Antonio Agustín Gómez Yebra - ¡303 Adivinan...zas!

Colección Labericuentos Serie verde 303 ¡adivinan…zas! Colección dirigida por: Ana Belén Valverde Elices Diseño de la cubierta: Más!gráfica Imagen de la cubierta: Anna María Hermoso Quinto Primera edición revisada en esta colección: junio 2010 © Del texto: Antonio A. Gómez Yebra Ilustraciones: Anna María Hermoso Quinto © 2002, 2010 EDICIONES DEL LABERINTO, S.L. www.edicioneslaberinto.es laberintoinfantilyjuvenil@edicioneslaberinto.es Teléfono: 91 310 28 26 - Fax: 91 310 28 30 ISBN: 978-84-1330-800-5 Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública y trasformación de esta obra sin contar con la autorización de los titulares de propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (arts. 270 y sigs., Código Penal). El Centro Español de Derechos Reprográficos (www.cedro.org) vela por el respeto de los citados derechos.

Libro Solidario Desde 1995, el 0,7 de los beneficios empresariales se destinan a proyectos de desarrollo en el Tercer Mundo a través de Organizaciones No Gubernamentales. FICHA PARA BIBLIOTECAS: GÓMEZ YEBRA, Antonio 303 ¡Adivinan… zas! / Antonio Gómez Yebra ; ilustraciones, Anna María Hermoso Quinto – 2.ª ed. – Madrid : Ediciones del Laberinto, 2010 96 p. : il. n. – (Labericuentos. – (Labericuentos.

Serie verde ; 3. A partir de 8 años) ISBN 978-84-1330-800-5 1. Cultura. 2. Investigación. Poesía. 4. Humor. 5. 5.

Inteligencia. I. Hermoso Quinto, Anna María, il. II. Título. III.

Serie Verde 087.5: Literatura infantil y juvenil 821.134.2-1 Literatura española. Poesía A mis ahijados Raquel Pulido, Myriam Molina y Javier Orador. Es azul y es un pescado que tiene un sabor muy grato; se consigue en el mercado bueno, bonito y barato. De la vega de Granada, con apellido murciano, triunfó de forma sonada su Romancero gitano. Es que la vieron escrita en el periódico, debieron pagar por ella un precio módico. De manga era, de manga, ¡en fin! La regadera de mi jardín.

Se pone sobre el colchón, o en ella vive el león con distinta acentuación. El pelo en la barba, rojo; de palo tiene una pata y lleva un parche en el ojo, el… La tienes siempre en el baño y la llevas a la playa, resiste año tras año la… Es el vago más vago de la estación; cuando arranca su máquina entra en acción. No es la pequeña manzana, como pudieras pensar, sino más bien la tisana que has de tomar. Si en mitad del invierno con frío sigo, al salir a la calle uso el… Ni piernas ni patas tiene, pero corre sin parar, solamente se detiene y se diluye en el mar. Una casa diminuta en un sitio algo perdido no se trata de una gruta, sino de un… Tiene copa y no es vajilla ni un equipo ganador, para el pájaro y la ardilla suele ser acogedor. Algo así como una manta de plástico o de papel; sobre la mesa se aguanta pues se trata del… Puede ser de arena, o para guardar dinero; en aquel del parque me siento el primero.

Más fino que un espagueti, más delgado que un fideo, si me lo encuentro en la sopa me mosqueo. «Es una especie de fuente», dijo el sabio cuando la vio prominente sobre el labio. Para guardar el dinero, los libros o alguna carta; no es la mujer del cartero, la lleva mi amiga Marta. Es un pez sin escamas y sin espinas, con sus uñas las llamas trepan colinas. Puedes pensar que es tu amiga, pues se abraza a tu barriga. En el bolsito de noche, en el baño o el tocador; en el armario, en el coche, e incluso en el ascensor.

