F. Ronin - ¡A votar se va leído!: Análisis gamberro de la actualidad política (Spanish Edition)

F. Ronin

¡A votar se va leído!

Análisis gamberro de la actualidad política

A ti, que me sustentas en cada miseria de esta sociedad.

A ti, que me aguantas en cada triste lunes.

A ti, que siempre me das fuerza,

sin pedir nada a cambio.

A todos vosotros, que lucháis cada día para salir adelante.

ÍNDICE

Capítulo 1. Zapatero tiene la culpa. Crónica de la subida al poder del gran líder Rajoy

Crisis mundial del sistema capitalista. La culpa de todo es de ZP ¿O no?

Zapatero se desmelena

Y en eso llegó Rajoy, y tras haber jodido, se acabó lo prometido

Capítulo 2. Sanidad pública. ¡Nos hemos curado por encima de nuestras posibilidades!

Inmigrantes go home

La hipócrita crisis del ébola

Capítulo 3. Gallardón. ¡Trata de abortarlo, por dios!

Capítulo 4. ¿Y si volvemos a la EGB? Bolonia nos la metió doblada: ¡Llega el 3+2!

Capítulo 5. “El Rey, simpático holgazán”

Juancar nos trajo la democracia. ¿En serio?

El rey se hace demócrata y la lía parda

Capítulo 6. CorruPPción (disculpen la falta ortográfica, será subsanada en próximas ediciones)

Capítulo 7. Ley mordaza. Nos quieren corderitos

Capítulo 8. Ideologías. No vivimos en el mejor de los mundos posibles, y lo sabes

Capítulo 9. Medios de comunicación y democracia. Esa relación de amor-odio

Syriza, la gran “DesGrecia” de Marhuenda

Venezuela, esa dictadura demoníaca que alborota a la caverna mediática

Capítulo 10. ¿Podemos? Si, podemos abrazar el discurso socialdemócrata

Génesis

Podemos se desinfla

Capítulo 11. Hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. Ahora pensemos por encima de las suya

CAPÍTULO 1

ZAPATERO TIENE LA CULPA

CRÓNICA DE LA SUBIDA AL PODER DEL GRAN LÍDER RAJOY

Crisis mundial del sistema capitalista. La culpa de todo es de ZP ¿O no?

No sé si a estas alturas os acordáis todavía de ZP. Era un señor del que se hablaba mucho en la televisión hace ya unos años. En realidad se llamaba Zapatero; bueno, se llama, pues aunque a muchos les pese sigue estando entre nosotros, vivito y coleando, y en ocasiones incluso reuniéndose con Pablo Iglesias. Quiero aclarar que no escribo este titular como mera banalidad, sino porque resulta que para una gran cantidad de personas –cifra englobada entre 10 y 40.000.000– es el gran causante de todos nuestros males. Sí, el hecho de que no puedas ir a tu tienda de electrónica más cercana a comprarte la PS4 , es culpa de él. O que tu coche se asemeje demasiado a esos clásicos que conducen en la isla de Cuba. Incluso que esta noche tengas que cenar agua caliente con Avecrem , en el mejor de los casos. Como decían los Def Con Dos hace ya algunos años: “La culpa de todo, la tiene Zapatero”… ¿O era Yoko Ono?

Bien, fuera como fuere, resulta que este señor lo tenía todo, éxito político, un país en creciente expansión económica, una ceja de gran movilidad, ¿carisma?... Pues depende, porque si lo comparamos con Rajoy, el niño de la ceja podría llegar a ser el nombre de un grupo de música pop. A pesar de ello, su derrota electoral fue incontestable. Y se debió básicamente a una causa de peso: LA CRISIS . Resulta que, sin saber muy bien cómo, se culpó a ZP de ser el creador de un complot económico internacional. ¿Cómo es esto posible?, ¿tiene un mero socialista –entiéndase del PSOE, nunca socialista en su definición clásica– el poder suficiente como para arruinarle la fiesta a tantos millones de personas alrededor del mundo? Permítanme que lo dude.

