Dani Gordon - La biblia del CBD: Cómo transformar tu cuerpo y mejorar tu salud con el cannabis medicinal

E ste trabajo no habría sido posible sin mis pacientes y clientes, que han sido mis mejores maestros a lo largo de los años, compartiendo valientemente sus historias y colaborando conmigo en este viaje conjunto. Infinitas gracias a dos fabulosos colegas, el doctor Ron Reznick y el doctor Ron Puhkey, por su amistad y sus orientaciones en materia de medicina de familia e integrativa a lo largo de años y por concederme el privilegio de formar parte de su consultorio; y a Jean Southgate por su apoyo, amistad y paciencia permanentes con mis interminables correos electrónicos.

También tengo una deuda de gratitud con los muchos y brillantes científicos y colegas médicos de diversos continentes que han liderado el uso del cannabis como medicamento y han contribuido enormemente a mis conocimientos sobre la planta con sus investigaciones a lo largo de los años y con sus consejos sobre cómo utilizarla clínicamente: sobre todo el doctor Ethan Russo, el doctor Roger Pertwee, el doctor Arno Hazekamp y el doctor Scott Shannon. También quiero expresar agradecimiento a mis colegas del cannabis de todo el mundo, en especial la doctora Sandra Carrillo por su respaldo y camaradería a través de los continentes, así como a unos fantásticos colegas, al final amigos entrañables, que están trabajando con el cannabis en el Reino Unido: la doctora Lili Galindo, la doctora Chloe Sakal, el doctor Leon Barron, la doctora Callie Seaman, el profesor Mike Barnes y, por último, pero no por ello menos importante, el profesor David Nutt, que ha sido inspiración y figura destacada en la investigación farmacológica y en las reformas políticas.

Gran parte del éxito de este libro y de mi trabajo con el cannabis terapéutico se lo debo a mi esposo, Nick. Su decidido respaldo y estímulo a lo largo de los años me ha dado el coraje para dedicarme a la medicina integrativa y a la medicina del cannabis para ayudar a mis pacientes, sobre todo al principio, antes de que obtuviera el apoyo y la comprensión de la medicina convencional.

Gracias a mi familia por su colaboración a lo largo de este viaje lleno de incertidumbres, y especialmente a mis padres por animar y alentar siempre mi carrera médica ligeramente atípica, y a mi suegra, Chris, que siempre me ha ayudado de manera indecible.

Quiero dar las gracias a los muchos «defensores de pacientes» con los que he tenido el placer de trabajar y a los que he conocido personalmente, entre ellos los inspiradores Hannah Deacon, Carly Barton, Talin Sellian, Callie Blackwell, Lucy Stafford, Charlotte Caldwell, Peter Carroll y muchos más que luchan de manera incansable por los derechos y la salud de los enfermos.

Gracias a mi extraordinaria y asombrosa agente, Rachel Mills, y a mi agente internacional, Alexandra Cliff, por formar el mejor equipo que cualquier autor podría llegar a desear.

Quiero darle las gracias de corazón a mi editora en el Reino Unido, Pippa Wright (apodo en mi marcación rápida: Editing Guru), por su paciencia, humor y brillante labor con el manuscrito, y a mi increíble equipo de Orion Spring, que ha ido más allá y ha sido el sueño de cualquier autor. En Estados Unidos, quiero dar las gracias a mis editoras Haley Weaver y Beth de Guzmán, y al equipo de Gran Central Hachette USA, por creer en este libro y ayudarme a sacarlo a la luz y distribuirlo en mi cuna de medicina integrativa. En el lado canadiense, un profundo agradecimiento a mi editor, Brad Wilson, y a su equipo de HarperCollins Canada, por confiar en mí y en este libro para reunir más información y educar mejor sobre el cannabis y el CBD, que ahora están en boca de todos, aunque todavía a veces no se entienden bien; asimismo, debo darles las gracias por ayudarme a contactar con mis compañeros canadienses en el país donde había comenzado mi viaje con el cannabis terapéutico. En España, gracias al equipo editorial de Roca Editorial, Carlos Ramos y Blanca Rosa Roca, y en Polonia, a mis editores polacos, Malgorzata Święcicka y Piotr Wawzeńczyk, de Booklab Agency (¡mi abuelo polaco de noventa y seis años y yo estamos muy orgullosos de que el libro se haya traducido al polaco!).