Pedro Lomba - Antología de textos libertinos franceses del siglo XVII

Durante los primeros años veinte del siglo XVII suena con fuerza en Francia una terrible e indignada voz de alarma: la corte de París se encuentra infestada desde finales del siglo anterior de toda suerte de blasfemos, licenciosos y ateístas. Todos ellos quedan rápidamente agrupados bajo la categoría de libertinos, término peyorativo con el que son designados quienes que consagran sus energías intelectuales a un riguroso cuestionamiento del universo religioso, político y ético —intensamente cristiano— que determina el normal transcurrir del siglo.

Con el libertinismo erudito, movimiento filosófico de pleno derecho cuyo estudio se ha revelado esencial para comprender los grandes envites del XVII, cobra carta de naturaleza una razón crítica que somete a su imperio todos los dominios del pensamiento, especialmente la teología, la moral y la filosofía recibidas, y que rechaza toda regla exterior y todo principio de autoridad, propugnando una libertad filosófica sin trabas de ningún tipo, especialmente religioso.

Pedro Lomba & François Garasse & Pierre Charron & Gabriel Naudé & François de La Mothe-Le-Vayer & Anónimo & Saint-Évremond & Pierre Bayle

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Titivillus 27.04.16

Título original: Antología de textos libertinos franceses del siglo XVII

Pedro Lomba & François Garasse & Pierre Charron & Gabriel Naudé & François de La Mothe-Le-Vayer & Anónimo & Saint-Évremond & Pierre Bayle, 2009

Traducción: Pedro Lomba

Editor digital: Titivillus

Aporte original: Spleen

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PEDRO LOMBA FALCÓN es doctor en Filosofía con premio extraordinario, es investigador y traductor. Ha realizado su labor investigadora en Madrid (Universidad Complutense, UNED) y Francia (Escuela Normal Superior-LSH), donde es miembro del equipo que dirige Pierre-François Moreau (CNRS, UMR-5037). Actualmente trabaja sobre las relaciones entre el libertinismo erudito y la gran filosofía sistemática del siglo XVII, así como en la edición crítica de algunos textos fundamentales en la constitución del spinozismo del XVIII.

FRANÇOIS GARASSE (Angoulême, 1585 - Poitiers, 1631, Francia). Era un jesuita temido en todo el ámbito literario.

Su padre conspiró contra el duque de Epernon , gobernador de Angouleme , y murió en la puerta del castillo, mientras trataba de entrar. En 1601 Garasse entró en la Compañía de Jesús: solicitó y obtuvo permiso de sus superiores para participar en la predicación. Puso toda su energía para luchar contra la herejía y el libertinaje . Fue negado por muchos de sus compañeros. Su elocuencia, sin embargo virulenta, sirvió a la orden durante su trifulca con la Universidad de París, entre la lealtad romana de los jesuitas y el Galicanismo de la Sorbona.

GABRIEL NAUDÉ, (1600-1653 Abbeville, Francia). Fue un bibliotecario francés.

Trabajó para el Cardenal de Bagni y para Francesco Barberini en Roma, más tarde trabajó para el Cardenal Mazarino y creó una biblioteca que fue la base para la actual Biblioteca Mazarino. Recorriendo Europa durante diez años, ayudó a Mazarino comprando más de 40 000 volúmenes entre los que se encuentra una formidable colección de manuscritos. Naudé es célebre por haber redactado un Advis pour dresser une bibliotèque, que es el primer manual de biblioteconomía francés y mundial. En él, propuso una serie de innovaciones en las bibliotecas que tendrían una gran repercusión posterior.

FRANÇOIS DE LA MOTHE-LE-VAYER (París, 1 de agosto de 1588 - íd., 9 de mayo de 1672). También conocido por el pseudónimo póstumo de «Orosius Tubero» fue un escritor y pensador «libertino» o «pirrónico» (escéptico, en el lenguaje de la época) francés, miembro junto a sus amigos Pierre Gassendi, Élie Diodati y Gabriel Naudé de la llamada Tétrada libertina de los eruditos. Fue miembro de la Academia francesa (1639) y tutor de Luis XIV.

