Otros títulos en español de Hay House
Aventuras de una Psíquica, Sylvia Browne
Conversaciones con el Otro Lado, Sylvia Browne
Dios, La Creación, e Instrumentos para la Vida, Sylvia Browne
¡El Mundo Te Está Esperando!, Louise L. Hay
Feng Shui para Occidente, Terah Kathryn Collins
Gratitud, Louise L. Hay
Meditaciones para Sanar Tu Vida, Louise L. Hay
Un Mensaje de García, Charles Patrick Garcia
La Naturaleza del Bien y del Mal, Sylvia Browne
Los Niños Índigo, Lee Carroll y Jan Tober
La Oración y las Cinco Etapas de Curación,
Ron Roth, Ph.D., y Peter Occhiogrosso
Pedid que ya se os ha dado, Esther y Jerry Hicks
Pensamientos del Corazón, Louise L. Hay
La Perfección del Alma, Sylvia Browne
El Poder Contra la Fuerza, David R. Hawkins, M.D., Ph.D.
El Poder Está Dentro de Ti, Louise L. Hay
El Poder de la Intención, Wayne W. Dyer, Ph.D.
Respuestas, Louise L. Hay
Sana Tu Cuerpo, Louise L. Hay
Sana Tu Cuerpo A—Z, Louise L. Hay
Sánese con los ángeles, Doreen Virtue, Ph.D.
Usted Puede Sanar Su Vida, Louise L. Hay
Vive Tu Vida, Carlos Warter, M.D., Ph.D.
¡ Vivir! Reflexiones Sobre Nuestro Viaje por la Vida, Louise L. Hay
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Publicado y distribuido en los Estados Unidos por: Hay House, Inc., P.O. Box 5100, Carlsbad, CA 92018-5100 • Teléfono: (760) 431-7695 ó (800) 654-5126 • Fax: (760) 431-6948 ó (800) 650-5115 • www.hayhouse.com
Editorial: Jill Kramer • Diseño: Jenny Richards
Traducido del inglés por: Adriana Miniño: adriana@ mincor.net
Titulo del original en inglés: HEALING WITH THE ANGELS
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La autora de este libro no otorga consejos médicos o prescribe el uso de ninguna técnica como forma de tratamientode problemas médicos o físicos sin consultar con la opinión médica, directa o indirectamente. La intención de la autora es únicamente la de ofrecer información de naturaleza genérica, para ayudarlo en su sendero hacia el bienestar emocional y espiritual. En el evento de que usted use cualquier información de este libropara su uso personal, lo cual es su derecho constitucional, la autora y la editorial no asumen ninguna responsabilidad por sus acciones.
ISBN 1-4019-0692-3
eISBN 978-1-401-92251-1
Impresión 1: Enero 2006
Impresión 2: Enero 2006
Impreso en los Estados Unidos
Dedicado a todos aquellos que hacen el papel de ángeles,
tanto en el cielo como en la tierra.
Gracias por su amor, dedicación y servicio.
Les ruego que sigan teniendo paciencia con nosotros,
mientras aprendemos cómo aceptar sus obsequios
con gracia y gratitud.
Contenido
G racias a Dios, al Espíritu santo, a Jesús, a Frederique a Pearl y a todos mis otros guías y ángeles. Todo mi amor y mi gratitud a Louise L. Hay, Reid Tracy, Jill Kramer, Christy Salinas, Jeannie Liberati, Jenny Richards, Margarete Nielsen, Jacqui Clark, Kristina Tracy, Karen Johnson, Ron Tillinghast, Joe Coburn, Anna Almanza, Suzy Mikhail, Adrian Sandoval y Lisa Kelm.
Aprecio profundamente la ayuda angélica recibida de Steve Prutting, Charles Schenk, Bronny Daniels, Janine Cooper y Jennifer Chipperfield. Gracias a todos los hombresy mujeres maravillosos a quienes les hice sesiones con sus ángeles; y bendiciones angélicas a todos mis clientes y alumnos, quienes me permitieron transcribir sus casos y sus historias en este libro.
N o es su imaginación. Ahora más que nunca los ángeles están entre nosotros, y no solamente desde el puntode vista comercial. Cada vez un número más grande de personas están informándonos sobre sus encuentros con estos seres celestiales. En estos encuentros, los ángeles les entregan mensajes oportunos, remedios para su sanacióny acciones a llevar a cabo para salvar sus vidas.
¿Por qué los ángeles están rondando ahora nuestro planeta más que antes? En parte es gracias a nuestras plegarias implorando la ayuda celestial; y porque Dios y los ángeles saben que es hora de que comencemos a sanarnos nosotros mismos, nuestras vidas y nuestro mundo. Mientras avanzamos en el cambio de milenio, los ángeles nos están ayudando a sanarnos de los desafíos y de las enfermedades que no nos permiten vivir a nuestro máximo potencial.
Los ángeles están aquí para enseñarnos que el amor de Dios responde a todas nuestras peticiones y desafíos. Están aquí para sanarnos de los efectos del miedo. Son sanadores poderosos, y usted puede trabajar con ellos para acelerar el trabajo de sanación que están intentando realizar en usted. Cuanto más invitemos a los ángeles en nuestras vidas, más rápidamente reflejaremos el esplendor celestial en todos nuestros actos.
No hay límites en el poder sanador de los ángeles. Ellos nos pueden ayudar a sanar nuestras relaciones, asuntos profesionales, finanzas, viviendas y cualquier otro desafío que nos esté perturbando. Tan solo tenemos que seguir unos cuantos pasos para ayudar a los ángeles… a ayudarnos:
1. Pedir. La ley del Libre Albedrío dice que los ángeles no pueden intervenir en nuestras vidas sin nuestro consentimiento expreso. La única excepción a esta regla es cuando estamos en una situación de riesgo de muerte antes de que se manifieste el momento de dejar este mundo. En todos los otros casos, debemos pedir la ayudade los ángeles.
Usted se preguntaría ¿Cómo debo pedir? No es necesaria una invocación formal para invitar a los ángeles a que lo asistan. Tan solo tiene que pensar: ¡ángeles! y ellos responderán de inmediato. Usted, como cualquier otrapersona tiene dos o más ángeles guardianes a su lado desde su nacimiento hasta su muerte. Nada que pueda llegar a hacer, decir o pensar hará que sus ángeles lo abandonen o lo amen menos. Su amor por usted es poderoso e incondicional.
Usted también puede pedir más ángeles en su vida ya sea pedirle a Dios que le envíe más ángeles o invocar sus ángeles directamente. Los dos métodos son idénticos porque los ángeles siempre responden a la voluntad de Dios. Y Dios siempre está listo para enviarle ángeles que lo protejan cada vez que usted lo pida.
2. Entregar el problema. Antes de que Dios y los ángeles puedan sanar su situación, usted debe entregarla por completo a ellos. Es como escribir una carta y enviarla por correo. Primero debe liberar la carta de sus manosantes de que la oficina de correos pueda enviarla. Muy a menudo pedimos ayuda al cielo, pero en vez de dejar que esto suceda, nos aferramos a la situación, bloqueando así la habilidad de intervenir de los ángeles. Si usted de verdad desea ayuda, ¡entréguele por completo su problema a Dios y a los ángeles!
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