Javier Sanmateo Isaac Peral - El submarino Peral. La gran conjura
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- Libro:El submarino Peral. La gran conjura
- Autor:
- Editor:ePubLibre
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- Año:2008
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El submarino Peral. La gran conjura: resumen, descripción y anotación
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JAVIER SANMATEO ISAAC PERAL. Madrid 1960.
Máster en Dirección de RR HH por ICADE y Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales, rama Administración de Empresas, por la Universidad Complutense de Madrid. Tras unos inicios profesionales en la banca y en la docencia, lleva ligado durante los últimos 26 años a la Industria del Automóvil en las áreas de RR HH, Marketing, ingeniería de procesos, Calidad y Logística. En los últimos ocho años compatibiliza sus tareas profesionales con las de investigación en temas históricos relacionados con el origen y evolución del Arma Submarina. También orienta su investigación a los conflictos militares y las actividades de la industria de armamento y el espionaje militar e industrial en el último tercio del siglo XIX y el primero del XX. Autor de dos libros, varios artículos y conferencias sobre dichas materias.
Es bisnieto del inventor del submarino y ha realizado la mayor labor de investigación hasta la fecha sobre la vida y la obra de Isaac Peral.
Para mi mujer Susana y mis hijos Alejandro y Laura. Para
toda la familia del inventor, los que están y los que ya no
están en este mundo.
Y para todos los marinos y soldados españoles de honor.
Título original: El submarino Peral. La gran conjura
Javier Sanmateo Isaac Peral, 2008
Editor digital: Titivillus
ePub base r2.1
[1] El archivo personal del inventor que actualmente pertenece al Estado español.
[2] Los personajes son Narciso Monturiol y Cosme García: ambos pertenecían a una generación coetánea de los padres de Peral; lo que en relación a la evolución de la ciencia supone un abismo temporal. Los dos fracasaron en su intento de navegar sumergidos con artefactos que utilizaban la fuerza muscular como sistema de propulsión.
[3] Ambos eran jefes de la Armada española, coetáneos del inventor, ligados al poder político y escribieron dos libros que le atacaban explícitamente.
[4] Especie de destacamento de la Armada en las ciudades portuarias que carecían de Capitanía.
[5] Frase textual de su libro La Escuadra del almirante Cervera.
[6]Democracia, República, Restauración: el legado epistolar de la familia Gras-Beránger. Editado por la UNED en 2006.
[7] En el Archivo del Museo Naval de Madrid se conserva un manual de geometría que utilizó para examinarse; con su firma y sus acotaciones y ejercicios.
[8] Su hijo, que se llamaba también Tomás de Azcárate y uno de los primeros comandantes de submarinos españoles, fue fusilado nada más comenzar la Guerra Civil.
[9] Todavía hoy en el citado centro existe un busto de Peral que recuerda su labor.
[10] Cánovas ya había hecho concesiones a Gran Bretaña sobre Borneo y estaba dispuesto a negociar con Alemania el establecimiento de bases en Femando Poo.
[11] Carga explosiva fija, sujeta a una pértiga y que se accionaba al entrar en contacto con el casco del buque enemigo. Su uso era muy peligroso pues a menudo la explosión afectaba al barco atacante.
[12] Miembro del partido de Cánovas y Diputado en varias legislaturas.
[13] En la correspondencia entre ambos, recientemente publicada, se aprecia la enorme influencia de Beránger sobre él.
[14] Aparte de estas guerras, a Zaharoff se le considera relacionado —como instigador— con la que enfrentó a españoles y americanos en 1898, con la ruso-japonesa, con la chino-japonesa, la anglo-boer y con las varias que enfrentaron a turcos y griegos tras el armisticio que puso fin a la PGM. En estas últimas no sólo aparece como instigador, sino que fue quién las indujo directamente. En todas ellas se enriqueció su empresa Vickers vendiendo armas, municiones y demás pertrechos de guerra a todos los bandos en conflicto.
