Christian - Me llamo Hokusai
Aquí puedes leer online Christian - Me llamo Hokusai texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 2015, Editor: Fondo de Cultura Económica, Género: Niños. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:
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Me llamo Hokusai: resumen, descripción y anotación
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Me llamo Hokusai — leer online gratis el libro completo
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CHRISTIAN PEÑA
Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes 2014
POESÍA
Primera edición, 2014
Primera edición electrónica, 2015
Diseño de la colección: León Muñoz Santini
D. R. © 2014, Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura
Av. Paseo de la Reforma y Campo Marte s/n, Col. Polanco Chapultepec,
Del. Miguel Hidalgo; 11560 México, D. F.
D. R. © 2014, Instituto Cultural de Aguascalientes ( ICA )
Venustiano Carranza, 101; 20000 Aguascalientes, Ags.
D. R. © 2014, Fondo de Cultura Económica
Carretera Picacho-Ajusco, 227; 14738 México, D. F.
Empresa certificada ISO 9001:2008
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Tel. (55) 5227-4672
Se prohíbe la reproducción total o parcial de esta obra, sea cual fuere el medio. Todos los contenidos que se incluyen tales como características tipográficas y de diagramación, textos, gráficos, logotipos, iconos, imágenes, etc. son propiedad exclusiva del Fondo de Cultura Económica y están protegidos por las leyes mexicana e internacionales del copyright o derecho de autor.
ISBN 978-607-16-3159-6 (ePub)
Hecho en México - Made in Mexico
El jurado del Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes 2014, integrado por Javier Acosta, Jorge Humberto Chávez y José Luis Rivas, por unanimidad, decidió entregar el premio al trabajo titulado Me llamo Hokusai, firmado bajo el pseudónimo Ro, por ser una obra sólidamente estructurada en su conjunto, que ostenta un alto dominio de la expresión literaria tanto en la prosa poética como en el verso, así como una notable experimentación formal.
Christian Peña (Ciudad de México, 1985). A su corta edad ha merecido varios reconocimientos; además del Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes 2014, por Me llamo Hokusai , ha recibido el Premio Nacional de Poesía Efraín Huerta 2013, por Veladora ; el Premio Nacional de Poesía Enriqueta Ochoa 2012, por El amor loco & the advertising; el Premio Nacional de Poesía Ramón López Velarde 2011, por Heracles, 12 trabajos ; el Premio Nacional Clemencia Isaura 2011, por Libro de pesadillas ; el Premio Nacional de Poesía Joven Francisco Cervantes Vidal 2009, por Janto ; el Premio Nacional de Poesía Amado Nervo 2009, por El síndrome de Tourette , y el Premio Nacional de Poetas Jóvenes Jaime Reyes 2008, por De todos lados las voces . En 2012, colaboró con Antonio Deltoro en la selección de la antología El gallo y la perla. México en la poesía mexicana , publicada por la UNAM . Fue becario de la Fundación para las Letras Mexicanas de 2005 a 2007, y del FONCA de 2010 a 2011 y de 2012 a 2013.
Sé que a los ochenta años habré llegado a la maestría, sé que a los noventa conoceré el significado de lo que vive y nos rodea por todas partes, y sé que a los ciento diez años habrá en cada una de mis pinceladas el latido de la vida. Yo, a quien la gente llama El Viejo Loco por el Dibujo.
K ATSUSHIKA H OKUSAI
Un hombre se propone la tarea de dibujar el mundo. A lo largo de los años puebla un espacio con imágenes de provincias, de reinos, de montañas, de bahías, de naves, de islas, de peces, de habitaciones, de instrumentos, de astros, de caballos y de personas. Poco antes de morir, descubre que ese paciente laberinto de líneas traza la imagen de su cara.
