CONTENIDO
Guide
• Vive al máximo.
• Progresa.
• Da más de lo que se necesita.
• Simplifícate.
• Vive con pasión.
• Excede tus limitaciones.
• Vive la verdad.
• Sé fuerte.
• Desarrolla el coraje.
• Sé resiliente.
• Innóvate siempre.
• Enfócate en ser mejor cada día.
• Lidera.
• Sé humilde en el corazón.
• Inspira a otros con tus acciones.
• Piensa en grande.
• Actúa.
• Vive tu verdad.
• Cambia el mundo.
• Crea alegría en tu vida.
V icente Passariello lleva más de 15 años siendo considerado uno de los mejores coaches motivacionales en el mundo latino en Estados Unidos. Su preparación como Licensed Trainer en Programación Neurolingüística, DHE Diseño Ingeniería Humana y PE Ingeniería de la Persuasión acreditado por el Dr. Richard Bandler (cocreador PLN), le han llevado a preparar a cientos de personas en Estados Unidos y Latinoamérica. Passariello forma parte activa del equipo de Anthony Robbins y es la voz en su producto digital Unlimited Get the Edge de Tony Robbins. Ha viajado en múltiples ocasiones con la organización de Robbins en diferentes ciudades de Estados Unidos y el exterior.
Passariello ha dictado seminarios en Caracas, Barquisimeto, Miami, Weston, Bogotá, Nueva York y Perú sobre motivación, ventas, telemercadeo, atención al cliente y motivación en diferentes empresas. Mensualmente dicta charlas a grupos para mejorar sus vidas, así como se especializa en el «asesoramiento personal» o Coaching.
Emprendedor y escritor exitoso, ha realizado asesorías a empresarios latinos radicados en Miami, Orlando y otros estados. Es autor de 365 afirmaciones para tu poder interior.
Vicente Passariello es también creador, productor ejecutivo y locutor del exitoso programa Cápsulas del Éxito, transmitido en Miami a través de Actualidad Radio desde hace ocho años todos los domingos. Fue colaborador de CNN en Español, en el Programa Noti-Mujer y escritor en la revista Conexiones. Actualmente colabora en el periódico Doral Times y la revista Avior Air y ha sido experto invitado en Despierta América de Univisión.
S í, leíste bien, capítulo cero, porque esta es la base de todo el libro, así como también de cualquier cosa que quieras conseguir en tu vida. Superas tus retos y logras lo que quieres empezar, terminar o crear (ya sea algo que te guste o no) por medio de tu poder interior. ¿Qué es lo más importante que viene a tu mente cuando mencionas esas palabras? Tal vez pensemos que el poder interior es la fortaleza interna para vencer los malos hábitos o las tentaciones, como sucede al rechazar un cigarro o un dulce si estás en búsqueda de bajar de peso, o renunciar a tus impulsos inmediatos. Podríamos pensar que se trata de tener disciplina. ¿Qué es realmente la disciplina? Según la descripción del diccionario, la palabra disciplina se deriva del latín discipulus, que significa discípulo, alguien que recibe una enseñanza de otro. La disciplina está definida como la manera ordenada y sistemática de hacer las cosas, siguiendo un conjunto de reglas y normas estrictas que por lo general rigen una actividad o a una organización.
Se entiende como la labor que ejerce una persona para enseñar o adquirir buenos hábitos, abarcando todas aquellas reglas de comportamiento que elabora y las medidas que ocupa para cerciorarse de que dichas reglas se cumplan.
