecutivos: entre las 22 horas del día 16 y las 15 horas del día 18 sufrió trece ataques. A consecuencia de ellos, murieron unas mil personas. (N. del E.).

[7] Confusión del autor: Joaquín Maurín permaneció en prisión hasta varios años después de terminada la guerra. Entonces se exilió, primero a Francia y, luego a los EE. UU. Incomprensiblemente (?) fue puesto en libertad (probablemente el único diputado del Frente Popular, caído en manos de los franquistas, que salvó su vida), pero ¿cómo podía «haber sido en un intercambio de prisioneros» si hacía muchos años que había terminado la guerra? (N. del E.).

[8] Nombre completo: Magdalena Maes Barayón. (N. de la T.).

[9] Aunque Amparo murió el 11 de octubre de 1936, más adelante el autor explica que la inscripción en su tumba está equivocada. (N. del E.).

[10] Land lady = casera. En inglés en el original. (N. de la T.).

[11] Confusión del autor. Más adelante dice que se reunieron con su padre en Bayona que, aunque cercana a Biarritz, es otra ciudad francesa. Por otra parte, Biarritz también está cerca de la frontera franco-española (Hendaya) pero no lo es. (N. del T.).

[12] Esta opinión del autor encaja perfectamente con la nota a pie de página número 3. (N. del E.).

[13] Se refiere al teniente José Castillo asesinado en Madrid, el día 12 de julio de 1936. (N. del E.).

[14] El día 13 (madrugada). (N. del E.).

[15] En Marruecos, el día 17. En San Sebastián, Vitoria, Pamplona y Canarias, el 18. En Barcelona, Madrid, Burgos y Sevilla, el 19. Después, las demás. Radio Castilla (Burgos) no empezó a emitir proclamas «nacionales» hasta el día 19. El 18 no pudieron, pues, escuchar la emisora de Burgos (Radio Castilla) emitiendo noticias favorables a los rebeldes. Tuvo que ser, al menos, el 19. (N. del E.).

[16] En ninguna de las primeras proclamas de los rebeldes se alude a la Constitución. Es más, muchas de ellas terminan con un «¡Viva la República!». (N. del E.).

[17] El general Queipo de Llano (que fue quien se impuso en Sevilla) tenía fama de ser de izquierdas… hasta ese momento. (N. del E.).

[18] Ese domingo era el día 19 de julio. Conchita confunde las fechas en sus recuerdos. (N. del E.).

[19] El coronel Ricardo Serrador Santés se unió al general Saliquet en Valladolid. Y el 21 de julio participó en los combates por la posesión del Alto de los Leones. (N. del E.).

[20] En castellano, en el original. (N. del E.).

[21] En castellano, en el original. (N. del E.).

[22] Un Real Decreto del 16 de junio de 1926, que afectaba la organización interna del Arma de Artillería, no fue aceptado por ésta. El 5 de setiembre del mismo año, ante la actitud de los artilleros, Primo de Rivera declaró suspensos de empleo y sueldo a todos esos militares. Los cadetes de la Academia de Artillería se unieron a sus jefes en la protesta corporativa. (N. del E.).

[23] Amelia Earhart (1897-1937): Aviadora norteamericana. La primera mujer que cruzó el Atlántico y el Pacífico a solas. (N. de la T.).

[24] Apreciación personal de Sender. (N. del E.).

[25] Fue el 10 de mayo de 1931. Las masas intentaron asaltar el edificio de ABC, pero la Guardia Civil lo impidió, aunque suspendió su publicación y se incautó del inmueble. Entonces, los revolucionarios republicanos se dedicaron a quemar iglesias y conventos, ante la pasividad de la Policía y la negativa de los bomberos a actuar. En la tarde del 11 de mayo se declaró el estado de guerra. (N. de la T.).

[26] Gil-Robles logró reunir 50 000 partidarios en El Escorial (abril de 1934), pese a la ventisca molesta. Efectivamente, en esa concentración se advirtieron no sólo la disciplina y la unidad, sino también los primeros símbolos y actitudes propias de una organización fascista. Pero en ningún momento se pensó en realizar una «marcha sobre Madrid». (N. del E.).

[27] Franco había sido nombrado Jefe del Estado Mayor Central en mayo. Por eso el autor le atribuye la responsabilidad de las maniobras militares que se realizaron en Riosa (Asturias) el 22 de julio de 1935. En realidad, se efectuaron por orden del ministro de la Guerra, Gil-Robles, aunque Franco asistió a ellas. (N. del E.).

[28] Se refiere a la «piel política», no física. Azaña fue absuelto de toda responsabilidad por el Tribunal Supremo y por las Cortes. (N. del E.).

[29] Imposible que ese verano Largo Caballero arengase en público porque estaba en la cárcel Modelo. Fue detenido el 14 de octubre de 1934 y no salió de allí hasta el 12 de octubre de 1935, día en el que se le puso en libertad por el fallecimiento de su esposa Concepción Calvo. Después, en noviembre, fue absuelto por el Tribunal Supremo. (

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