• Quejarse

Eagleton Terry - Esperanza sin optimismo

Aquí puedes leer online Eagleton Terry - Esperanza sin optimismo texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Ciudad: Barcelona;Taurus, Año: 2019;2015, Editor: Penguin Random House Grupo Editorial España, Género: Historia. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

Eagleton Terry Esperanza sin optimismo

Esperanza sin optimismo: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Esperanza sin optimismo" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

Taurus

Eagleton Terry: otros libros del autor


¿Quién escribió Esperanza sin optimismo? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

Esperanza sin optimismo — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Esperanza sin optimismo " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer
Esperanza sin optimismo - image 1
Esperanza sin optimismo - image 2

SÍGUENOS EN
Esperanza sin optimismo - image 3

Esperanza sin optimismo - image 4 @Ebooks
Esperanza sin optimismo - image 5 @megustaleer
Esperanza sin optimismo - image 6 @megustaleer

Para Nicholas Lash No somos optimistas no presentamos una visión agradable - photo 7

Para Nicholas Lash

No somos optimistas; no presentamos una visión agradable del mundo con la que todos puedan entusiasmarse. Allá donde nos encontremos no tenemos más que una pequeña tarea concreta, estar del lado de la justicia, con los pobres.

H ERBERT M C C ABE , O. P.

P RÓLOGO A lguien como yo para quien la proverbial botella no solo está - photo 8

P RÓLOGO

A lguien como yo, para quien la proverbial botella no solo está medio vacía sino que casi con seguridad contiene un líquido potencialmente letal y de sabor repugnante, quizá no sea el autor más apropiado para escribir sobre la esperanza. Están aquellos cuya filosofía es «come, bebe y alégrate, porque mañana moriremos» y aquellos, con los que siento más afinidad, cuya filosofía es «mañana moriremos». Una razón por la que he elegido escribir sobre este tema a pesar de esa angustiosa propensión es que ha sido curiosamente ignorado en una época que, en palabras de Raymond Williams, nos pone ante «el sentimiento de pérdida de un futuro» . Es posible que otra razón para evitar el tema sea el hecho de que quienes se aventuran a hablar de él están abocados a la insignificancia a la sombra de la monumental obra de Ernst Bloch El principio esperanza , que trataré en el capítulo 3. Tal vez no sea el texto más admirable en los anales del marxismo occidental, pero es, con diferencia, el más largo.

Se ha afirmado que los filósofos prácticamente han abandonado la esperanza. Un rápido vistazo al catálogo de cualquier biblioteca sugiere que han dejado vergonzosamente el tema a libros con títulos como Medio llena: cuarenta estimulantes historias de optimismo, esperanza y fe; Un poco de fe, esperanza y alegría , y (mi favorito) Los años de la esperanza: Cambridge, la administración colonial en los mares del Sur y el cricket , por no mencionar las numerosas biografías de Bob Hope. Es una cuestión que parece atraer a todos los moralistas ingenuos y animadores espirituales del planeta. Así que no parece fuera de lugar una reflexión sobre el tema de alguien como yo, que no tiene un pasado en el cricket ni en la administración colonial, pero que está interesado en las implicaciones políticas, filosóficas y teológicas de la idea.

Este libro tiene su origen en las Page-Barbour Lectures que pronuncié en 2014 a invitación de la Universidad de Virginia. Estoy profundamente agradecido a todos aquellos que en Charlottesville me hicieron sentir bien recibido durante mi estancia allí, y especialmente a Jenny Geddes. Quiero expresar aquí mi especial gratitud a Chad Wellmon, que organizó mi visita con la mayor eficiencia y fue un anfitrión extraordinariamente amable y atento.