Esta explicación está muy buena, pero al final no me dice nada que pueda transformar mi vida, ni cómo ejercer la disciplina. Número uno, tú no necesitas a nadie para disciplinarte, aunque es muy importante que tengas apoyo a tu alrededor para hacer realidad tus sueños, pues todas las afirmaciones que hagas sin disciplina se convertirán solo en desilusiones. Número dos, la disciplina se basa (según mi opinión) en objetivos, no en pensamientos o emociones, ¿Que quiero decir con esto? Que la persona disciplinada no es aquella que tiene fuerza de voluntad, la persona disciplinada es la que se aferra a un plan previamente diseñado y lo cumple; sigue un comando, una orden o una instrucción. Cuando digo que aquí no influye la fuerza de voluntad, me refiero al hecho de que, si algo te gusta mucho, simplemente lo haces y punto. ¿Te cuesta mucho levantarte a las seis de la mañana? ¿Haz intentado varias formas de lograrlo sin resultados positivos? Sin embargo, solo hace falta que la «razón» por la cual te levantas a las seis de la mañana sea ir a la playa a disfrutar de tu primera salida con una persona maravillosa que te gusta, para que no sea necesaria ni la fuerza de voluntad ni nada. ¡Y tu disciplina se transformará en poder al conseguir la meta estipulada!
Las razones vienen primero y después vienen las respuestas. Lo único que realmente tienes que hacer para lograr todo lo que quieras en tu vida y disciplinarte es buscar razones lo suficientemente fuertes para conseguirlo. No se trata de la famosa lista de cosas por hacer, sino de orientar tus pasos hacia la meta claramente especificada sin que la mente ni las emociones interfieran, solo habiendo una razón lo suficientemente fuerte como para actuar. Ahora viene la pregunta del millón de dólares: ¿Y qué hago si lo que tengo que hacer no es lo que me gusta ni lo que deseo hacer, aunque sé que le haría bien a mi vida?
Tony Robbins habla de que hay cuatro clases de experiencias en la vida:
Primera clase: Experiencias agradables que hacen bien a mi vida y a los demás.
Este tipo de experiencias son las que nos hacen sentir muy bien y son buenas para tu vida y los demás. Es como estar en el cielo, ya que lo que experimentas te hace sentir alegría, júbilo, y además beneficia tu vida. ¡Buen trabajo!
Segunda clase: Experiencias no tan agradables, pero que generan un extraordinario bien.
Son esas experiencias en las que la disciplina entra en acción, donde tienes un enfoque claro y aunque requieran esfuerzo, lo haces de todos modos. En ellas salimos de nuestra zona de confort para lograr algo mejor, a pesar de que impliquen «caminar la milla extra». Aquí la corteza frontal del cerebro o lo que yo llamo el Cerebro Ejecutivo o CEO se encuentra en su máximo potencial. (Hablaremos de esto con detalles más adelante.)
Tercera clase: Experiencias que se sienten agradables, pero que no son buenas para tu vida.
Aquí se incluyen todas las versiones de lo que llamamos «darse un gustico». Muchas veces esta categoría abarca los excesos.
Cuarta clase: Experiencias que no se sienten bien y no son buenas para tu vida ni la de los demás. Te pregunto algo si te encuentras aquí. ¿Se trata de masoquismo o de viejos hábitos? Más adelante hablaré de los hábitos en un capítulo que resultará muy interesante, y como yo lo hice, aprenderás cosas que te dejarán sorprendido.
Creo que lo importante para extraerle el sumo a la vida es lograr convertir las experiencias de segunda clase en primera clase. Cuando no nos gusta hacer algo, pero sabemos que nos proporcionará un bien a corto o largo plazo para nuestra vida y los demás, ponemos en acción la autodisciplina, establecemos una meta clara, hacemos lo que tenemos que hacer... y punto. No se relaciona con tu mente, tus emociones o el ambiente, sino con tu decisión y un programa que llevar a cabo. Enfocas tu mente en hacer algo.
Recuerdo una experiencia que tuve con una de mis hijas, Samantha. Estábamos en el médico esperando que llegara la enfermera para que le pusiera a mi hija una vacuna y extrajera un tubo de sangre. Lo recuerdo como si fuera ayer, me acuerdo de la expresión en la cara de mi hija, que indicaba miedo y también el deber de hacerlo. Cuando llegó la enfermera y ella vio que era inevitable, empezó a temblar, así que le dije: «Hija el coraje de Mérida en
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