Renée Francis - Cambia de trayectoria profesional

Renée Francis, 2017

Traducción: Laura Soler Pinson

Editor digital: Titivillus

ePub base r2.1

• ¿Problemática? ¿Cuáles son las etapas que debo superar para vivir con total tranquilidad un periodo de reciclaje profesional?
• ¿Utilidad? Si se hace bien, el cambio de profesión puede ser una fuente de realización personal y profesional. Esto implica que debemos llevar a cabo un trabajo previo de reflexión sobre nosotros mismos para conocer nuestras motivaciones, la profesión hacia la que queremos orientarnos, la formación que se adaptará mejor, etc. De esta manera, podremos alcanzar nuestro nuevo objetivo.
• ¿Contexto? Desarrollo personal, orientación profesional, bienestar profesional.
• ¿Preguntas frecuentes?
  • ¿Cómo escoger mi nueva profesión?
  • ¿Hasta qué edad puedo reciclarme profesionalmente?
  • ¿Existen profesiones más propicias para un reciclaje?
  • No me gusta mi trabajo actual, pero tengo un contrato indefinido. ¿Es acertado dejarlo todo?
  • ¿Cómo financiar mi reciclaje?
  • ¿Cuáles son los escollos que debo salvar?

Hoy en día, son pocos los empleados que conservan el mismo trabajo en una empresa durante toda su carrera. La rutina, el hastío, una presión demasiado elevada o las ganas de un cambio son algunos de los muchos motivos para un reciclaje profesional, aunque hay que llevarlo a cabo por las buenas razones. Posiblemente alguna vez hayas pensado en cambiar de profesión, ¿verdad? Sin embargo, a la hora de dar el salto, te asaltan las dudas: ¿y si mi nueva profesión no me gusta? ¿Seré capaz de encontrar un trabajo? ¿Qué formaciones debo seguir? ¿Cómo financiarlas? Todas estas preguntas generan estrés y frustración. No te preocupes: si bien es cierto que todo cambio implica asumir riesgos, puedes calcularlos y anticiparlos para evitar equivocarte de lleno. El reciclaje también implica saber avanzar más despacio. Por consiguiente, tómate tu tiempo para ojear nuestras recomendaciones y pensar etapa por etapa en tu nueva trayectoria profesional. En tan solo 50 minutos, este libro te ayudará a cambiar de rumbo sin perder el norte.

Una búsqueda de sentido

La búsqueda de sentido es el motor principal de un reciclaje. En efecto, dar un significado a nuestro día a día es una preocupación que muchos comparten. Y con razón, porque a día de hoy, el trabajo ya no solo representa una forma de sustento, sino también una fuente de realización. Así, es posible que a lo largo de nuestra carrera perdamos la pasión que nos movía antes o que ya no nos identifiquemos con la empresa y su filosofía. Por lo tanto, ya no tenemos ni las ganas ni la motivación para avanzar, y llevamos a cabo tareas que nos frustran. La búsqueda de sentido reside en sentirnos valorados personal y profesionalmente, en el hecho de sentirnos útiles y de que nos dejan participar.

Tienes que aceptar que, durante tu búsqueda, atravesarás periodos de duda. Precisamente cuando te replantees tus ideas le darás un sentido a tu vida profesional y favorecerás tu bienestar. Por consiguiente, todo reciclaje debe ir acompañado de una reflexión profunda y precedido de una introspección. Plantéate las siguientes preguntas:

• ¿Qué aspectos son más importantes para mí en el trabajo? ¿El humano, el económico, el intelectual?
• ¿Considero fundamental que mi profesión esté en consonancia con mis valores?
• ¿Necesito reconocimiento?
• ¿Cuál es mi verdadera ambición en la vida?

Las respuestas te revelarán unos primeros datos útiles sobre los que reflexionar. Por ejemplo, si le das más importancia al aspecto humano, se ajustará más a ti una profesión en el ámbito de lo social o de la comunicación que tu puesto actual como contable.

