Juan Luis Arsuaga - Vida, la gran historia

JUAN LUIS ARSUAGA FERRERAS (Madrid, 1954) es licenciado y doctor en Ciencias Biológicas y catedrático de Paleontología en la Universidad Complutense de Madrid. Es uno de lo paleontólogos más destacados del mundo. Es codirector del equipo de investigación de Atapuerca, y ha sido galardonado por sus trabajos colectivos de investigación con premios como el Príncipe de Asturias. En 1992 descubrió el cráneo humano más completo del registro fósil de la humanidad, el cráneo número 5, de un antepasado de los neandertales. Es miembro de algunas de las instituciones científicas más prestigiosas del mundo, como la Academia de Ciencias de los Estados Unidos, y ha sido conferenciante en universidades de todo el planeta. Como divulgador científico, es autor, entre otros, de La especie elegida (1998), el libro divulgativo sobre evolución humana de más éxito en España, El collar del neandertal (1999) y Amalur, del átomo a la mente (2002). Vida, la gran historia, es su libro más reciente.

Estos hechos, como se verá en los últimos capítulos de este libro, parecían dar alguna luz sobre el origen de las especies; este misterio de los misterios, como lo ha llamado uno de nuestros mayores filósofos.

El origen de las especies,

CHARLES DARWIN

¿Significa esto que la religión simplemente no es válida desde un punto de vista científico, que el conflicto es insoluble y que hay que elegir entre un lado y otro? Yo no lo creo. La ciencia puede invalidar, y lo hace, algunas ideas tenidas por religiosas. Sea Dios lo que sea, seguramente es coherente con el mundo de los fenómenos observables en el que vivimos. Un Dios cuyo medio de creación no sea la evolución es un falso Dios.

This View of Life,

GEORGE GAYLORD SIMPSON

Es imprudente hoy en día para un científico emplear la palabra «filosofía», aunque sea «filosofía natural», en el título (o incluso en el subtítulo) de un libro. Se puede tener la seguridad de que va a ser recibida con desconfianza por los científicos y, en el mejor de los casos, con condescendencia por los filósofos. Solo tengo una excusa, pero la creo legítima: el deber que le corresponde al científico, hoy más que nunca, de entender su disciplina como una parte de la cultura de su tiempo, a la que puede enriquecer no solamente con conocimientos técnicos, sino también con ideas procedentes de su propia especialidad científica que le parezcan significativas para las Humanidades.

El azar y la necesidad.
Ensayo sobre la filosofía natural de la biología moderna,

JACQUES MONOD

¿Podría haber hoy alguien vivo que llegará hasta los 1.000 años? ¿Y de dónde vienen los seres humanos? La evolución es un proceso de mutaciones al azar, así que ¿un rodar diferente del dado evolutivo produciría de todos modos organismos con ojos? ¿Si rebobináramos la evolución y le diéramos al play, llegaríamos a la vida inteligente, o somos el resultado de unos giros afortunados del dado? ¿Hay vida inteligente en otro lugar de nuestro universo? ¿Y qué decir de la tecnología que estamos creando? ¿Podría un ordenador alcanzar la consciencia? ¿Seré capaz algún día de descargar mi consciencia para sobrevivir a la muerte de mi cuerpo?

Lo que no podemos saber,

MARCUS DU SAUTOY

Título original: Vida, la gran historia

Juan Luis Arsuaga, 2019

Ilustraciones: Susana Isabel Cid Martínez

Editor digital: Titivillus

ePub base r2.1

NOTAS PRÓLOGO

[1] Aunque si le interesa el tema, Richard Dawkins le ha dedicado al asunto de las pruebas de la evolución un espléndido libro que le recomiendo, Evolución. El mayor espectáculo sobre la Tierra (2009).

NOTAS JORNADA I.
TIERRA DE NADIE, TIERRA DE TODOS

[1] Según una reciente interpretación de la tablilla Plimpton 322, que pertenece a la época paleobabilónica (1900 a. C. a 1600 a. C.).

