• Quejarse

Immanuel Kant - Fundamentación de la metafísica de las costumbres

Aquí puedes leer online Immanuel Kant - Fundamentación de la metafísica de las costumbres texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 1785, Editor: ePubLibre, Género: Ordenador. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

Immanuel Kant Fundamentación de la metafísica de las costumbres
  • Libro:
    Fundamentación de la metafísica de las costumbres
  • Autor:
  • Editor:
    ePubLibre
  • Genre:
  • Año:
    1785
  • Índice:
    5 / 5
  • Favoritos:
    Añadir a favoritos
  • Tu marca:
    • 100
    • 1
    • 2
    • 3
    • 4
    • 5

Fundamentación de la metafísica de las costumbres: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Fundamentación de la metafísica de las costumbres" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

Immanuel Kant: otros libros del autor


¿Quién escribió Fundamentación de la metafísica de las costumbres? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

Fundamentación de la metafísica de las costumbres — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Fundamentación de la metafísica de las costumbres " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer
I
ACOTACIONES CRÍTICAS AL CAPÍTULO PRIMERO DE LA FUNDAMENTACIÓN DE LA METAFÍSICA DE LAS COSTUMBRES
1. El conflicto entre deber e inclinación: el puritanismo de Kant

Basta con leer el Prólogo y el primer capítulo de la Fundamentación de la metafísica de las costumbres para poder hacerse con una primera visión de conjunto de la ética de Kant. Ya desde ese momento la moral kantiana se granjea la simpatía de numerosos lectores. A muchos otros sin embargo, y también desde ese mismo momento, se les antoja difícil de digerir. Pensemos, por ejemplo, en la obsesión del filósofo de Königsberg por la pureza moral de nuestras acciones. Esta obsesión queda manifiesta en su radical planteamiento de la dialéctica entre deber e inclinación que le hace decir:

Una acción realizada por deber tiene, empero, que excluir por completo el influjo de la inclinación.

Meditando sobre los fundamentos de la ética, el gran poeta F. C. Schiller, un par de generaciones más joven que Kant y uno de sus más brillantes seguidores, expuso humorísticamente en estos versos los escrúpulos que pudieran pesar en la conciencia de un adicto a la ética kantiana sobre la moralidad de su conducta:

De buen grado sirvo a mis amigos, mas, ¡ay!, lo hago con placer.

De ahí que me atormente la duda de no ser persona virtuosa.

Y para ahuyentar esos escrúpulos, el poeta recomienda la oportuna terapia:

Tu única opción, dalo por cierto, consiste en tratar de odiarlos cordialmente, y entonces, con aversión, hacer lo que el deber te exige.

Es verosímil que la actitud tan desconfiada de Kant ante las inclinaciones inmediatas de nuestra naturaleza tenga bastante que ver con la severísima educación religiosa que le inculcó en sus tiempos de estudiante la secta protestante pietista, entonces dominante en Königsberg con apoyo del rey de Prusia. Pero también conviene tener en cuenta que probablemente Kant se excedió en su lenguaje en esta materia dando lugar a un extendido equívoco. Lo que más probablemente pretendió decir es que, cuando nuestras inclinaciones cooperan en nosotros con el deber, ello no repercute tanto en la disminución, o incluso anulación, de la moralidad de nuestros actos como en la disminución, o incluso anulación, de la evidencia de dicha moralidad. Porque cuando la inclinación y el deber cooperan en el ejercicio de una acción, siempre o casi siempre será un problema determinar qué factor ha sido el dominante. Pero cuando el sujeto agente cumple con su deber sin el apoyo de ninguna inclinación natural, y sobre todo cuando lo hace en contra de ella, es innegable que la moralidad de su acción resulta más evidente.

2. El nivel inicial de «popularidad» del proyecto ético de Kant.

El autor de la Fundamentación nos deja bien claro que no se da por satisfecho con su sola propuesta de formulación de la ley moral como mera forma de la legalidad sin contenido particular. El insiste por añadidura en que para lograr este resultado no se ha apartado en nada del sentido moral del hombre común:

con todo esto concuerda perfectamente la razón vulgar de los hombres en sus juicios prácticos, y el principio citado no se aparta nunca de sus ojos.