1 L A BANALIDAD DEL OPTIMISMO P uede haber muchas buenas razones para creer - photo 9

1. L A BANALIDAD DEL OPTIMISMO

P uede haber muchas buenas razones para creer que una situación va a acabar bien, pero esperar que ocurra así porque eres optimista no es una de ellas. Sería igual de irracional creer que todo saldrá bien porque eres albanés o porque ha estado lloviendo durante tres días seguidos. Si no hay una buena razón para que las cosas resulten satisfactoriamente, tampoco la hay para que no acaben mal, por lo que la confianza del optimista es infundada. Se puede ser un optimista pragmático, en el sentido de estar seguro de que este problema, y no otro, se va a resolver; pero también está aquel al que cabría describir como optimista impenitente o profesional, que se siente confiado sobre determinadas situaciones porque tiende a sentirse confiado en general. Encontrará el pendiente que ha perdido o heredará una mansión jacobina porque la vida en conjunto no es tan mala. De esta forma corre el peligro de desvalorizar su esperanza. De hecho, en cierto sentido, el optimismo está más relacionado con la confianza que con la esperanza. Se basa en la opinión de que las cosas tienden a salir bien, no en el exigente compromiso que entraña la esperanza. Henry James se explayó sobre el tema tanto en conversaciones como en sus obras. «En cuanto a las aberraciones del optimista superficial —escribe en El arte de la novela —, el campo (sobre todo el de la novela inglesa) está sembrado de sus minúsculas partículas, como de cristal roto» .

El optimismo como actitud general se alimenta a sí mismo . Reconocer la tozudez de la realidad es, en opinión de Erikson, vital para la formación del ego, pero es precisamente esto lo que le resulta tan difícil al optimista crónico o profesional.

Un optimista no es solo alguien que abriga grandes esperanzas. Incluso un pesimista puede sentir confianza sobre una cuestión determinada, con independencia de su melancolía habitual. Es posible tener esperanza sin el sentimiento de que las cosas en general van a salir bien. Un optimista es más bien alguien con una actitud risueña ante la vida simplemente porque es optimista. Prevé que las cosas van a resultar de forma favorable porque él es así. Como tal, no se da cuenta de que hay que tener razones para estar feliz . Por tanto, el optimismo profesional no es una virtud, como tampoco lo es tener pecas o pies planos. Simplemente es una peculiaridad del temperamento. «Mira siempre el lado bueno de las cosas» tiene tanta racionalidad como «hazte siempre la raya del pelo en medio» o «quítate el sombrero respetuosamente ante un lebrel irlandés».

La consabida imagen de la botella que está medio llena o medio vacía dependiendo de la perspectiva de cada uno es instructiva a este respecto. Dicha imagen delata el hecho de que no hay nada en la situación misma que determine cómo respondemos a ella. No pone en entredicho nuestros prejuicios. Objetivamente, no hay nada en juego. Veremos la misma cantidad de líquido tanto si somos despreocupados como si tendemos a la melancolía. Así pues, cómo vemos la botella es puramente arbitrario. Y, desde luego, es dudoso que un juicio puramente arbitrario pueda considerase un juicio.

Desde luego, no es posible discutir sobre esta cuestión, igual que para las formas epistemológicamente más ingenuas de posmodernismo no es posible discutir sobre las creencias. El hecho es que usted ve el mundo a su manera y yo a la mía, y no existe un terreno neutral en el que estos dos puntos de vista puedan confrontarse. Como incluso dicho terreno sería interpretado de forma diferente por los puntos de vista en cuestión, no sería neutral en absoluto. Ninguna de las dos posturas puede ser rechazada empíricamente, puesto que cada una interpretará los hechos de una manera que confirme su propia validez. Análogamente, tanto el optimismo como el pesimismo son formas de fatalismo. Uno no puede evitar ser optimista, lo mismo que no puede evitar medir un metro sesenta. Está encadenado a su jovialidad como el esclavo a su remo, una perspectiva nada halagüeña. Como en el caso del relativismo epistemológico, realmente solo cabe que las dos partes respeten sus respectivas opiniones con una tolerancia un tanto estéril. No hay argumentos racionales para decidir entre estas posturas, de la misma forma que, según una determinada corriente del relativismo moral, tampoco hay argumentos racionales para decidir entre invitar a tus amigos a cenar o colgarles boca abajo de una viga mientras les vacías los bolsillos. Por el contrario, la esperanza auténtica debe estar basada en razones. En esto se parece al amor, del que desde una perspectiva teológica es un modo específico. Debe ser capaz de seleccionar las características de una situación que la hacen creíble. De lo contrario, no es más que un presentimiento, como si estuviéramos convencidos de que hay un pulpo debajo de nuestra cama. La esperanza debe ser falible, mientras que la alegría temperamental no lo es.

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «Esperanza sin optimismo»

Mira libros similares a Esperanza sin optimismo. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «Esperanza sin optimismo»

Discusión, reseñas del libro Esperanza sin optimismo y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.