[2] Aunque el teorema de Pitágoras solo se cumple en un mundo plano, en un espacio euclidiano (por Euclides). En mundos curvados no es verdad.

[3] El ejercicio de preguntarse qué habría pasado si las cosas hubieran transcurrido de otra manera (sobre todo en las grandes batallas) ha producido algunos libros interesantes y divertidos de «Historia alternativa», como What if? The World’s Foremost Military Historians Imagine What Might Have Been (1999), coordinado por Robert Cowley. El primer capítulo trata del sitio de Jerusalén por los asirios. Una plaga, que los judíos atribuyeron a Yaveh, obligó a los asirios a levantar el cerco. Si Jerusalén hubiera caído, argumenta el autor del capítulo, no habría habido siglos más tarde ni cristianismo ni islam y hoy el mundo sería otro.

[4] Ya se han modificado embriones humanos de una sola célula (es decir, cigotos, óvulos fecundados) —aunque luego no se llegaran a implantar— para sustituir un gen mutante responsable de cierta enfermedad, la miocardiopatía hipertrófica, utilizando para ello la técnica de edición genómica (un corta y pega) conocida como CRISPR.

[5] Este es un nivel intermedio de complejidad social que se llama en inglés chiefdoms y que puede traducirse como sociedades con un caudillo o cacique (cacicatos o jefaturas), que todavía no son Estados (reinos o repúblicas), pero que van más allá de la organización tribal y abarcan más territorio y varias comunidades. Serían sociedades implantadas regionalmente y no solo locales. En ellas ya hay una clase social superior, una casta, que es la nobleza hereditaria, y una clase inferior: los plebeyos. Los antropólogos sociales describen el cacicato en los tiempos modernos en las islas del Pacífico, y también en América y África. Se me ocurre que muchos de los pueblos que encontraron los romanos en Hispania estarían en ese nivel de organización de caciques (como los régulos o reyezuelos de los iberos), así como los pueblos indígenas (anteriores a la conquista castellana) de las islas Canarias (los menceyatos en Tenerife, los guanartematos en Gran Canaria), pero lo dejo para los expertos.

[6]Reinventing Darwin. The Great Debate at the High Table of Evolutionary Theory, (1995).

[7] Pero Chardin no pudo imprimir sus obras de pensamiento en vida (porque se lo prohibió la Iglesia), y para cuando se publicó su libro, El fenómeno humano (en 1955, después de su muerte, ese mismo año), ya se había completado la síntesis neodarwinista, y las ideas del autor no tenían cabida en el mundo académico. Ni tampoco, al parecer, en la teología ortodoxa de la Iglesia católica. El filósofo y teólogo alemán Dietrich von Hildebrand le dedicó unas páginas extremadamente críticas en su libro El caballo de Troya en la Ciudad de Dios (1967), donde lo califica de «falso profeta».

[8]Evolución para todos. De cómo la teoría de Darwin cambia nuestro pensar (2007) y Darwin’s Cathedral: Evolution, Religion and the Nature of Society (2002).

[9]El legado de Darwin. Qué significa hoy la evolución (2003).

[10]El bonobo y los diez mandamientos (2013).

[11] La teleología es la parte de la filosofía que se ocupa de los fines, de los propósitos. Pero, más que el sustantivo, se utiliza habitualmente el adjetivo, «teleológico».

[12] Y considera que no puede explicar mejor su posición que como lo hace Fernando Savater en las entradas «naturaleza» y «muerte» de su Diccionario filosófico.

[13] Un algoritmo, como lo llama el filósofo americano Daniel Dennett en su conocido libro La peligrosa idea de Darwin (1995). Aprovecho para explicar que citaré en español los títulos de los libros escritos en inglés u otra lengua en los casos en los que tenga noticia de que existe traducción, pero la fecha de publicación será siempre la de la primera edición en la lengua original, puesto que importa, y mucho, saber en qué momento histórico aparecieron los textos. En cambio, no incluyo la editorial o editoriales que han publicado el libro que se cita, porque en estos tiempos de internet es fácil encontrarlas.