Traducción de María Celina Rojas
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Título original: Leah On the Offbeat
Editor original: Balzer + Bray – An Imprint of HarperCollins Publishers, New York
Traducción: María Celina Rojas
1.ª edición: Agosto 2018
Todos los nombres, personajes, lugares y acontecimientos de esta novela son producto de la imaginación de la autora o son empleados como entes de ficción. Cualquier semejanza con personas vivas o fallecidas es mera coincidencia.
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Copyright © 2018 by Becky Albertalli
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© de la traducción 2018 by María Celina Rojas
© 2018 by Ediciones Urano, S.A.U.
Plaza de los Reyes Magos 8, piso 1.º C y D – 28007 Madrid
www.mundopuck.com
ISBN: 978-84-17312-56-5
Fotocomposición: Ediciones Urano, S.A.U.
Para los lectores que sabían que sucedía algo, aun cuando yo no lo sabía.
No quiero ser dramática, pero Dios me libre de que Morgan elija nuestro repertorio. Esa chica es como un padre de las afueras sufriendo una crisis de la mediana edad en el cuerpo de una estudiante de último año de bachiller.
Un ejemplo claro: está arrodillada en el suelo, utilizando la banqueta del teclado como mesa, y cada título de su lista es una canción mediocre de rock clásico. Soy una persona muy tolerante, pero como estadounidense, música y ser humano con amor propio, es tanto mi deber como mi privilegio impedir esta mierda.
Me inclino hacia adelante en mi banqueta para espiarla por encima de su hombro.
—Bon Jovi, no. Journey, no.
—¿Qué? ¿En serio? —dice Morgan—. A la gente le encanta Don’t Stop Believin’ .
—A la gente le encanta la metanfetamina. ¿Deberíamos empezar a consumirla?
Anna enarca las cejas.
—Leah, ¿acabas de…?
—¿Comparar Don’t Stop Believin’ con la metanfetamina? —Me encojo de hombros—. Bueno, sí. Sí, lo he hecho.
Anna y Morgan intercambian una Mirada con mayúscula. Es una Mirada que dice allá vamos, no vamos a dejarlo pasar.
—Solo lo digo. La canción es un desastre. La letra es una mierda. —Le doy un golpecito al tambor para marcar el énfasis.
—A mí me gusta la letra —dice Anna—. Es esperanzadora.
—No se trata de si es esperanzadora o no. Es la inverosimilitud total de un tren de medianoche yendo, entre comillas «a ningún lado».
Intercambian otra Mirada, esta vez acompañada por un leve encogimiento de hombros.
Traducción: buen punto .
Traducción de la traducción: Leah Catherine Burke es un verdadero genio, y nunca jamás deberíamos dudar de su gusto musical.
—Supongo que no deberíamos añadir nada nuevo hasta que Taylor y Nora regresen —concede Morgan. Y tiene razón. Los ensayos musicales del instituto han mantenido fuera de circulación a Taylor y Nora desde enero. Y aunque las demás nos hemos estado reuniendo algunas veces a la semana, apesta ensayar sin la cantante ni la guitarrista principal.
—Está bien —dice Anna—. Entonces, ¿terminamos?
—¿Con el ensayo?
Bueno. Supongo que debería haber cerrado la boca con respecto a Journey. Es decir, lo entiendo. Soy blanca. Se supone que debo amar el rock clásico de mierda. Pero, en cierta forma, pensé que estábamos disfrutando de este debate animado sobre la música y la metanfetamina. Sin embargo, quizás se desvió en algún punto, porque ahora Morgan está guardando el teclado y Anna le está enviando un mensaje de texto a su madre para que la pase a buscar. Supongo que hemos terminado.
Mi madre no llegará hasta dentro de veinte minutos, así que me quedo en la sala de música incluso después de que ellas se hayan ido. En realidad no me importa. Es agradable tocar la batería en soledad. Dejo que mis baquetas tomen la delantera, desde el bombo hasta el tambor, una y otra vez. Algunos golpes a los toms. Unos chhh-chhh-chhh en los platillos, y luego el crash .
Crash.
Crash.
Y otro más.
Ni siquiera escucho el zumbido del teléfono hasta que llega el correo de voz. Por supuesto, es mi madre. Siempre llama, los mensajes de texto son el último recurso. Uno pensaría que tiene cincuenta o un millón de años, pero tiene treinta y cinco. Yo tengo dieciocho. Adelante, haced la cuenta. Básicamente soy la versión local, gorda y de Slytherin de Rory Gilmore.
No escucho el correo de voz porque mi madre siempre me envía un mensaje de texto luego, y tal como decía, un minuto más tarde:
Lo siento mucho, cariño. Estoy atascada aquí… ¿ puedes coger el autobús hoy?
Claro , respondo.
Eres la mejor .
El jefe de mi madre es un abogado robot imbatible adicto al trabajo, así que esto sucede muy a menudo. O es esto, o está en una cita. Ni siquiera es gracioso tener una madre que tiene más acción que yo. Ahora mismo, está quedando con un tipo llamado Wells. Como el plural de well , en inglés, bien , ¿sabes? Es calvo y rico, tiene las orejas pequeñas y creo que tiene casi cincuenta. Lo vi solo una vez durante treinta minutos: hizo seis chistes y dijo «ay, recórcholis» dos veces.
En fin, solía tener coche, así que no importaba tanto si llegaba a casa antes que mi madre, porque entraba por el garaje. Pero el coche de ella murió el verano pasado, así que mi coche se convirtió en su coche, lo que significa que tengo que regresar a casa con treinta y cinco estudiantes de primero. No es que esté resentida.
Se supone que debemos estar fuera de la sala de música a las cinco, así que desmonto la batería y la guardo en el almacén para instrumentos, pieza por pieza. Soy la única que utiliza un instrumento del instituto. Todos los demás tocan sus propios instrumentos en los sótanos terminados de sus mansiones privadas. Mi amigo Nick tiene una batería electrónica personalizada Yamaha DTX45K, y ni siquiera sabe tocar la batería . Nunca podría pagar eso, ni en mil millones de años. Pero así es Shady Creek.
El último autobús no sale hasta dentro de media hora, así que supongo que me convertiré en una groupie de teatro. A nadie le importa si entro en medio del ensayo, aunque la obra se estrene el viernes. En verdad, irrumpo en los ensayos con tanta frecuencia que creo que la gente se olvida de que no estoy en la obra. La mayoría de mis amigos sí lo está, incluso Nick, que hasta esto, nunca había hecho una audición para nada en su vida. Estoy segura de que solo lo hizo para pasar tiempo con su novia, adorable hasta las náuseas. Pero dado que él es una verdadera leyenda, ha logrado conseguir el papel principal.