Estimado lector/lectora, me gustaría compartir contigo esta trepidante historia inspirada en hechos reales, que sin duda te hará vivir momentos inolvidables. Lo que en esta se narra, por extraordinario que parezca, se adentra sobremanera en lo desconocido.
El epicentro de este increíble relato, tuvo lugar un 28 de Junio de 1920 a orillas del Mediterráneo, seguramente en uno de los emplazamientos más extraordinarios y sorprendentes de nuestro maravilloso planeta.
No solo los vecinos de Jávea, lugar donde todo ocurrió, y pueblos limítrofes, conocen la confusa y efímera leyenda que se cuenta sobre el espeluznante crimen que a principios del pasado siglo conmocionó a los habitantes de este paraíso terrenal; son miles los enamorados de este lugar, los que en alguna ocasión se les erizó la piel cuando de niños se les contó por primera vez esta oscura historia que en su día saltó a los diarios de toda España.
Ahora por primera vez, Félix, personaje principal de esta trama, tras toda una vida dedicada a conocer lo que en realidad ocurrió, nos cuenta cada detalle sobre «Úrsula», conocida por todos como «La Criminala de Jávea». Nos ofrece la más completa y minuciosa obra jamás contada sobre uno de los crímenes más llamativos, acaecidos en la España de principios del pasado siglo.
José Mulet
El diario de Úrsula
(La Criminala de Jávea)
Título original: El diario de Úrsula
José Mulet, 2020
Revisión: 1.0
28/07/2020
Autor
JOSÉ MULET: A estas alturas de mi existencia puedo decir, que hasta este momento soy un gran afortunado.
No es que la vida me haya tratado sobremanera de forma privilegiada, más bien diría yo: me ha colmado de momentos y situaciones inolvidables.
El mundo en el que vivimos no es lo que parece, nada de lo que ocurre es casual, todo se ha diseñado cuidadosamente para que así lo creamos. Pese a ello, puedo decir, tal y como se cuenta en «El Diario de Úrsula», que mis vivencias, al igual que mi pasión por la narrativa, me han hecho sentir especial, creer que he venido a este mundo con una misión en la vida.
Ahora, trabajando ya en mi próxima novela, «La Cápsula del Tiempo», cuyo cometido desde siempre ha sido adivinar como será nuestro futuro próximo, desvelo muchas de las cosas que por desgracia la inmensa mayoría de gente desconoce.
PRESENTACIÓN
« E l Diario de Úrsula» narra la vida de un singular personaje fascinado desde muy temprana edad por unos acontecimientos que conmocionaron al pueblo de Jávea un 28 de junio de 1920.
Para poder entender de principio a fin todo cuanto atañe a esta extraordinaria historia, es necesario regresar al pasado, conocer a Félix desde sus primeras experiencias en la vida hasta que llega a ser un octogenario.
Desde el primero hasta el último de los capítulos, iremos conociendo a dos peculiares personajes, aunque pertenecientes a mundos distintos, por algún extraño e inexplicable motivo, estrechamente conectados en el tiempo.
EL DETONANTE
27 de Abril de 1992
V arios vehículos de la policía de Jávea, son movilizados por las continuas llamadas de vecinos perplejos por lo que estaban presenciando en la zona del Montañar, junto al emblemático Hotel plata. Ese mismo que a finales de la década de los años 30 abrió sus puertas con el nombre de «Bar Estrella».
«Es increíble ver la rapidez con que las cosas cambian y nos olvidamos de ellas, pero así es la vida, inexorable y vertiginosa».
El agente que atendía las llamadas, respondió a todos lo mismo: que ya andaban de camino. Así estuvo durante un largo rato atendiendo sin cesar.
En pocos minutos, como si de una película de acción se tratase, varios coches patrulla, con sus luces y estridentes sirenas, se dirigieron a toda velocidad desde sus posiciones hacia su destino.
De lejos, se advertía en medio de la calzada, una enorme retroexcavadora de cadenas, una pala Caterpillar, y un camión de gran tonelaje, frente a la que era sin duda la más emblemática de las casas que jamás se habían construido en Jávea: «Vista Alegre».
Ante el desconcierto por lo que parecía que iba a ocurrir, un tumulto de gente se agolpó frente a la icónica edificación. Entre sus comentarios, todos se preguntaban lo mismo ¿Cómo era posible que alguien tuviese la intención de arrancar de cuajo, un pedazo tan importante de la historia reciente de Jávea? Pese a su oscuro y misterioso pasado, se trataba de un elemento que no solo formaba parte del aquel idílico emplazamiento, además estaba en los corazones de miles de nostálgicos y enamorados de Jávea.
Lo que ese día la burocracia administrativa permitió, a pesar de la reprobación moral de los técnicos y personal que se vio envuelto en el demoledor litigio, entristeció a muchos, pero sin duda la peor parte se la llevó Félix. Pese a ello, algunas veces las cosas que más duelen son las que nos rescatan de nuestro propio letargo y las que nos hacen reaccionar.
Fue entonces, cuando el manuscrito que nuestro insólito personaje, con tan solo doce años escribió, y abandonó en un viejo cajón para alimentar a las lepismas, resurgió con la fuerza de un ciclón.
Más de una década después de acabar su primera obra escrita y abandonar sus aspiraciones como candidato a emprender la que podría haber sido su carrera literaria, rescató las cientos de páginas escritas, para añadir y reescribir algo que años atrás nunca hubiese imaginado que ocurriría. No sabía cómo lo iba a conseguir ni cuánto tiempo iba a tardar, pero tal como le pronosticó la sabia mujer en aquel fantástico verano de 1977 el momento había llegado.
PRÓLOGO
E l dorado atardecer de un espléndido día de finales de marzo, ardía en el cielo, reflejándose en los tejados de las viejas casas. Era un espectáculo divino que invitaba a recorrer las calles sin rumbo fijo.
Por una angosta calle aún por asfaltar, una joven encinta con su apuesto acompañante, paseaban cogidos de la mano como una pareja de enamorados. Pululaban dejándose llevar sin una dirección aparente, mientras conversaban al son de un lento paseo. Sus miradas brillaban en un armónico momento de paz como si el mundo fuese perfecto y las calles un paraíso terrenal. Hacían cábalas sobre su apremiante futuro, sin advertir, como el último aliento del día, se tornó en una espléndida noche ataviada por una luna llena coreada de estrellas.
En su apacible paseo, la joven rezumó algo mediante pausadas palabras.
—¿Lo has visto?… ha sido una preciosa estrella fugaz.
—No, lo siento… no he llegado a tiempo —respondió con cierta decepción el joven—, pero tú que la has visto, ya sabes lo que debes hacer.
—Ya lo he hecho —dijo ella con la encantadora sonrisa que la caracterizaba.
En su deseo Irene pidió que su hijo naciese sano y feliz, sin sospechar que los futuros papas estaban a punto de engendrar a un personaje… digamos… un tanto singular.
Los dos jóvenes siguieron andando despreocupados y disfrutando de tan apacible crepúsculo, preguntándose cómo sería sus vidas después de que un bebé aún sin sexo conocido, se uniese a la familia que en breve iban a formar.
PRIMERA PARTE