Michael Puente - Jenni Rivera: La Diva de la Banda

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Asistencia de traducción:

Gricela Puente

Eve Gomez

Sylvia Hevia

Impreso en U.S.A

ISBN: 978-1-62937-025-5

LA DIVA DE LA BANDA

Después de más de 10 años de la realización ante multitudes desde Los Ángeles a la Ciudad de México, había llegado la hora de Jenni Rivera.

Si había alguna duda de su lugar como una superestrella internacional de buena fe, que fue respondida en el verano de 2010 en el sur de California.

A pocos kilómetros de su ciudad natal de Long Beach, California, Jenni Rivera, “La Diva de la Banda”, subió al escenario ante miles de fans gritando en el Nokia Theatre de Los Ángeles el 6 de agosto de 2010.

Ataviado con una chaqueta de cuero negro brillante a juego con una gorra de béisbol, Jenni no perdió el tiempo dando a sus fans lo que querían ver: cantando a todo pulmón sus más grandes éxitos en uno de los escenarios más importantes.

El Teatro Nokia ha acogido a algunos de los más grandes artistas del mundo, como Stevie Wonder, Ricky Martin y Katy Perry.

La barrada Jenni quien nadie sostiene estaba allí para llevar a cabo éxitos de su último álbum, “La Gran Señora”

Y ella no decepcionó al público lleno en total.

Y no sólo por una noche.

Pero para las dos!

Esa hazaña hizo Jenni la primera artista femenina en la música Banda mexicana a vender el lugar 7,100 asientos en los conciertos -back -to-back.

Cuando usted vende 20 millones de discos, la gente tome nota y quieren estar cerca de ti.

“Jenni habló para un segmento de la comunidad que no consigue a menudo escuchada, las madres solteras que trabajan duro todos los días, que se preocupan por sus maridos y familias y otros, pero no se contagian a quejarse”, Flavio Morales, senior vice presidente de programación y producción del canal de cable de NBCUniversal, mun2, dijo al diario Los Angeles Times. “Ella representaba a toda una comunidad: Yo, mi familia, mis amigos y toda una generación de mexicano-americanos que están haciendo la nueva América”.

En previos a espectáculos se agotaron de Jenni en el Teatro Nokia, el nativo de Long Beach continuó impresionando en rompiendo récords de ventas de álbumes y nominaciones a premios.

Sólo en 2009, Jenni ganó 7 nominaciones a los Premios Billboard - el mayor número de nominaciones a la historia para un intérprete de música Femenina Regional Mexicana.

Ya se trate de banda, norteño o de la música ranchera, Jenni dominó y masterizo los estilos.

Con Nokie Teatro dominado, otros lugares cayeron así: Kodak Theatre, Gibson Amphitheatre, San Jose Convention Center y Staples Center, hogar de los Lakers de Los Ángeles.

Por Jenni, ella sabía que su éxito no fue por accidente, sino por el trabajo duro y saber lo que ella quería.

“No quiero decir que soy un fanático del control, pero parte de ser un fanático del control no es admitir que”, Jenni Rivera dijo a El Paso Times en septiembre de 2012 que condujo un concierto en la ciudad.

Desde la iluminación para la selección de canciones, Jenni estaba involucrada en cada aspecto de sus conciertos para dar a sus fans la mejor experiencia.

“Yo estoy involucrada en todo, si es el resumen de mi show, cuando las luces se encienden, cuando hay confeti o fuegos artificiales o la oscuridad o videos” Jenni le dijo al diario El Paso Times. “Yo lo hago todo, que es una locura, lo sé - pero es mi carrera, mis canciones, mi voz y mi público “.

Para algunos, Jenni fue vista no sólo como intérprete en lengua española, sino como una fuente de inspiración para no darse por vencido cuando las cosas se ponen difíciles.

Las mujeres encontraron el ejemplo de Jenni especialmente inspirador.

“Hoy en día, nos gusta y recompensamos a una figura femenina fuerte en la industria de la música porque es muy duro para hacerlo. La gente presta atención a esas divas que son capaces de saltar alto”, dijo Jorge Vásquez, quien ayudó a conseguir el concierto de Jenni en El Paso en 2012.

Al hablar con el diario El Paso Times, Vásquez agregó: “Muchas mujeres llegan a sus espectáculos. Se sienten fortalecidos por el éxito de Jenni. Es un mensaje impresionante”.

En la entrevista con el diario El Paso Times, Jenni tenía su futuro trazado y no parecía nada podría detenerla.

“Mi principal objetivo es ser la Oprah Winfrey mexicana”, Jenni dijo al periódico. “Yo no quiero ser una anfitrióna y que me pagaran por él: yo quiero ser dueña de ella, como Oprah. Yo sé que tengo algo que decir, y la gente le gusta escuchar lo que realmente siento y creo que eso es lo que mi futuro será…, pero yo siempre pensé que sería más tarde, cuando yo haya terminado de cantar y lista para comenzar una nueva carrera”.

Jenni trabajó en el logro de su meta.

Con cada nuevo proyecto, su estrella se disparó y su popularidad siguió subiendo.

El año 2010 vio el estreno del reality show con su hija Janney Rivera Marin que se llama: “Jenni Rivera Presents: Chiquis y RaqC”, una personalidad de la radio se llama Raquel Cordova.

Dado que los fans no se cansaban de 2011 fue testigo del lanzamiento de otro reality show “I Love Jenni”.

“Mis fans aman la realidad. Ellos aman para mí - para mí, ser quien soy. Soy muy transparente. Trato de ser auténtica y genuina con ellos”, dijo Rivera a KTLA.

A raíz de su música y reality shows, cosméticos, perfumes y prendas de vestir fueron la red que detuvo el tren empresarial de Jenni.

Todo esto mientras Jenni seguía criando a sus cinco hijos: Janney “Chiquis”, Jacqui, Michael, Janicka y Johnny.