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© 2017 por Grupo Nelson®
Publicado en Nashville, Tennessee, Estados Unidos de América.
Grupo Nelson es una subsidiaria que pertenece completamente a
Thomas Nelson.
Grupo Nelson es una marca registrada de Thomas Nelson.
www.gruponelson.com
Título en inglés: Jesus Always
© 2016 por Sarah Young
Publicado por Thomas Nelson
Todos los derechos reservados. Ninguna porción de este libro podrá ser reproducida, almacenada en algún sistema de recuperación, o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio —mecánicos, fotocopias, grabación u otro—, excepto por citas breves en revistas impresas, sin la autorización previa por escrito de la editorial.
A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas han sido tomadas de la Santa Biblia, Nueva Versión Internacional® NVI®. Copyright © 1999, 2015 por Biblica, Inc.® Texto usado con permiso de Biblica, Inc.® Reservados todos los derechos en todo el mundo.
Editora en Jefe: Graciela Lelli
Traducción: Eugenio Orellana
Adaptación del diseño al español: Grupo Nivel Uno, Inc.
ISBN: 978-0-71809-311-2
Epub Edition January 2017 ISBN 9780718093273
Impreso en Estados Unidos de América
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Dedico este libro a Jesús: mi Señor y mi Dios, mi Salvador y Amigo.
Llegaré entonces al altar de Dios, del Dios de mi alegría y mi deleite.
—SALMOS 43.4
Me has dado a conocer la senda de la vida; me llenarás de alegría en tu presencia, y de dicha eterna a tu derecha.
—SALMOS 16.11
Ustedes lo aman a pesar de no haberlo visto; y aunque no lo ven ahora, creen en él y se alegran con un gozo indescriptible y glorioso.
—1 PEDRO 1.8
Es una bendición para mí trabajar con un equipo tan talentoso: Jennifer Gott, mi directora del proyecto editorial, ha trabajado con denuedo en la producción de este libro, desempeñando una variedad de funciones de manera muy eficiente. Estoy agradecida con Kris Bearss, mi editor, que conoce mi trabajo maravillosamente bien y edita mis escritos con el toque exacto. Finalmente, siento gratitud hacia mi editora, Laura Minchew, quien tiene una gran abundancia de ideas creativas y además «pastorea» mis publicaciones.
Escribir Jesús siempre ha sido una verdadera maratón para mí. Lo empecé en septiembre de 2012 mientras todavía vivía en Perth, Australia. En el año 2013, mi esposo y yo volvimos a los Estados Unidos, un cambio realmente complicado al ir de un punto en el planeta a otro. A lo largo de medio año viví abriendo y cerrando maletas. Nos quedamos en siete hogares diferentes, yendo y viniendo entre uno y otro múltiples veces. No hace falta decirlo, pero durante estos seis meses no avancé mucho en el libro.
Cuando finalmente nos instalamos en nuestra casa permanente en Tennessee, me sentí feliz de poder retomar la escritura. Trabajar en Jesús siempre se convirtió en mi prioridad número uno: para terminar de escribir este libro decidí posponer una serie de actividades importantes. Fue un placer y un privilegio poder separar tiempo a fin de concentrarme en Jesús y su Palabra.
Jesús siempre ha sido concebido para acrecentar su gozo y fortalecer su relación con Jesús. Si usted le pertenece a él, su historia tiene un final indescriptiblemente feliz, sea cual fuere la situación que esté viviendo en este momento. Y el solo hecho de saber que su historia finaliza tan maravillosamente bien puede llenar de gozo su presente. Si no conoce aun a Cristo como su Salvador, le aseguro que estoy orando por usted cada día para que le pida que perdone sus pecados y le conceda el glorioso regalo de la vida eterna. Entonces podrá también experimentar el asombroso gozo de ser el amigo amado de Jesús.
Durante muchos años, desde agosto de 2001, he tenido que luchar con la enfermedad. En mi búsqueda de salud he visitado a numerosos doctores y recurrido a una variedad de tratamientos médicos. Sigo teniendo serias limitaciones en mi vida, pero he encontrado el gozo para seguir viviendo.
Mi incapacidad de estarme moviendo de un lado al otro me ha dado más tiempo para enfocarme en Jesús y disfrutar de su Presencia. También me ha provisto de oportunidades para pasar tiempo con amigos queridos y conocidos. Ya no manejo debido al vértigo crónico que padezco desde 2008. Como resultado, amigos de buen corazón me han llevado a varios lugares, quedándose a menudo conmigo durante largas horas de espera en las consultas médicas. Pasar tiempo con esta gente extraordinaria ha sido una fuente de mucha alegría para mí.
Llevar una vida de quietud me ha ayudado a buscar y encontrar pequeños tesoros que le dan brillo a mi día: un cardenal o una urraca azul en vuelo, una «coincidencia» que me recuerda que Dios está obrando aun en los detalles de mi vida. Trato de dedicar un tiempo cada día para escribir en mi cuaderno algo de las recientes bendiciones que he recibido. Lo llamo mi «Libro de gratitud». Observar las cosas buenas y agradecerle a Dios por ellas me anima y cambia mi perspectiva, ayudándome a ver mi vida a través de un prisma de gratitud.
Me encanta la historia de aquel minero anciano y débil cuyo cuerpo se había desgastado por sus muchos años de duro trabajo en las minas. En su humilde hogar había una mesa con un pequeño pocillo lleno de avena. En su mano tiznada de carbón sostenía un pedazo de pan y se aprestaba a servirse su pobre desayuno. Sin embargo, primero se arrodilló junto a la mesa y alegremente exclamó una y otra vez: «¡Todo esto, y también Jesús! ¡Todo esto, y también Jesús!».
Esta historia me inspira y ayuda a entender la hermosa verdad de que tener a Jesús en mi vida significa que estoy siendo bendecida más allá de mi fe. Estoy convencida de que la gratitud es uno de los ingredientes más importantes de un corazón gozoso.
Me gusta cantar por las mañanas esta canción breve y sencilla: «Este es el día que el Señor ha hecho. Regocijémonos y alegrémonos en él». Eso me ayuda a ver el día como un regalo precioso de Dios y a recordar que hasta cada aliento que respiro proviene de él.
El subtítulo de Jesús siempre es Abrace el gozo en su presencia. Abrazamos el Gozo al abrazar a Jesús: al amarlo, confiar en él, estar en comunicación con él. Podemos optar por vivir de esta manera aun en los tiempos más difíciles. En realidad, mientras más duras resulten nuestras circunstancias, más brillante será nuestro Gozo, en vívido contraste con el oscuro telón de fondo de la adversidad. De esta manera hacemos la Luz de la Presencia de Jesús visible a las personas que nos rodean.
Considero a la Biblia un tesoro apreciable; es la única Palabra de Dios inspirada, inerrante e incambiable. Me gozo leyéndola, meditando en la profundidad de las riquezas de la sabiduría y el conocimiento de Dios. Durante los últimos cinco años, memorizar las Escrituras se ha convertido en algo cada vez más precioso para mí. ¡Es muy consolador tener la Palabra de Dios en mi corazón todo el tiempo, guiándome y alentándome día y noche!