[15]Men of Wealth, John T. Flynn 2007.
[16]The Mask of Merlin, Donald McCormick, 1970.
[17]Wall Street y los bolcheviques, Anthony Sutton.
[18] Durante los años 1888, 1889 y 1890 la Revista General de Marina publicó muchos artículos alabando sin razón a los competidores de Peral. Y, ya desahuciado su submarino, publicó por entregas el libro inédito de Monturiol —inédito porque nadie lo había querido publicar—, para crear aún más confusión.
[19] La descripción de los síntomas del cáncer coinciden con esta modalidad que recibe esta denominación actualmente. En aquella época se pensó que se lo había originado una herida provocada por un barbero durante su estancia en Filipinas, mal cicatrizada.
[20] Federico Montaldo, médico de la Armada y colaborador habitual de la revista publicó varios artículos que defendían la imposibilidad de resolver este apartado.
[21] En la primera memoria, el submarino no incorporaba periscopio, y la maniobra de ataque se realizaría con éste sumergido sin aflorar este. Por tanto, lo que era una mejora considerable, Montojo lo pretendía presentar como un inconveniente.
[22] Sólo se había construido uno: el crucero Infanta Isabel, el primer buque metálico construido en España.
[23] Concas tomó a su cargo de la defensa del almirante Cerrera, tras la derrota de Santiago. Cervera había sido encargado por el Gobierno de dirigir los Astilleros del Nervión —tras su incautación por el Estado—, para asegurar la correcta ejecución de los tres cruceros que se construían allí, el Infanta María Teresa, entre ellos.
[24] Concas pasó a ser segundo en la Escuadra de Cervera, tras el desembarco de Bustamante, y era el comandante del Infanta María Teresa: buque insignia de la misma, durante el combate de Santiago.
[25] En un artículo que publicó en el Heraldo de Madrid a propósito del informe del Consejo Superior de la Marina, que repetía el mismo argumento, explicaba por ejemplo que la máquina de vapor utilizaba elementos que eran utilizados por el hombre desde la época de los romanos: una caldera, un cilindro con un émbolo y una chimenea.
[26] El 7 de octubre de 1886 Villaamil envía desde Londres, donde se encontraba supervisando las obras del Destructor, una carta al ministro Beránger y textualmente le escribe: «Pasado mañana se espera en esta al célebre Mr. White jefe de construcciones navales del Almirantazgo… puedo decir a V. que en el Almirantazgo ya se están copiando los planos de este buque que con los del Reina Regente que han sido solicitados por el Gobierno de los Estados Unidos…».
[27] En su libro La Escuadra del almirante Cervera, Concas sostiene sin pudor que la principal misión de la Marina debería ser precisamente esta labor «semi diplomática» de impresionar a las demás naciones.
[28] El cardenal Monescillo, que sería más adelante primado de España, era muy popular en aquellos años, y muy denostado también —en ciertos sectores políticos— dada su postura en defensa del integrismo religioso.
[29] El padre Mortara era muy famoso por su incansable actividad apostólica. Recorrió el mundo entero fundando conventos, realizando obras de caridad, y predicando en todos los países y en casi en todas las lenguas conocidas: Unamuno le recordaba haciéndolo en vascuence en Guernica cuando él era niño (lo que era muy llamativo dado su origen italohebreo). También era famoso por lo singular de su origen: siendo un niño judío fue bautizado por la criada católica de sus padres, cuando parecía a punto de morir, y cuando el Papa tuvo noticia de este bautismo, dispuso que fuera educado como cristiano. El asunto provocó una fuerte disputa entre la comunidad hebrea que vivía en Italia, los partidos ateos de toda Europa y los Estados Pontificios (que todavía existían). Por tanto, era una figura muy controvertida; y no sabemos si la noticia del diario canovista era real o inventada, para manipularla como era habitual.
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