SINOPSIS
Más de 10 millones de personas sufren dolor crónico en España, pero seguimos sin comprender bien esta enfermedad. Existen muchos medicamentos para tratar el dolor agudo pero, en la mayoría de casos, tienen poco impacto en el dolor crónico a largo plazo, además de generar una fuerte dependencia. Sin embargo, existen muchas alternativas de probada eficacia para el tratamiento del dolor crónico que no son fármacos ni causan adicción alguna y, en cambio, presentan innumerables beneficios para la salud.
La doctora Helena Miranda, que además de ser especialista en la materia padece dolor crónico, nos presenta en esta guía una tesis sencilla pero revolucionaria: la clave para superar el dolor no está en luchar para librarse de él, sino en minimizar la sensación de malestar y el impacto que tiene en la vida diaria de quien lo padece. Basándose en los últimos descubrimientos científicos y en su propia experiencia personal, la doctora Miranda ha preparado un arsenal de herramientas y estrategias terapéuticas que, sin descartar los medicamentos, van mucho más allá para ayudarnos a vivir bien y trabajar mejor... ¡a pesar del dolor crónico!
DRA. HELENA MIRANDA
ADIÓS AL DOLOR
Una guía práctica para vivir
bien con dolor crónico
Prólogo del Dr. Mark B. Weisberg
Traducción de Lola Mayenco
Salud natural
PRÓLOGO
El dolor crónico es un importante problema de salud pública en todo el mundo. Afecta a cerca de 1.500 millones de personas. Es la causa más frecuente de consulta médica. En España se calcula que el dolor crónico afecta a aproximadamente el 18 % de la población. En muchos países, el coste sanitario asociado al tratamiento del dolor crónico representa un gasto mayor que el asociado al cáncer y las enfermedades cardiovasculares juntos. Es una de las principales causas de discapacidad laboral a largo plazo.
Más del 75 % de los pacientes con dolor crónico declaran sentirse deprimidos debido al dolor y más del 50 % de quienes lo sufren afirman tener poco o ningún control sobre el dolor que experimentan.
Y, aun así, en medicina, el dolor crónico todavía se considera una «caja negra» y está rodeado de misterio, confusión y frustración. Es omnipresente y acusa una falta de comprensión. Representa un complejo holograma de factores biomecánicos, neurofisiológicos, neurohormonales y psicofisiológicos. Profesionales médicos con las mejores intenciones a menudo se sienten impotentes a la hora de entender y curar a estos pacientes. Por esta razón, y por muchas otras, no abundan los especialistas que se atrevan a combatir el dolor crónico.
En Adiós al dolor, la doctora Helena Miranda ofrece un plan muy necesario para comprender y tratar este complicado problema de salud. Convierte complejos conceptos sobre la fisiología del dolor crónico en información accesible y fácil de entender, tan útil para los pacientes como para sus familiares y amigos. Ofrece una guía moderna, empática y multidimensional para entender el dolor y gestionarlo.
Un concepto de moda en la medicina del dolor es el de «sensibilización central», o lo que es lo mismo, las formas en que el sistema nervioso central puede hipersensibilizarse en el dolor crónico, de tal manera que se distorsionan los sistemas naturales de alarma del organismo. Esto ayuda a explicar, en parte, la gran cantidad de síntomas (como trastornos digestivos, dolor generalizado, sensibilidad química, cambios de humor y demás) que presentan quienes sufren de dolor crónico. La doctora Miranda aborda este concepto con un lenguaje directo y claro que ayuda al lector a dar sentido a lo que antes era desconcertante y atormentador.
La autora trata muchos otros factores fundamentales para ayudar a quienes padecen dolor crónico a tomar el control de sus vidas. Entre ellos figuran la importancia de dormir bien, el poder del contacto físico, un plan razonable de alimentación y ejercicio, así como la capacidad de discernir dónde y cómo obtener información de salud veraz. Asimismo, promueve un uso racional de medicamentos que sirva como puente para alcanzar el autocuidado. También le doy mucho valor al hecho de que su trabajo se base en pruebas concluyentes: la doctora Miranda incluye al final del libro las referencias científicas de los temas cubiertos en cada capítulo.
Un concepto especialmente importante y a menudo incomprendido es el impacto que tienen las emociones negativas en el dolor crónico. Muchas personas con dolor crónico han pasado por años de visitas a centros médicos y profesionales de la salud en busca de un alivio para sus síntomas. Y una vez que se han sometido a todas las pruebas diagnósticas sin lograr resultados significativos, tal vez escuchan que el dolor está «todo en la mente». Así que es comprensible que acaben poniéndose a la defensiva ante cualquier comentario que mencione el papel de las emociones en el dolor. La autora afronta esta difícil cuestión con gran competencia y explica cómo la ira, la tristeza y el miedo no expresados pueden contribuir a una mayor descompensación del sistema nervioso autónomo, lo cual empeora el dolor físico real.
El currículum de la doctora Miranda es impresionante. Es especialista en medicina del trabajo en Helsinki, Finlandia. Tiene un doctorado en epidemiología del dolor y un máster en estudios ambientales laborales. Tiene más de 40 publicaciones avaladas por la comunidad científica sobre el dolor musculoesquelético, sus factores de riesgo y sus efectos en la discapacidad laboral. Pero lo que más me impresiona es su presencia física y su entusiasmo por la medicina del dolor. Sé que pone verdadera pasión en su empeño por ayudar a vivir mejor y con más plenitud tanto a los pacientes con dolor crónico como a sus familiares.
Otro rasgo distintivo de este libro es la voluntad de Helena por compartir su propio viaje personal lidiando con el dolor crónico de larga duración, ya que los pacientes en el mismo camino muchas veces se sienten aislados e incomprendidos. Pero a medida que el lector descubre los problemas de la autora con el dolor, este percibe como si alguien, por fin, estuviera verbalizando su historia.
Al haber trabajado en el campo del tratamiento del dolor crónico desde hace más de 33 años, agradezco profundamente este recurso valiosísimo para los pacientes y sus seres queridos. ¡Ojalá hubiera existido mucho tiempo antes! La doctora Miranda es una luz de esperanza para las personas con dolor crónico y su libro ayudará al lector a iniciar su propio viaje hacia la curación.