La verdad es que, en principio, no tenemos por qué discrepar de la tesis kantiana de que la tensión dialéctica entre inclinación y deber sólo se le presenta a una voluntad como la nuestra, sujeta a la animalidad, mientras que en una hipotética voluntad exenta de tal sujeción (una naturaleza racional no humana), la ecuación entre inclinación (no sensible) y bien podría ser perfecta. Pues si la voluntad del hombre puede ser buena, pero tan difícilmente santa, es porque en su naturaleza, reconoce Kant, la razón está mezclada con la animalidad. Ahora bien, al sentido moral del hombre común le cuesta entender que, siendo su naturaleza de hecho mixta, se le exija el heroísmo de comportarse como si esa naturaleza fuese pura o inmixta. ¿Por qué, siendo yo un ser racional con raíces en la animalidad tengo que comportarme como si no las tuviera en absoluto?

El afán ético de imparcialidad que alienta en la ética de Kant y su casi freudiana obsesión por desenmascarar en nuestra conducta las artimañas del apetito egoísta no pueden ser más encomiables. Pero cabe dudar de que el hombre común se sienta irresistiblemente motivado por esa ética cuando se le dan facilidades para que pueda compararla con el sensato equilibrio entre razón y naturaleza animal que nos brindan, por ejemplo, las éticas de Aristóteles y de Spinoza. Por otra parte ese hombre común no se queda tranquilo si se pone a pensar o alguien le dice que piense que la buena voluntad, cuando va acompañada de ignorancia, puede causar los peores desastres, sin excluir la ruina del mundo o la de otras almas. La ética de Aristóteles, en la que la virtud cardinal de la prudencia, ingrediente esencial de la buena conducta, es concebida según ya he indicado como sabiduría virtuosa y no meramente mundana de la vida, parece disponer de mejores recursos para encarar ese riesgo.

II
REFLEXIONES SOBRE EL IMPERATIVO CATEGÓRICO
1. Estructura y función del imperativo categórico.

En la filosofía moral de Kant las nociones de ley moral y de imperativo categórico no significan exactamente lo mismo. El imperativo categórico es la ley que se manifiesta en forma especial de mandato a una voluntad como la humana, inserta en una naturaleza animal con cuyas inclinaciones, pasiones y emociones tiene que lidiar, pues en una voluntad no vinculada a la animalidad la ley moral no necesita manifestarse así.

Por otra parte conviene distinguir asimismo entre el imperativo categórico como principio supremo de la moral referido al hombre, y su test concomitante de universalidad, que es una especie de experimento mental susceptible de ser descrito como el ensayo de falsación, por inconsistencia, de cualquier hipótesis generalizadora de nuestras máximas personales; Rawls habla a este respecto de un «procedimiento» o protocolo, que pasa por los cuatro momentos que siguen.

El punto de partida es la formulación de mi máxima particular, que Rawls esquematiza diciendo:

(1) Yo elijo la acción A en la circunstancia C para obtener el fin F.

El segundo paso del protocolo consiste en universalizar esa fórmula:

(2) Todo x elige la acción A en la circunstancia C para obtener el fin F.

El tercer paso se cumple añadiendo a esta generalización la condición de obligatoriedad:

(3) Todo x debe elegir la acción A en la circunstancia C para obtener el fin F.

En la cuarta fase del protocolo se procede al intento de falsación de la proposición universal y obligatoria así obtenida, tratando de demostrar su inconsistencia por análisis lógico de la situación y de las consecuencias que ésta implica. A continuación paso a comentar el uso que hace Kant de su instrumento.

2. El potencial deductivo del imperativo categórico

Kant habla de dos principales méritos que avalan su dóctrina del imperativo categórico. Uno es la garantía de que

de este único imperativo pueden derivarse, como de su principio, todos los imperativos del deber.

Y el otro es que el test de universalidad le ofrece al hombre común, por inexperto que sea en cualquier materia del conocimiento, una receta que le permite salir de todo atolladero moral que la vida pueda depararle con sólo aplicar un sencillo cálculo:

Para saber lo que he de hacer para que mi querer sea moralmente bueno, no necesito ir a buscar muy lejos una penetración especial. Inexperto en lo que se refiere al curso del mundo; incapaz de estar preparado para los sucesos todos que en él ocurren, bástame preguntar: ¿puedes querer que tu máxima se convierta en ley universal? Si no, es una máxima reprobable, y no por algún perjuicio que pueda ocasionarte a ti o a algún otro, sino porque no puede convenir, como principio, a una legislación universal posible.

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «Fundamentación de la metafísica de las costumbres»

Mira libros similares a Fundamentación de la metafísica de las costumbres. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «Fundamentación de la metafísica de las costumbres»

Discusión, reseñas del libro Fundamentación de la metafísica de las costumbres y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.