Todos van en pantalón bien corto y con camiseta, dan patadas a un balón hasta colarlo en la meta. Déjate de rollo con el miedo escénico, tienes mucho rollo de papel… Son seres nacidos en la República China, por la playa están perdidos entre la arena más fina. Largo pedazo de tela que suele colgar del techo; aquel que cosió la abuela está muy bien hecho. Según la ley, es el hombre principal de la familia real después del rey. Sube hasta la boca, llena; regresa al plato, vacía, en la comida, en la cena, cada día. Yo lo paso fabuloso en él sentado, aunque parezca muy soso y anticuado.

Por él subo con el carro que arrastra mi recio burro, juegan las niñas al corro y allí mira un cerro Curro. Con la alergia no te empieza, aunque con chistes podría, o si, estando en la pobreza, te toca la lotería. Es coba lo que le doy para que haga su trabajo, seguro que lo hace hoy con bastante desparpajo. No es un puma de madera, suele andar por la cocina echándole aceite a un huevo o friendo una tortilla. Es cierto tipo de jaula donde no bailan la jota, es cierto tipo de jaula donde alguien te da una nota. Es un pájaro gigante que rueda y a todos flipa; no vuela, tiene bastante con llevar gente en la tripa.

En ella se escucha un disco detrás de otro: saltas y bailas a su ritmo como un potro. Entre el ombligo y la espalda el escocés y la niña cuelgan su… Sobre todo por las noches, en él se guardan los coches. El rato, tras la comida, en que la gente se acuesta y se queda muy dormida se conoce como… Canta en él mi amigo Ciro a veces formando un corro, y yo lo escucho, lo miro y me quedo como un rorro. No he comido yo un bollo de cereal, sino más bien un rollo primaveral. Nace debajo del suelo, no tiene uñas y rasca las nubes que hay en el cielo. Con cebollas, con patatas, picadas y un poco fritas, y unos huevos que bien batas harás tortas redonditas.

Es muy serio si le falla al sheriff de la película; la del niño de la playa con agua es broma ridícula. Debajo de la chaqueta, por encima de la blusa, la policía, aunque aprieta, como precaución lo usa. Entras y sales del baño, las usaste bajo el caño. Como conoce la clave gira por su laberinto y deja entrar al recinto: la… Alegre madrugador que despierta a la mañana con un toque de diana y gestos de cantautor. Trasto por el cual preguntas cuando está tu lápiz romo, y que se conoce como… De pie, sentado en un banco, o en una silla plegable, convierte una tela en blanco en una obra admirable. Si fallara la energía, como la mujer de Lot sin duda se quedaría el… Sólo cuatro tiene un año, pero millares el tren; que no te parezca extraño, pues esa cuenta está bien.

Vive en un lugar extraño con toscas ropas de paño, año tras año, y no engaño, sólo es un ermi… Da vueltas a sus pedales para que no se esté quieta, en pueblos o en capitales monta en una… Agita bien esa cobra que está flotando en el charco, ya verás cómo no sobra nada de nada en el… Aunque suele estar muy sucio le gusta darse un buen baño; no es un rucio ni es un lucio: va en piara, no en rebaño. Es una carta sin sello, sin hache, sin i, sin jota. Anda entre ases, caballos, y reyes, porque es la… La colocas sobre un sello, como Sherlock Holmes, y ¡aúpa! Todo más claro y más bello, estás usando la… Lo hacen correr sus caballos día y noche, y nunca le salen callos en las ruedas, es un… Algo así como una fuente y no es nada diminuta, coloca en ella la gente cualquier género de fruta. Empieza como el arroz que come un chino a diario, termina como el arroz porque es el abe… La más limpia de mi empresa —no se trata de una broma—, me deja sucia la mesa: es la… Es un tipo de soldado que puede a otros mandar, o un terreno adelantado sobre el mar. Creo que todo le falta, dudo que nada le sobre; aunque a veces juega y salta, es un… Entra y sale muy deprisa mientras mi madre la empuja, y el botón a la camisa deja pegado la… Por ella pasa la gente, pasan coches, bicicletas, y menos frecuentemente patinetes y carretas. Tiene forma de mujer y no es jarra, canta si sabes tañer la… A ambos lados de la cara la tiene cualquier oveja; en mi caso está muy clara, pues hablamos de la… Especie de cajetín donde nacen las ideas, y aunque tú no te lo creas, tiene algo más que serrín.