Raquel López Álvarez - Cuidarse para cuidar: Lo que nadie te había contado para recuperarte del postparto en cuerpo y alma

Este libro es, sin duda, un reflejo de mi vida, tanto profesional como personal. De la misma manera que en mi día a día me rodeo de personas que suman y aportan sus conocimientos y experiencias, este libro está lleno de compañeras de viaje que han invertido su tiempo, dedicación y cariño, formando el mejor equipo multidisciplinar que una mujer puede necesitar, sea cual sea su edad o situación.

Ellas son educadoras físicas, fisioterapeutas, matronas, obstetras, doulas, nutricionistas, periodistas, mamás y un largo número de profesionales a las que no he dudado en llamar para que formaran parte de este proyecto al que llevo dedicada catorce meses, proyecto que me ha hecho crecer en todos los sentidos.

En primer lugar, y como no podía ser de otra manera, no podría empezar por otra persona que no fuera Elisa García, quien me acompaña en cada aventura profesional que emprendo. Elisa García es graduada en Fisioterapia y Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, especialista en Obstetricia y Uroginecología, directora de formaciones en MAMIfit y, actualmente, es también docente universitaria mientras trabaja en su doctorado. Su objetivo siempre ha sido el mismo: mejorar la calidad de vida de las mujeres en las diferentes etapas de su vida, y yo me siento tremendamente afortunada de tenerla siempre a mi lado.

Pilar Gregorio Álvarez es enfermera y matrona en el Hospital La Inmaculada de Huércal-Overa (Almería), madre de dos adolescentes maravillosos, y defensora a ultranza de los derechos de las mujeres, principalmente del derecho a la información y a la libertad de elección respecto a su salud. Le apasiona el deporte por sus beneficios y los valores que ayuda a construir, y ofrece su ayuda, experiencia y cariño a toda mujer que lo necesite, siendo el ángel de la guarda de tantas y tantas mujeres en el embarazo, parto y posparto, transmitiendo calma y empatía a raudales.

Lara Marín es enfermera, nutricionista y doula. Máster en Epidemiología y Salud Pública y MBA de gestión sanitaria. Experta en PNI y microbiota. Mamá de dos peques que, como ella dice, le han enseñado más que ninguna de las carreras que haya estudiado (y no puedo estar más de acuerdo). Lara llegó a mi vida (o yo a la suya) al apuntarme a su curso de doula, figura duramente castigada en España, pero que considero que es fundamental para acompañar a la mujer durante todo el proceso de del embarazo.

Paloma Ortiz es economista, máster en Cooperación Internacional y experta en feminismo, género e igualdad. Gracias a su experiencia, pudo conocer y trabajar con diferentes ONG de mujeres donde se dio cuenta de que muchos de los proyectos que se desarrollaban no suponían una solución efectiva a un problema, sino solamente un parche. Por ese motivo, inició sus estudios de doula y fue en 2014 cuando creó junto a Lara, su amiga, hermana de vida y socia, un proyecto llamado Pequeños Maestros, un lugar donde poder acompañar y ayudar a las familias. También es mamá de una preciosa niña que, igual que nos sucede a todas, ha transformado su vida.

Lara y Paloma son dos personas luz, me enamoré de ellas desde el mismo momento en el que nuestras miradas y sonrisas se cruzaron, y supe que formarían parte de mi vida y de mi camino.

