PILATES REFORMER
ELLIE HERMAN
Copyright de la edición original: © 2007, 2005 by Ellie Herman Books
Título original: Ellie Herman’s Pilates Reformer, 2nd. ed.
Traducción: Andrea Fuente Vidal
Diseño de cubierta: Rafael Soria
© 2018, Ellie Herman
Editorial Paidotribo
www.paidotribo.com
E-mail: paidotribo@paidotribo.com
3ª reimpresión de la 1ª edición
ISBN: 978-84-9910-036-4
ISBN EPUB: 978-84-9910-893-3
BIC: VFMG
Fotocomposición: Bartolomé Sánchez de Haro
ÍNDICE
ACERCA DE ELLIE HERMAN
Hace ya muchas lunas que descubrí el Pilates. Por aquel entonces -debía correr el año 1988- yo era bailarina profesional y coreógrafa en San Francisco. Ni que decir tiene que lo que ganaba en la compañía femenina The Flying Buttresses no me llegaba para financiar mi bohemio estilo de vida en la Zona de la Bahía. Tenía 22 años, estaba llena de ganas de vivir al límite, adicta a las emociones, y decidí probar suerte en el mundo de la lucha profesional. Un buen día, al disputar un torneo, mi carrera de persona “sin escrúpulos” se vio forzada a terminar; en uno de los torneos una tipa dura intentó abatirme con todas sus fuerzas pero no consiguió moverme. Me quedé en el sitio hasta que oí un fuerte chasquido: era mi ligamento cruzado anterior; se había desgarrado a lo grande. Mientras estaba tumbada en el suelo no paraba de recriminarme a mí misma: “¿cómo has podido ser tan imbécil? Ya puedes despedirte de tu carrera como bailarina.”
Y es aquí cuando el Pilates entra en mi vida. Acudí al St. Francis Hospital de San Francisco, donde disponen de un departamento dedicado íntegramente a la Medicina para la Danza, basado en la rehabilitación mediante el Pilates. Y me pusieron bajo la supervisión de Elizabeth Larkham.
Tras seis meses de rehabilitación volví a bailar, y cuál fue mi sorpresa al descubrir que regresaba siendo mucho mejor bailarina de lo que era antes de lesionarme. El Pilates no sólo me había permitido volver a saltar, brincar y hacer piruetas, sino que además había mejorado la técnica, el control, el equilibrio y la fuerza central con que realizaba todo ello.
Después de esto me mudé a la ciudad de Nueva York. Allí asistí durante corto tiempo a un programa Master de Danza en la Universidad de NY, donde tomé clases matinales con Kathy Grant, una de las discípulas directas de Joseph Pilates. Ella me enseñó cómo se puede profundizar y ser creativo con el método Pilates, al tiempo que me sacaba del tremendo dolor de cadera que padecía a consecuencia de las clases diarias de ballet. Acabé dejando ese Master, pero Kathy Grant me inspiró el deseo de convertirme en profesora de Pilates. Y me puse a ello de la mano de Romana Kyranowska, otra de las alumnas originales de Joseph Pilates, que vive aún en la ciudad de Nueva York.
Regresé a San Francisco en 1992 y continué mi formación de Pilates con Jennifer Stacey y Carol Appel de Body Kinetics. Al año siguiente inauguré mi propio centro en un loft del distrito Misión de San Francisco. El centro se expandió tanto con los años que nos cambiamos a un edificio más grande, con dos pisos completos dedicados a Pilates, en sus versiones de fitness, rehabilitación, formación de profesores, formación continua y medicina complementaria. Posteriormente, según fue aumentando la demanda de Pilates de calidad, también aumentó mi negocio, y abrí un segundo centro en Oakland, California, en 2001.
ELLIE HERMAN
Mi ansia de conocimiento me llevó a sacar una especialización (Master of Science) en Acupuntura y Fitoterapia China por el American College of Traditional Chinese Medicine de San Francisco en 2000.
Entonces comencé a echar de menos a mi familia y la costa este, y volví a Brooklyn para abrir mi tercer studio Pilates en Park Slope en octubre de 2006.
Como parte de mi constante interés por la innovación en el Pilates, diseñé una pieza de equipamiento Pilates llamada Springboard, un sustituto económico para el Cadillac o la unidad de pared, que actualmente fabrica Balanced Body y que ahorra mucho espacio.
Si bien el Pilates constituye un sistema fabuloso para corregir y rehabilitar un gran número de trastornos, no siempre cubre las necesidades en bipedestación y marcha. Pensando en que una persona activa da más de 5.000 pasos al día, me obsesioné con la idea de hasta qué punto la marcha refuerza nuestros hábitos posturales. Con ayuda de Nancy Myers (vicepresidenta de Ellie Herman Studios), una mujer encantadora y brillante que detecta una anomalía de la marcha a kilómetros de distancia, desarrollé un sistema que combina el Pilates con el caminar. Se llama Walk-ilatesSM y utiliza zapatos MBT (Masai Barefoot Technology), un calzado que potencia la estabilidad ya que rueda sobre el suelo en lugar de alcanzarlo con un golpe plano, potenciando así todos los aspectos correctivos del programa Walk-ilates.
En el blog de mi página web www.ellie.net encontrarás todas las novedades acerca de mis studios y otras aventuras del Pilates. Estoy disponible para impartir talleres y formación de profesores. Puedes contactar conmigo en ellie@ellie.net
EL REFORMER
Es probable que el Reformer sea la máquina más conocida del equipamiento Pilates. Además de que su uso es divertido, su repertorio de ejercicios es el más amplio y el más versátil. A continuación se destacan algunos aspectos importantes que hay que comprender cuando se utiliza el Reformer.
LA BASE. La base hace referencia a la posición en la que el carro está en su punto de partida. Volver el carro a su base es aproximarlo totalmente a la barra de pies.
AJUSTE DE LOS MUELLES. Los ajustes sugeridos en este libro están pensados para una persona de 55 a 70 kilogramos de peso. Si tu peso difiere mucho de estas especificaciones, tendrás que hacer el correspondiente ajuste de muelles. En los ejercicios de control, la dificultad se incrementa disminuyendo la resistencia. Otra manera de disminuir la resistencia es poniendo la segunda marcha.
ELEVADORES. La posición estándar de estos ajustes sería abajo, pero puedes variar la altura de las cuerdas en cualquier momento para disminuir la carga (p. ej., en la serie lateral para brazos de rodillas), o al realizar un ejercicio de remo sobre la caja larga en lugar de estar sentado sobre el carro. Independientemente de esto, subir los elevadores durante la serie para piernas permite que estas últimas dispongan de una mayor amplitud del movimiento (ROM, de range of motion) que si estuvieran abajo.
CUERDA NORMAL. Para la mayoría de los ejercicios necesitarás que las cuerdas enganchen justo con las hombreras. Una vez las hayas medido, puedes retirarlas de ahí y dejarlas en los soportes verticales para que no entorpezcan la sesión.
CUERDA LARGA. Para la columna larga y la serie para piernas, alarga las cuerdas de manera que la anilla en “D” quede justamente centrada entre las hombreras. Esto viene a suponer un alargamiento de entre 15 y 20 cm por encima de la longitud normal.
CUERDA CORTA. Para los roll downs, acorta las cuerdas de modo que el final del asa para pies quede sobre la cabecera. Acórtalas algo más para el ejercicio de isquiotibiales.
BARRA DE PIES DE BALANCED BODY. El Studio Reformer que se muestra en la ilustración está equipado con una barra de pies de tres posiciones: alta, baja y abatida.