Aclaremos la memoria un poco. ¿Cómo surgió la crisis, dónde y por qué? Independientemente del detonante concreto que comenzara esta gran bola de nieve, para entender bien el contexto hay que viajar bastante atrás en el tiempo. Tras la Segunda Guerra Mundial, la política internacional se dividió en dos grandes bloques: el capitalismo y el comunismo. A causa de esta gran polarización política, el gran temor del mundo capitalista era la posibilidad real del contagio revolucionario, y esto llevó a que el mal llamado “viejo continente” implantara una serie de reformas sociales que mejorarían la calidad de vida de los trabajadores. Y es aquí cuando llegamos a un punto clave: la relación entre capital y trabajo, o lo que es lo mismo, la eterna LUCHA DE CLASES (lo pongo en mayúscula porque es un concepto clave para entender todo y también porque me da la gana).

Pero, ¿en qué consiste esa lucha de clases, y por qué nunca he oído hablar de ello en las noticias? Efectivamente, los medios de comunicación de masas jamás hablarán en estos términos porque sería abrir entre la población un debate que no interesa a sus dueños, ya que implicaría replantearse las bases del propio sistema que tanto rédito les ofrece. Por otra parte, han conseguido que vivamos en un mundo donde se nos dota de un falso bienestar que se sustenta en el desarrollo de una “clase media” –la cual realmente no existe, ya que se trata de un concepto acuñado por la burguesía en interés propio– con acceso a un alto nivel de consumo. Es un error corriente vincular unas altas capacidades de consumo –generalmente mediante endeudamiento– a la pertenencia de una clase trabajadora con poder económico, es decir, clase media, ya que el desarrollo humano no debe medirse en la cantidad de coches o televisiones que uno pueda comprar, sino en la obligación de cubrir las necesidades básicas de toda la población en cuanto a educación, sanidad, trabajo y derechos básicos. Por tanto, debemos decir que el primer error de todo esto es asociar inherentemente bienestar y consumo.

Esta sería la ecuación correcta:

Consumo ≠ Bienestar

Siendo ≠ lo contrario a = (igual), es decir, que una cosa no conlleva a la otra.

Bien, una vez aclarado esto, hay que recalcar que la clase media no existe, son los padres, como Santa Claus o los Reyes Magos. Por contra, lo que sí existe es una clase que posee los medios de producción y otra clase que al estar desposeída de estos se ve en la obligación de vender su fuerza de trabajo “al mejor postor” para poder sobrevivir. Estos últimos son los trabajadores, es decir, el proletariado. Además cabe señalar que la clase burguesa dueña de los medios representa un porcentaje ridículo de la población mundial. Esto supone una descompensación que provoca que la riqueza esté acumulada en manos de unos pocos, llegando a datos tan absurdos y depravados como estos:

- Según un informe de Oxfam Intermón, España es el segundo país más desigual de Europa, justo detrás de Letonia. Además, se recalca que para el 2016 el 1% de la población mundial podría poseer la misma riqueza que el 99% restante.

Sobra decir que en un mundo equitativo, el 1% de la población debería de tener el 1% de la riqueza; siempre suponiendo, claro, que busquemos vivir en un mundo así.

- En nuestro planeta hay actualmente 400 millones de niños sin acceso a agua potable.

Incluso conociendo este escalofriante dato, en el “mundo civilizado” aún tenemos el valor de plantearnos la privatización de este bien indispensable para la vida.

- Se calcula que EE.UU. posee aproximadamente un 25% de la riqueza total del mundo, mientras que el continente africano solamente un 1%

¡Qué curioso!, coincide que África ha sido y todavía es, probablemente, el continente más expoliado por los países ricos a lo largo de la historia (con el permiso de Latinoamérica, el otro gran perjudicado).