Annotation
Para los que buscan la consistencia de los milagros, la realidad de lo espiritual e intangible, éste puede ser un viaje sorprendente y definitivo. Expone un punto de vista de lo que vivimos y nos rodea nunca antes expuesta, porque parte de los Orígenes reales, de la única existencia posible. Desarrolla una perspectiva que dará contestación, por fin, a tantas preguntas sin respuesta que desde antiguo han empedrado los caminos de nuestra existencia.
JOSÉ LUIS MOLINA MILLÁN
Los cimientos del cielo
Autor-Editor
Sinopsis
Para los que buscan la consistencia de los milagros, la realidad de lo espiritual e intangible, éste puede ser un viaje sorprendente y definitivo. Expone un punto de vista de lo que vivimos y nos rodea nunca antes expuesta, porque parte de los Orígenes reales, de la única existencia posible. Desarrolla una perspectiva que dará contestación, por fin, a tantas preguntas sin respuesta que desde antiguo han empedrado los caminos de nuestra existencia.
Autor: Molina Millán, José Luis
©2014, Autor-Editor
ISBN: 9788461718795
Generado con: QualityEbook v0.84
Los cimientos del cielo
José Luis Molina Millán
Q UINTA edición. 2.015
LOS CIMIENTOS DEL CIELO.
Con la razón de un Curso de Milagros.
Esquemas y dibujos: Adrián Molina.
Diseño de portada: Victoria R. Morales
ASOCIACIÓN AURORA PARA EL DESPERTAR C/Roncesvalles 6 28260 Galapagar Madrid
ISBN: 978-84-617-1879-5
DEPÓSITO LEGAL: 09-RTPI-06918.2/2014
Impreso en España por PUBLICEP. C/Violeta 17-19 Humanes de Madrid MADRID
Sin cimientos nada es seguro. (T-24.4.3.I)
Para Ángeles mi compañera, mi
primera lectora, mi apoyo
y a los amigos que con su
escepticismo manifestado una
y otra vez, me instigaron a
buscar y encontrar la
consistencia de los milagros.
PROEMIO
É STE no es un libro de lectura, es un libro de estudio como hijo que pretende ser de U.C.D.M. del que se nutre en tu totalidad. Si alguien lo abre con la idea de pasear su mirada sobre las historias como si estuviera leyendo cualquier novela de título similar, p.e.; “Los pilares de la tierra”, puede que lo decepcione porque no entienda nada, se trata de “Los cimientos del Cielo” y realmente no estamos hablando de la misma cosa. Esto no es retórica en ninguno de los casos. Necesitaremos nuestra atención e interés, no porque sea difícil, sino porque es contrario a lo conocido y reclama nuestra participación. Pasearemos por conceptos antes nunca transitados y escucharemos afirmaciones inéditas para nosotros, tomas de conciencia nuevas y razonamientos a cuestiones que jamás te planteaste incomprensiblemente antes. Todo va a ser nuevo, tan nuevo como el lenguaje que a veces hay que usar.
Estas páginas contienen lo que he aprendido y sigo estudiando para descubrir y sostener en mi mente la consistencia de sus afirmaciones, la misma que siempre supe que contenía y que fui descubriendo ensamblando párrafos diseminados por los textos. Quizá mi formación matemática me apuntara hacia este modo de ver el Curso razonada. Ahora siento que ya puedo hablar de él, moverme por cualquier concepto que se me presente como una provocación y hallar la respuesta.
Después de terminar de construir esta historia, he sentido unas ganas inexplicables de contarla, como el que descubre una pepita gigantesca y necesita compartir su alegría
y su riqueza. A veces tengo que contenerme pues a todo el mundo hablaría de ella. Desde hace tiempo vengo explicándolo a quien quiere oírme y finalmente puesto sobre el papel como remate a lo que enseño y aprendo.
