Prólogo
Este libro es fantástico, aunque tardé un tiempo en darme cuenta de hasta qué punto lo es. Supongo que me acerqué a él con un ligero prejuicio sobre los manuales de ejercicios en general, y también porque cuando oí hablar por primera vez de la gestación de este libro me dije: «¿Para qué queremos otro libro (y, por si fuera poco, un libro de ejercicios) sobre la terapia cognitiva basada en el mindfulness (TCBM)». Los autores ya habían contribuido notablemente a difundir dicha terapia entre los profesionales y el público en general. La TCBM era ya muy popular, gozaba de una gran aceptación y muchas personas se habían beneficiado de su práctica. ¿Qué es lo que faltaba, entonces? ¿Qué más podía decirse? ¿Cuántos materiales de apoyo más podían necesitar las personas? ¿Cuánta mayor claridad podían aportar los autores al tema, y cómo podían hacerlo de una manera alentadora? Pues sucede que la respuesta a todas estas inquietudes es: «Mucho».
Al leer este libro y al adentrarme en él durante un tiempo, pronto vi y sentí por qué no sólo es necesario, sino también espléndido e imprescindible. Da a la experiencia de la TCBM y a la práctica del mindfulness una nueva vida de una manera distinta, casi como si, de algún modo muy real, uno se convirtiera en un participante asiduo del programa, como si estuviera en clase, no sólo con el instructor sino también con todo un grupo de personas cuyas preocupaciones, preguntas y (una vez inmerso en la práctica de la meditación) experiencias sin duda se parecen mucho a las propias. De esta forma percibí las singulares virtudes y funciones de esta guía de ejercicios surgida de las expertas manos de sus autores. De hecho, faltaba algo en aquello que yo ya había dado por concluido.
Este libro funciona como un amigo, un psicólogo y una guía de confianza, hasta el punto en que un libro puede proporcionar todo esto. La obra le ofrece a usted, lector, la sensación de haber trabado amistad no tanto con los autores, sino con el proceso en sí, en la medida en que día a día y semana a semana se adentre en esta sencilla, aunque potencialmente profunda, experiencia liberadora de su propia mente y de su cuerpo mediante la práctica del mindfulness. Un programa que nos hace seguir un proceso que ilumina las formas en las que los viejos hábitos mentales pueden encarcelarnos con mucha facilidad, a pesar de que, en principio, nuestros pensamientos tengan la misión de que encontremos sentido a las cosas y de mejorar nuestra suerte.
Una de las características más atractivas y útiles de este libro es la presencia de viñetas que aparecen de manera recurrente, y que plantean las preguntas que nosotros mismos podríamos estar pensando o planteándonos, y que nos ofrecen las respuestas que podrían ayudarnos a ver las cosas de maneras distintas, de forma más amable y liberadora. Aquí aparecen las voces de las otras personas que participan, practicando al mismo tiempo que usted, planteando preguntas y relatando sus experiencias, del mismo modo que lo haría usted. Y aquí están las serenas, sumamente claras y tranquilizadoras respuestas del instructor a los diversos interrogantes e incertidumbres que se plantean cada día sobre cómo practicar, qué practicar, y si lo «estamos haciendo bien»: en otras palabras, si lo que usted está experimentando es válido. Y la voz serena y tranquilizadora está siempre ahí, recordándole una y otra vez que lo que usted experimenta es válido porque es su experiencia, y porque es consciente de ella.
Esto es lo más importante de aprender de la propia experiencia, de aprender a base de confiar en su propia experiencia cuando ésta se produce de manera consciente, de mirar más allá de los criterios normales de bueno y malo, de que algo le agrade o le desagrade, y encontrar nuevas maneras de relacionarse con algo que anteriormente hubiera podido sacarle de sus casillas, o causarle algún tipo de angustia, en una espiral descendente de interminables e inútiles rumiaciones y oscuridad. Practicar con asiduidad el programa que aquí se ofrece le enseñará a rememorar momentos cruciales de su vida con los demás, así como de su propia vida, y aunque se precisa cierta dosis de valor para hacer tal cosa, los beneficios de realizar este ejercicio son enormes. Le muestra con gran claridad y compasión que lo que usted antes hubiera podido considerar como su destino ha dejado de serlo y que nunca lo fue, y que, al igual que todos nosotros, tiene ante usted innumerables oportunidades para ejercitar sus capacidades de aprendizaje, de crecimiento y de curación una vez esté convencido de que ello es posible, y de ese modo transformar su vida; de que usted, al igual que todos nosotros, tiene infinitas oportunidades; para comprender que tiene posibilidades muy reales, en cada momento, en cuanto a cómo va a ser en relación a lo que se está desarrollando en su propia mente, en su propio cuerpo y en el mundo.
Sucede que este simple cambio de perspectiva momento a momento —especialmente en aquellos momentos duros, amenazadores o terribles— marca la diferencia. Puede hacer que usted recupere su vida, en toda su plenitud y belleza, y espero que así sea. Adentrarse en este libro y comprometerse de corazón con el programa que ofrece —y en el que todo lo que surja en su vida y en su mente se convierte en parte esencial de dicho programa— puede marcar la diferencia. Adopte esta nueva manera de ser tanto como pueda, en cada momento, y deje que sus acciones fluyan de su ser. Practique con constancia, practique con delicadeza y benevolencia. Está en buenas manos, incluyendo, muy especialmente, las suyas.
J ON K ABAT -Z INN
Lexington, Massachusetts
22 de abril de 2013
Agradecimientos
A lo largo de los años, muchas personas han contribuido generosamente al desarrollo, difusión y evaluación de la terapia cognitiva basada en el mindfulness (TCBM). Aquí expresamos nuestro reconocimiento y damos las gracias a aquellas personas que han contribuido específicamente al proceso de creación de este libro.
Desde su comienzo, este proyecto ha sido hábilmente dirigido y seguido por Kitty Moore, editora sénior de The Guilford Press. Hemos sido muy afortunados por haber podido disfrutar, una vez más, del talento creativo, la animosa sensibilidad y la sabia dirección editorial de Chris Benton. David Moore elaboró las claras y atractivas ilustraciones, respondiendo con presteza a cada cambio y matiz que le sugeríamos. La ayuda de estas personas ha sido muy valiosa y se la agradecemos profundamente.