Doctora en Ciencias. Ha complementado su formación en el campo ambiental con estudios en el ámbito humanista como la ciencia de la felicidad, el coaching y otras disciplinas de desarrollo personal. Ha trabajado internacionalmente en cooperación al desarrollo, innovación e investigación sobre sostenibilidad especialmente en los ámbitos de la energía, el cambio climático y el desarrollo sostenible. En 2018 fundó la organización El Buen Vivir con el objetivo de extender la cultura de la felicidad a nivel individual y colectivo. Dentro de la organización promueve actividades de sensibilización y divulgación sobre felicidad, conceptualiza e implementa proyectos sobre bienestar, realiza formaciones y participa en conferencias, contribuye a actividades de innovación y lleva a cabo investigaciones sobre el vínculo entre desarrollo sostenible y felicidad.
Leire Iriarte Cerdán
Políticas de felicidad
Un nuevo paradigma para un nuevo tiempo
Colección Investigación y Debate
© Leire Iriarte Cerdán, 2022
© Los libros de la Catarata, 2022
Fuencarral, 70
28004 Madrid
Tel. 91 532 20 77
www.catarata.org
Políticas de felicidad.
Un nuevo paradigma para un nuevo tiempo
E-ISBN: 978-84-1352-435-1
ISBN: 978-84-1352-432-0
Depósito legal: M-8.337-2022
Thema: J/KCVK/JKS
impreso por artes gráficas coyve
este libro ha sido editado para ser distribuido. La intención de los editores es que sea utilizado lo más ampliamente posible, que sean adquiridos originales para permitir la edición de otros nuevos y que, de reproducir partes, se haga constar el título y la autoría.
Necesitamos que haya gente feliz en el mundo.
Thich Nhat Hanh
¿QUÉ NOS HACE FELICES O INFELICES?
Es una pregunta crucial porque la búsqueda de la felicidad atañe a todos los seres humanos. La aspiración a la mejora de las condiciones de vida representa un motor fundamental para cada uno de nosotros y para toda la sociedad. Durante milenios la respuesta a esta pregunta se confió a las especulaciones de los filósofos. Luego, hace algunas décadas, se descubrieron varios modos de medir la felicidad y esto dio vida a una “ciencia de la felicidad” que se ha ramificado a través de todas las ciencias sociales. La primera fase de las investigaciones se dedicó a responder con los métodos cuantitativos del análisis científico moderno a la pregunta milenaria sobre los determinantes de la felicidad. Entre otras cosas, los estudios han demostrado que, a pesar de que tantas áreas del mundo hayan alcanzado un bienestar material inimaginable para las generaciones precedentes, la felicidad de amplios estratos de población no ha mejorado.
En una segunda fase, economistas, estadísticos, sociólogos y psicólogos trabajaron en todo el mundo para desarrollar nuevas medidas del bienestar que sustituyeran o complementaran la más comúnmente usada: el PIB, que solo mide el componente material del bienestar.
Estas dos fases de la investigación sobre la felicidad aún no se han agotado, pues los estudiosos continúan dedicando esfuerzos sustanciales a indagar estos temas. No obstante, la investigación ya ha entrado en una tercera fase, en la cual la atención de los investigadores se concentra progresivamente en la individuación de políticas capaces de promover el bienestar: un bienestar que, por supuesto, comprende aspectos materiales (medidos por el PIB), pero que también sea igualitario y sostenible, hecho de salud, conocimiento y cultura, oportunidades de trabajo, relaciones interpersonales, un medioambiente limpio, etcétera.
El bonito libro de Leire se sitúa en esta tercera fase de la investigación, aquella en la cual, tras haber comprendido a fondo (y medido) qué se encuentra en la base de la felicidad humana, finalmente se busca traducir este conocimiento en una sociedad amigable con la felicidad. En este contexto, este libro constituye uno de los esfuerzos más importantes, avanzados y completos para convertir en accesible a los no especialistas una ciencia de la felicidad que, además de proponer un nuevo concepto de progreso, sugiere cómo cambiar la sociedad para transformarla en un lugar donde se puedan vivir vidas más felices.
Stefano Bartolini
FELICIDAD: ASPIRACIÓN UNIVERSAL
Y COMPROMISO POLÍTICO
La felicidad no es un objeto de libre elección. En cierto modo, podría decirse que estamos “programados” para ser felices o, al menos, para buscar serlo en todo momento. Seamos o no conscientes de ello, este objetivo orienta todo lo que hacemos y todo lo que dejamos de hacer.
El problema radica en cómo y en dónde buscamos la felicidad. Porque, con mucha frecuencia, es la ignorancia la que nos conduce a lugares de desdicha, infelicidad y sufrimiento.
A menudo, confundimos la felicidad con nuestros intereses individualistas y cortoplacistas, cuando no mezquinos; con algo que perseguimos y de lo que ansiamos apropiarnos a toda costa.
En esa persecución insensata caemos en una doble trampa: olvidamos que la felicidad no es un objeto del que podamos apropiarnos y que se nos niega cuando se busca a costa de otros. De hecho, basta desvelar el doble engaño para advertir que la felicidad no está fuera o en el futuro y pasar de la competencia excluyente a la cooperación solidaria.
Así pues, se nos hace patente que el mayor obstáculo para la felicidad es la ignorancia acerca de lo que somos. Se trata de la ignorancia por la que nos reducimos a la personalidad, poniendo nuestra identidad en el yo y considerándonos separados de los otros. Esta doble creencia es fuente de confusión y de sufrimiento.
Si el sufrimiento es hijo de la ignorancia, la felicidad viene de la mano de la comprensión, que conduce a la consciencia de unidad: soy uno con todo lo que es. Si bien mi personalidad es única, comparto mi verdadera identidad con todos los seres. Y esa identidad es consciencia, plenitud…, felicidad.
A partir de esa comprensión, se ilumina nuestra paradoja: en el plano profundo, somos felicidad; en el plano de las formas, nos sentimos movilizados interiormente para favorecer la felicidad y el bienestar de todos los seres. Por un lado, somos ya aquella felicidad a la que aspiramos; por otro, nos vivimos como cauce que posibilita el despliegue de la vida para todos.
Justo en esta convergencia, donde se cruzan los dos polos de la paradoja humana, se sitúa el libro de Leire Iriarte Cerdán. Reconociendo el lugar central de la persona y la aspiración universal a la felicidad, aporta datos, claves y herramientas para hacer de las ciudades, de los países y del mundo un lugar más feliz.
Ese es el compromiso político en el que Leire insiste apasionadamente. Una vez comprendido que, en el plano profundo, más allá del yo en el que me estoy experimentando, todo otro es no otro de mí, no puede haber compromiso más digno ni noble que el cuidado activo y eficaz de las personas. Lo que este compromiso construye no es sino la casa común. ¿Cabe una mejor definición de lo que es la política ?