Le-Vayer nació y murió en París y fue miembro de una noble familia de Maine. Su padre fue abogado en y sustituto del Procurador General en el Parlamento de París, autor de una curioso tratado sobre las funciones de los embajadores titulado Legatus, seu De legatorum privilegiis, officio et munere libellus (1579), ilustrado con amplias lecturas de historiadores clásicos. François le sucedió en el cargo; pero como este cometido lo aburría, renunció alrededor de 1647 y se dedicó a viajar y a las bellas letras. Fue tutor y preceptor del Duque de Orleáns, hermano de Luis XIV, y, posteriormente, del mismo Delfín.

CHARLES MARGUETEL DE SAINT-DENIS, señor de Saint Évremond (Saint Denis-le-Guast, cerca de Coutances, 1 de abril de 1613 - Londres, 29 de septiembre de 1703) fue un político y escritor libertino francés.

Saint Évremond nace en el seno de una familia noble de la baja Normandía. Fue un niño de una rara precocidad intelectual. Estudia filosofía y derecho hasta los catorce años, edad en la que ingresa en la Academia Militar. Con el ejército francés participa en las batallas de Arrás, Rocroi, Friburgo y Nördlingen, y conoce a muchas figuras ilustres, como Luis II de Borbón-Condé. Durante la guerra de la Fronda, es leal al poder real, lo que le supone el reconocimiento de Mazarino y el distanciamiento de Condé. En 1661, un escándalo a raíz de su texto satírico sobre la Paz de los Pirineos le obliga al exilio en Inglaterra y Holanda, donde lleva una vida mundana a la vez que frecuenta a filósofos como Hobbes y Spinoza y mantiene una relación amorosa con la duquesa de Mazarino. Como supremo honor, se le enterró en la abadía de Westminster.

PIERRE BAYLE (Carla-le-Comte, hoy llamado Carla-Bayle, 18 de noviembre de 1647 - Róterdam, 28 de diciembre de 1706) fue un filósofo y escritor francés. Junto con Bernard le Bovier de Fontenelle, 10 años más joven que Bayle, es considerado la gran figura de la primera Ilustración.

Nacido en Carla-le-Comte, cerca de Pamiers (Ariège), fue educado por su padre (un pastor hugonote) y en una academia de Puylaurens (Departamento de Tarn). En 1669 ingresó en un colegio de jesuitas deToulouse, y se hizo católico un mes después. Diecisiete meses después se arrepintió y regresó al calvinismo pero, para evitar la persecución, huyó a Ginebra, donde descubrió la obra de René Descartes.

Durante algunos años actuó bajo el seudónimo de Bèle como institutor en varias familias de París, y en 1675 fue nombrado catedrático de Filosofía en la Universidad Protestante de Sedan, en Lorena, que en la época todavía formaba parte de Alemania.

En 1681 la universidad fue cerrada por el Estado francés, que aumentó la presión sobre los protestantes. Bayle se refugió en los Países Bajos, como muchos otros intelectuales protestantes franceses, y casi inmediatamente después fue nombrado profesor de Filosofía e Historia en la École Illustre de Rotterdam, que acababa de inaugurarse.

Aquí, publicó en 1682 Lettre sur la comète de 1680 que publicaría de nuevo ampliado en 1683 con el título de Pensées diverses sur la comète de 1680. El cometa mencionado es el Halley y lo emplea como excusa para criticar las supersticiones asociadas con los cometas. Afirma que el conocimiento debe ser constantemente comprobado. En la segunda revisión sienta las bases de una moral o ética no dependientes de la religión, en la que defiende la tesis —impensable en la época— de que un ateo no tiene por qué ser inmoral y vicioso. También publicó sus críticas al trabajo de Louis Maimbourg sobre la historia del calvinismo. La gran reputación adquirida por esta crítica fomentó la envidia del compañero de Bayle, Pierre Jurieu, que había escrito un libro sobre el mismo asunto.