• Quejarse

César Rendueles - Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura

Aquí puedes leer online César Rendueles - Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 2015, Editor: Seix Barral, Género: Política. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

César Rendueles Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura
  • Libro:
    Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura
  • Autor:
  • Editor:
    Seix Barral
  • Genre:
  • Año:
    2015
  • Índice:
    3 / 5
  • Favoritos:
    Añadir a favoritos
  • Tu marca:
    • 60
    • 1
    • 2
    • 3
    • 4
    • 5

Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

Este ensayo propone una historia personal del capitalismo desde el siglo XIX hasta hoy. Un recorrido a través de obras literarias esenciales, de sus personajes, tramas y escenarios, para entender la evolución de un capitalismo salvaje. Capitalismo canalla es un ensayo heterodoxo que entremezcla novelas canónicas como Robinson Crusoe o Fausto, autores clásicos como Blake o Dickens, con textos de culto como la novela distópica Mercaderes del espacio o la ucronía Tiempos de arroz y sal. César Rendueles incluye, además, sus propios recuerdos y experiencias, de manera que los diversos capítulos ofrecen una lectura novedosa y una visión original de la evolución del capitalismo como un personaje canalla aparentemente invencible, por uno de los pensadores más relevantes del nuevo siglo.

César Rendueles: otros libros del autor


¿Quién escribió Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer
Índice Te damos las gracias por adquirir este EBOOK Visita Planetadelibroscom - photo 1

Índice

Te damos las gracias por adquirir este EBOOK

Visita Planetadelibros.com y descubre una nueva forma de disfrutar de la lectura

¡Regístrate y accede a contenidos exclusivos!

Próximos lanzamientos

Clubs de lectura con autores

Concursos y promociones

Áreas temáticas

Presentaciones de libros

Noticias destacadas

Capitalismo canalla Una historia personal del capitalismo a través de la literatura - image 2

Comparte tu opinión en la ficha del libro

y en nuestras redes sociales:

Picture 3Picture 4Picture 5Picture 6Picture 7

Explora Descubre Comparte

Junto a los ríos de Babilonia

nos sentamos a llorar con nostalgia de Sión.

Salmos, 137

PRÓLOGO

Durante la mayor parte de su vida, el filósofo Immanuel Kant tuvo a su servicio a Martin Lampe, un asistente que le ayudaba en las tareas domésticas y al que despidió en 1802, tras enemistarse con él por algún motivo que se desconoce. Kant tenía entonces setenta y ocho años, empezaba a mostrar signos de demencia senil y se servía de pequeñas notas en las que apuntaba toda clase de asuntos pendientes y tareas importantes. En una de ellas escribió: «El nombre de Lampe ha de ser completamente olvidado». La gracia del asunto, claro, es que se trata de una especie de contradicción performativa. De la misma manera que esforzarse en conciliar el sueño es una receta infalible para cultivar el insomnio, escribir en una nota que hay que olvidar algo parece una excelente manera de grabarlo a fuego en la mente.

En cambio, la operación contraria es relativamente sencilla de realizar. En los años noventa del siglo XX la psicóloga estadounidense Elizabeth Loftus diseñó un elegante experimento que demostró la posibilidad de implantar recuerdos falsos en personas adultas perfectamente normales sin recurrir a ninguna técnica agresiva de lavado de cerebro. Loftus seleccionó a veinticuatro personas a las que entregó un informe en el que se relataban sucintamente cuatro recuerdos de su infancia: tres de ellos —obtenidos gracias a la complicidad de algún familiar— eran verdaderos, mientras que el cuarto nunca había tenido lugar (una historia acerca de cómo esa persona se había perdido de niña en un centro comercial). Loftus les pidió que dijeran si se acordaban o no de cada uno de los cuatro episodios y, en caso de que la respuesta fuera afirmativa, que hablaran sobre lo ocurrido. Lo sorprendente no fue tanto que el veinticinco por ciento de las personas que participaron en el experimento aseguraran que el recuerdo falso había sucedido realmente, sino que lo adornaron con toda clase de detalles y lo relataron con auténtica emoción. Otros experimentos similares alcanzaron porcentajes de hasta el cincuentapor ciento de éxito en la inducción de falsos recuerdos.

El trabajo de Loftus tuvo una enorme repercusión pública porque rebatió la teoría de los recuerdos reprimidos, que durante la década de los ochenta justificó en Estados Unidos una avalancha de juicios por abusos sexuales a menores. En aquellos años miles de personas acudieron a los tribunales tras recordar en el transcurso de algún tipo de terapia psicológica supuestas agresiones que habían enterrado en un rincón de su mente. Loftus cuestionó la autenticidad de esos recuerdos con el argumento, bastante verosímil, de que la gente que ha padecido experiencias traumáticas no suele olvidarlas, más bien las recuerda obsesivamente.