Jennifer López tiene, además de nombre de artista, la enorme fortuna de ser mi hermana (es una broma entre nosotras, no os vayáis a pensar). Es una de esas afortunadas que ha logrado convertir su vocación en su forma de vida. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, y máster en Periodismo Audiovisual por la Escuela CES. Durante años trabajó en diversos medios de comunicación, entre ellos CNN+, Antena 3, La Sexta o Euronews, para después pasarse al lado oscuro y dedicarse a la comunicación corporativa, trabajo que le apasiona y donde se vuelca por cuidar y mimar la reputación de las compañías, entre ellas la de MAMIfit. Feminista hasta la médula por educación y convicción (ya os hemos hablado en muchas ocasiones de nuestra madre, el referente femenino que nos ha marcado de manera inigualable), no había sido plenamente consciente de la importancia de luchar por lograr la igualdad hasta la llegada de su hija Vera, a la que educa por convertirse en una guerrera, y no en una princesa. Mientras tanto, la igualdad de oportunidades en el mundo laboral sigue siendo una de sus máximas reivindicaciones, y no descansará ni un segundo hasta que eso ocurra en todos los ámbitos. Mi hermana es una pieza clave en mi vida, esa persona con la que siempre puedo contar para todo.

A Mar Gregorio, Almería la vio nacer y Madrid la vio crecer. Es ilustradora desde que cogió por primera vez un lápiz y directora de Arte de MAMIfit desde hace algo menos. Comenzó su camino laboral por la rama empresarial, pero su vocación tuvo más peso y, finalmente, cambió de dirección a la rama artística. De cabeza inquieta, encontró en la publicidad la unión perfecta entre arte y creatividad. En 2013 comenzó una nueva aventura siendo mamá de dos soles, y con MAMIfit ha creado el tándem perfecto entre lo personal y lo laboral, logrando una conciliación real. Cuando nos preguntan por nuestra relación, no sabemos qué decir. Ella empezó siendo mi clienta, después nuestros peques fueron juntos a la escuela infantil y se convirtieron en inseparables, vecinas, amigas, consuegras, compañeras… ¡de todo! Y aunque la vida ha querido ponernos kilómetros de por medio, hemos encontrado la manera de seguir juntas y vernos con frecuencia. Mar es la artista de las ilustraciones de este libro, y mirándolas con atención se puede llegar a conocer a su creadora. Hace no mucho tomé una decisión importante en mi vida, y era rodearme solo de gente buena, positiva y que sumara. Y por eso Mar ha formado, forma y formará parte de esta y todas las aventuras en las que quiera estar.

Dafne Fernández es una de esas personas que llegan a mi vida como clienta y resultan ser un corazoncito con patas. Levanté el teléfono para pedirle su testimonio de lo que fue entrenar conmigo durante su embarazo y posparto, y no importa el número de veces que lo lea, me emociona y hace llorar a partes iguales. Es la imagen de por qué me dedico a las mujeres, y pensar en ella es siempre sonreír.

Lorena Castell, Carmen Osorio, Pastora Soler, Alma Obregón, Hiba Abouk, Isabel Jimenez y Sara Sálamo, gracias por vuestros testimonios, palabras, sonrisas y momentos juntas. Ha sido emocionante compartir una etapa de vuestras vidas tan bonita, y ver cómo os convertíais en mamás y guerreras maravillosas.

A ti, Emma Soteras, porque eres el principio de toda esta aventura.

Gracias a mi editora, Leticia Sánchez, por creer en mí y hacer este sueño realidad.

Y, sin duda, mi especial agradecimiento es para la base de mi vida: mi familia, a la que siempre intento tener presente en todo lo que hago, y lo mejor es que cuarenta años después se siguen dejando. Gracias a mi hermano Daviz (con Z), por dar ese último repaso a todos los capítulos tan necesario para mí, sobre todo para no escucharte después decirme las erratas que tiene. Gracias a mi padre, por apoyarme incondicionalmente con sus viajes a Madrid siempre que ha hecho falta; a mi madre, por darme esa seguridad que necesito para no tener miedo a nada y poder escalar con una sonrisa todas las montañas de la vida; a mi hermana, por quererme y apoyarme, en todo, a pesar de ser tan distintas, siendo este el motivo de querernos y necesitarnos a partes iguales, y a mis dos chicos, Force y Noah, por formar parte de todas las aventuras que me invento, sin preguntar.

Gracias por tanto.