Reciclarse por las buenas razones

A lo largo de los años y con las distintas experiencias, nuestros objetivos van evolucionando. Independientemente de las situaciones (inicio de trayectoria profesional, tras una baja de maternidad, después de un despido o de un ascenso, etc.), podemos tener ganas de cambiar de profesión. Antes de emprender un nuevo camino, pregúntate qué te sedujo de tu profesión actual y cómo has llegado hasta este punto. ¿Elegiste tú tu profesión o fue ella la que te eligió a ti? ¿Has podido cursar estudios? ¿Te habría gustado iniciarte en otros ámbitos? ¿Tu puesto tiene que ver con tu formación? Estas preguntas te ayudarán a identificar un posible malestar.

Si sientes que tu lugar no está en tu puesto actual, el reciclaje puede ser la solución. Incluso si anteriormente pensaste que habías errado tu vocación, nada te impide que lo logres esta vez. No obstante, interpreta bien las señales, puesto que podría suceder que este periodo de duda solo fuera pasajero. Reciclarse por los motivos incorrectos se convertiría entonces en un error y probablemente no te traería el bienestar que estás buscando. Antes de lanzarte, es fundamental que analices las razones que te empujan a cambiar de profesión para asegurarte que tengan una base sólida y que no se trate de un arrebato. Para no tomar la decisión equivocada, completa la tabla que te presentamos a continuación, que te revelará los motivos de tus deseos de reciclaje profesional.

A continuación, pregúntate cuál es el origen real de este deseo de cambio, que se esconde detrás de los otros motivos mencionados (los que has marcado o añadido). El ser humano tiene una gran capacidad para inventar excusas, sobre todo cuando se trata de justificarse. Existe una buena razón que tendrás que identificar y que constituirá tu base. El resto es solo ornamental, pretextos o excusas que sirven para legitimar tu reciclaje; aun con todo, estos argumentos también revisten importancia, puesto que deberás tenerlos en cuenta el día que tomes tu decisión. No obstante, céntrate en tu motivación primera para no dispersarte y progresar de una manera más serena en tu reciclaje. Si bien existen decenas de buenas razones, ten presentes las siguientes, puesto que parece ser que a menudo son en realidad pasajeras:

• no soportas más el ambiente de trabajo;
• la colaboración con los compañeros es complicada;
• no sabes exactamente qué quieres;
• necesitas novedades constantemente;
• estás frustrado por tu salario, las tareas que realizas, etc.;
• tu entorno te anima a cambiar de trabajo por diversas razones;
• etc.

En efecto, en el mundo laboral, nada es para siempre y, por lo tanto, puede que en seis meses cambie tu jefe, recibas un ascenso, se concluya tu proyecto complejo, se solucione el desencuentro con tu colega, etc. Si se trata solamente de hastío general, haz una pausa, tómate unos días para respirar. Si por el contrario tu reciclaje viene motivado por un proyecto real, que te ronda la mente desde hace un tiempo, entonces merece la pena que pruebes suerte.

Informarse acerca del mercado de trabajo

Analiza la oferta y la demanda en el mercado de trabajo antes de lanzarte para no asumir riesgos inútiles. Infórmate: ¿cuáles son las necesidades y cuál es la competencia? ¿Tienes conocimientos o una solución específica para una demanda? Consulta los anuncios del sector que te interesa, recurre a tu red y evalúa las oportunidades económicas. Podrás sacar más cosas en claro y descartarás áreas demasiado inseguras.

Tras varios años ejerciendo en el mismo sector, a veces es difícil proyectarse en otro. Para algunos, la nueva senda profesional ya está trazada, pero para otros, todavía surgen preguntas. No existe una fórmula mágica para descubrir qué profesión se adapta a ti a la perfección. Así que, para aquellos que todavía buscan, el autoanálisis sigue siendo una de las mejores soluciones. Durante este ejercicio, mantén la mente abierta a cualquier posibilidad y a cualquier oportunidad: las ideas brillantes a menudo nacen de replanteamientos importantes.