Loftus se convirtió en una figura conocida y muy polémica. Fue acusada, no sin parte de razón, de ponerse del lado de los agresores y en contra de las víctimas y se ganó la enemistad de sus compañeros de profesión. Incluso llegó a recibir amenazas y tuvo que contratar guardaespaldas. Sin embargo, como recordaba el neurólogo Oliver Sacks, los experimentos de Loftus tienen también una lectura optimista. La fragilidad de nuestro sistema de memoria, tan concupiscente y poco fiable, tal vez sea un ingrediente importante de la imaginación y la empatía. Nuestro cerebro es un órgano voraz, y no muy escrupuloso, que digiere las experiencias ajenas, reales o no, y las incorpora a su propio acervo. «La indiferencia sobre las fuentes —escribía Sacks—, nos permite asimilar lo que leemos, lo que nos cuentan, lo que dicen otros y pensar, escribir y pintar, de una forma tan rica y tan intensa como si fuesen experiencias primarias.»

Creo que, al menos en parte, esas palabras se pueden aplicar a nuestra relación con la historia y las ciencias sociales, que también son sistemas muy frágiles. Un verano coincidí con unos amigos catalanes en un pueblo a orillas del Cantábrico. Cada día, sus dos hijos observaban fascinados los cambios en las mareas, que en el norte de España son muy vivas. A veces el mar apenas dejaba una pequeña franja de arena y otras mañanas el agua se había retirado más de cien metros. Un día nos preguntaron: «Pero aquí cuando el mar está normal, normal, ¿dónde está?». Algo parecido pasa con las ciencias sociales. Como nuestra memoria, la historia, la sociología, la economía o la psicología recuerdan un poco al estado de duermevela en el que, a diferencia de lo que ocurre en los sueños, aún sabemos que existe la diferencia entre la realidad y la fantasía, entre la verdad y el error, pero es una distancia de grado, sutil y engañosa. Los hechos históricos nunca están «normal, normal». No forman una roca madre a la que podemos acceder tras ir levantando capa tras capa de sedimentos y ganga.

La cara amable de esta limitación es que también las ciencias sociales se han incorporado a nuestras vidas como si fueran experiencias primarias, recuerdos personales, pasiones desatadas. Conceptos como «clase social», «trauma» o «solidaridad» forman parte de nuestro vocabulario íntimo, de la forma en que nos entendemos a nosotros mismos y aquello que aspiramos a ser individual y colectivamente. La razón es que vivimos en sociedades opacas, que exigen ser explicadas y transformadas. Los grandes cataclismos que agitan nuestras vidas no son sólo fenómenos naturales —malas cosechas, enfermedades o terremotos—, sino, sobre todo, procesos sociales misteriosos —como la desigualdad o las crisis económicas— que necesitamos entender.

Este libro explora ese terreno pantanoso en el que se unen historia, vida y ficción. Es una historia personal del capitalismo a través de algunos textos literarios muy heterogéneos. La palabra clave aquí es «personal». No he intentado analizar sistemáticamente, con herramientas filológicas rigurosas, el modo en que la historia de la literatura se entrelaza con la evolución de la sociedad capitalista. Tampoco uso los textos literarios como fuente de información para analizar fenómenos históricos complejos. Más bien he intentado trazar una crónica ficticia de los dilemas políticos de nuestro tiempo mediante novelas, poesías y obras de teatro.

A lo largo de la historia, las clases dominantes se han distinguido por su paupérrima imaginación política. Los miembros de las élites siempre han estado plenamente convencidos de que el sistema político cuya cúspide ocupaban —ya fuera el esclavismo, el feudalismo o la tiranía— era inconmovible y la única alternativa al caos. Se dice que Luis XVI llevaba desde adolescente un diario donde reflejaba sus preocupaciones cotidianas. La caza era su actividad favorita, así que en sus cuadernos se describen minuciosamente los animales que abatió (concretamente, 189.251 piezas en trece años). También merecen su atención las audiencias que concedió y las enfermedades que padeció, como indigestiones, catarros y ataques de hemorroides. Cuando no salía a cazar, no tenía audiencias ni padecía ninguna enfermedad, Luis XVI se limitaba a escribir en su diario: «nada». Lo curioso es que en todas las fechas famosas de la Revolución francesa aparece esa palabra. Lo único que tiene que decir el monarca a propósito de algunas de las transformaciones políticas de mayor impacto de la historia de la humanidad es «nada».

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura»

Mira libros similares a Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura»

Discusión, reseñas del libro Capitalismo canalla: Una historia personal del capitalismo a través de la literatura y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.