No obstante, lo escrito aquí trata de resolver preguntas hechas previamente que comparto con la generalidad. De otro modo es humo. Sólo cuando se plantean dudas honestamente llegan las respuestas. La inquietud de cada cual pondrá sentido a su contenido. De una u otra forma vienen a repetir los; interrogantes eternos de: ¿Quién o qué soy? ¿Dónde estoy? y ¿Qué hago aquí? A las que debería añadir otra de mi propia cosecha ¿Qué puedo hacer para largarme?
Pueden parecer preguntas retóricas y lo son, pues todos nos las hacemos en los momentos dolorosos o cruciales de nuestras vidas. Pero eso no les resta importancia. Son las interrogantes constantes que acompañan al ser humano. Me gustaron las respuestas del Curso, las únicas que realmente me han calmado, con ellas me siento más tranquilo.
Hay dos sistemas de pensamientos nada más, aunque a veces puedan parecer muchos; uno que sostiene el mundo y otro que afirma su inexistencia. Por eso sólo puede realmente haber dos. El primero está sostenido por tantos “pilares” que puede despistamos de la verdad y de hecho eso es lo que hacen. Todos bien conocidos por nosotros, “vivimos” por su “consistencia”. Este trabajo trata de poner de manifiesto el segundo y los sólidos cimientos sobre los que descansa, si bien son perfectamente desconocidos, inútiles y prácticamente invisibles desde el mundo. Pero ahí están ambas opciones.
El Curso, que contiene referencias de cualquier cosa que podamos hablar desde aquí dice: Todo sistema de pensamiento tiene que tener un punto de partida. Empieza ya sea creando o fabricando, diferencia ésta a la que ya hemos hecho referencia. La semejanza entre ambas cosas reside en el poder que tienen como cimientos. Su diferencia, en lo que descansa sobre ellas. Ambas son piedras angulares de sistemas de creencias por las que uno rige su vida. Creer que un sistema de pensamiento basado en mentiras es débil es un error. Nada que un Hijo de Dios haya hecho carece de poder. Es esencial que te des cuenta de esto, pues, de lo contrario, no podrás escapar de la prisión que tú mismo has construido. (T— 3.VIL 1:1-8)
Hablaremos pues, de los dos puntos de partida; de la creación y de la fabricación con un contenido y significado totalmente novedoso. Presentaremos las bases sobre las que se sustentan y pondremos de manifiesto la consistencia total que tiene nuestro sistema de pensamiento elegido. La completa coherencia que presenta está basada únicamente en nuestra decisión de que así sea, por eso es tan eficaz y coherente, porque no deja de ser la voluntad de un Dios quien lo diseña, la voluntad del Hijo de Dios. No pasar esto jamás por alto.
Comencé a escribir por el capítulo de la creación, como el comienzo de la existencia y traté de trasladar al papel la maravilla del relato de esta experiencia inaudita hasta entonces para mí. Jamás me habían hablado de esta forma, nunca leí nada parecido. Y una vez que lo supe, lo vi tan consecuente que no podía comprender como antes nadie se había dado cuenta, o como yo mismo no había podido extractarla. Descubrir la naturaleza de la verdadera y única creación fue un placer extraordinario, un gozo inusual y un empujón a la cordura. Es la respuesta a lo que sentimos y no a lo que vemos.
Es la respuesta que no interesa al ser mental, que inquieta al habitante del mundo, pero calma al espiritual. Frente a la consistencia de esta exposición es muy difícil quedamos completamente al margen.
Después llegó la falsa creación o fabricación del mundo como explicación a lo que vemos, pero ahora expuesta desde su conexión con el Origen, no como una teoría suelta al uso de las que nos manejamos en el mundo, principalmente el Génesis bíblico o el Big-Ban de la ciencia que cito en el texto, sino como una segunda parte apócrifa. La fabricación del universo conocido y su mecanismo, la motivación que lo originó y la meta que persigue. De esta forma podemos comprender las claves de su “mal funcionamiento” a pesar de su “coherencia”. Del descontento en el que transcurre la vida y de la falta de esperanza que tenemos de mejorar nuestro estado por cuenta propia o ajena.