J ORGE L UIS B ORGES
Para mi viuda
LA GRAN OLA DE KANAGAWA PUDO SER LA OLA QUE ARRASTRÓ EL CADÁVER DE UN MARINERO A LAS COSTAS DE HAWÁI EN 1982 O LA MISMA QUE SACUDIÓ UN BUQUE CARGUERO ZARPADO DE HONG KONG DEJANDO A LA DERIVA UN CONTENEDOR CON PATITOS DE PLÁSTICO PARA JUGAR EN LA BAÑERA O LA MISMA QUE TEMÍA PUDIERA AHOGARME DURANTE MIS CLASES DE NATACIÓN
Los ahogados son azules y bellos.
Sólo una vez mi padre dijo eso.
Mi padre me heredó este color de ojos: azul para mirar el mar de cerca, para no temerle, para sobrevivir.
Un color que coincida con lo inmenso, que tenga en la mirada la fuerza de una ola. Hay olas que rozan el cielo con su cresta, olas como crestas de gallos que rozan el cielo con su canto. Hay olas que devienen en gritos y arrasan con todo lo que tocan. Hay olas que devienen en muerte.
Hay padres como olas que arrasan todo a su paso, padres como catástrofes naturales cuya lección es sobrevivirles.
Hay padres que dicen sólo una vez una cosa con voz de tromba y moridero.
Viernes por la noche.
Escuché que el mar arrojó a las costas de Hawái el cadáver de un marinero al que le faltaba un brazo. Lo vi en un documental de National Geographic, mientras mi padre me cortaba las uñas de los pies para la clase de natación.
Fue entonces cuando, sólo una vez, lo dijo: los ahogados son azules y bellos.
Nunca he visto un ahogado. Nunca he visto un muerto en vivo.
Ese hombre, al que el mar arrojó de su entraña, murió años antes de que yo naciera. ¿Cómo puede sobrevivir alguien tanto tiempo en el recuerdo? ¿Cómo puede 1985 ser una fecha memorable a través de la muerte?
¿Acaso ese hombre tuvo también un padre que metió en su cabeza la idea de conquistar océanos, que sumergió con la mano su cabeza en una piscina?
Viernes por la noche.
Clases de natación: la belleza también es disciplina.
¿Cuánto aire cabe en los pulmones de un niño de ocho años?
Respiración boca a boca: toda lección puede ser reprobada: todo miedo deriva en frustración.
El miedo te entrega a la deriva.
Aprender a nadar es fácil. Cualquier cosa es fácil si se tienen agallas. Los peces tienen agallas; los hombres, miedos. Diccionario del diablo: “El mar es un volumen de agua que ocupa aproximadamente dos terceras partes de un mundo hecho para el hombre, el cual carece de agallas”.
¿Cómo se hace de agallas un niño de ocho años, cómo se hace de miedos?
Jalar aire, sostener la respiración sin desmayarse. Descubrir cuánto misterio cabe en el azul.
Recortarse las uñas siempre antes de entrar al agua. Comerse las uñas a escondidas por miedo a ser descubiertos y corregidos.
Otro viernes. Otra noche.
Este patito de plástico llegó hasta tu bañera desde Hong Kong; sobrevivió al océano surcando su odisea de sal y de artificio. Dicen que el buque que lo traía consigo naufragó en el Pacífico, dejando a la deriva 29,000 patitos como éste. Así de muertos. Así de amarillos. Si un pato de plástico sobrevive al océano, tú puedes sobrevivir al breve mar de las albercas. Juega con él, confía. Y no olvides tallarte detrás de las orejas.
De noche, mi padre mira las noticias y los documentales de National Geographic.
Yo nunca he visto un pato, mucho menos uno amarillo.
Veo la televisión y así imagino Hong Kong como un país de caricaturas, con mujeres de ojos grandes y redondos y azules como olas en la mirada; olas tan azules como el cielo. Hong Kong es un lugar que imagino. No lo he visto de frente. No tengo agallas para llegar tan lejos.
Este pato de plástico dio vueltas durante varios años, atrapado en la corriente del Pacífico, hasta que un día salió de allí para llegar a tu bañera. ¿Qué nos enseña esto? ¿Qué aprendemos de esta lección? El miedo es un ciclo que puede romperse.
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