Kristy Motta - Segura y plena: Cómo liderarte para ser la mujer que eres en verdad

La misión de Editorial Vida es ser la compañía líder en comunicación cristiana que satisfaga las necesidades de las personas, con recursos cuyo contenido glorifique a Jesucristo y promueva principios bíblicos.

SEGURA Y PLENA

Edición en español publicada por

Editorial Vida – 2017

Nashville, Tennessee

Este título también está disponible en formato electrónico.

© 2017 por Kristy Motta

Editora en Jefe: Graciela Lelli

Edición: Nahum Saez

Diseño del interior: Luvagraphics

Diseño de la cubierta: Luvagraphics

A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas han sido tomadas de La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional® NVI®. Copyright © 1999, 2015 por Biblica, Inc.® Texto usado con permiso de Biblica, Inc.® Reservados todos los derechos en todo el mundo.

Las citas bíblicas marcadas «RVR1960» han sido tomadas de la Santa Biblia, Versión Reina-Valera 1960 © 1960 por Sociedades Bíblicas en América Latina, © renovado 1988 por Sociedades Bíblicas Unidas. Usada con permiso. Reina-Valera 1960® es una marca registrada de la American Bible Society y puede ser usada solamente bajo licencia.

Las citas bíblicas marcadas «NTV» son de la Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente, © 2010 por Tyndale House Foundation. Usada con permiso.

Todos los derechos reservados. Ninguna porción de este libro podrá ser reproducida, almacenada en algún sistema de recuperación, o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio —mecánicos, fotocopias, grabación u otro—, excepto por citas breves en revistas impresas, sin la autorización previa por escrito de la editorial.

ISBN: 978-0-8297-6765-0

Epub Edition January 2017 ISBN 9780829767667

Categoría: RELIGIÓN/La vida cristiana/mujeres

IMPRESO EN ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA

PRINTED IN THE UNITED STATES OF AMERICA

17 18 19 20 DCI 6 5 4 3 2 1

A mi Padre eterno y perfecto. A mi hermano mayor y Salvador Jesús y a mi guía y consolador el Espíritu Santo.

El significado completo de la vida está en ti.

Al cuerpo de Cristo representado en cada iglesia en la que he tenido el honor de participar.

A cada persona que ha dado su vida en pro del establecimiento del Reino de los Cielos en la tierra.

A mi legado de fe, amor y gracia, mis hijos amados David Esteban y José Adrián.

A mi Papá porque, además de ser Dios, tiene el suficiente tiempo como para educarme, corregirme, formarme y sobre todo amarme. No comprendo aún tu gracia ni tu misericordia, pero es mejor así porque sigue siendo un milagro segundo a segundo para mí.

A mi hogar, mi lugar de refugio, la expresión del cielo pintada en las caritas de mis hijos. David Esteban y José Adrián son guerreros que levantan mis brazos; sus rostros, y su masculinidad en esplendor son motivo de fe y fuerza. Los amo inexplicablemente.

A mi madre bendita, ¿cómo te agradezco tanto? ¡No podré! Tú lo sabes todo… ¡Te amo!

A mi hermana enviada del cielo, Vivi España. Gracias por ser un escudo lleno de promesas de Dios y fortaleza divina. ¡Te amamos tanto!

A mi Sophie, gracias por acompañar mis desvelos y ser los ojos de la excelencia. ¡Te amo!

A Lucas y Vale. Bueno, va a ser difícil decirles cuánto los amo y cuánto les agradezco. Una sola frase lo describe: ¡ustedes son valentía!

A todo el staff de Grupo Ella, son mis hermanas, son mis amigas, compañeras de batalla y aliadas de la fe; las amo.

A ti que tienes este libro… gracias por leerme y poner corazón aun a mis agradecimientos.

Me gustan los journals o diarios, ¡me encantan! Disfruto cada vez que inicio uno, cada vez que me regalan uno y cada vez que regalo uno. El olor a papel nuevo, las hojas aún pegadas esperando ser separadas por tus dedos, los que tomarán un lápiz o una pluma para escribir. Ese papel pronto se vuelve un lienzo, un testigo, un amigo, un compañero, un enemigo. No sé cómo, pero ese elemento tan sencillo pronto se llena de significado, de historia, de vida. No hay nada como la emoción de empezar a escribir. Por eso me gustan los diarios.

Escribir un journal es una manera sencilla de poner atención a nuestras vidas, a los detalles que tejen su trama. En las páginas de un journal podemos describir nuestro andar diario e incluso nuestra relación con Cristo. Allí podemos verter nuestros sentimientos en forma de palabras y nuestras esperanzas.

El significado de cada journal nuevo es especial para mí porque representa etapas, lugares, momentos, estaciones del año y temporadas. Hace poco inicié una versión diferente de journals, uno de cada lugar al que viajo. Se hace mucho más especial si alguien me regala uno porque representará el aprecio de ese alguien por mí. Los diarios representan tiempo valioso, momentos importantes y hechos significativos para alguien en particular.

La vida es un viaje; un peregrinaje de vuelta a casa, una marcha de retorno al lugar de dónde venimos y al que todos necesitamos regresar.

Jesús no se perdió cuando hizo su viaje, puesto que sabía de dónde venía y a dónde volvería. Así lo expresa en el Evangelio de Juan: «... ya que el Padre mismo los ama porque me han amado y han creído que yo he venido de parte de Dios. Salí del Padre y vine al mundo; ahora dejo de nuevo el mundo y vuelvo al Padre» (Juan 16.28).

Acaso, ¿lo sabes tú también? ¿Sabes con certeza a dónde vas? Si solo tienes una vaga idea pero tu corazón necesita un poco más de seguridad, estás en el momento justo para que juntas —tú y yo— hagamos este nuevo journal de nuestro viaje.

En una sociedad viciada por los estereotipos, colmada de paradigmas, y deteriorada —tanto por la lucha de poder como por las ambiciones de alcanzar posiciones— como esta en la que estamos inmersos, nos encontramos las mujeres. Y estamos preguntándonos cómo debemos ser, cómo agradar a Dios, cómo agradar a otros a la vez que nos agradamos a nosotras mismas.

Pareciera que las rígidas estructuras eclesiásticas nos presentan la errónea idea de que para agradar a Dios debemos rechazar nuestra satisfacción personal y, por ende, negarnos a ser nosotras mismas, cuando en realidad a Dios le agrada que seamos nosotras mismas. Cualquier otra versión que adoptemos nos lleva a negarnos a disfrutar su voluntad divina.

Hace varios años inicié mi búsqueda en la Biblia para encontrar las verdades que me permitieran estructurar mis propios conceptos acerca de mí misma y vincularlos con lo que Dios revela a través de su Palabra. Verdades absolutas que son fundamentos sólidos para basar nuestras creencias y a la vez construir junto a Él lo que anhela que descubramos juntos, sin formatos ni moldes humanos.

Lo curioso de este proceso es que en la Biblia encontramos numerosos ejemplos de mujeres utilizadas por Dios en momentos históricos. Y lo más interesante es que no se les impuso un patrón determinado ni tampoco se les requirieron unas características inalcanzables. Todas y cada una de esas mujeres estuvieron en el tiempo y el lugar correctos e hicieron una sola cosa: obedecer. Por eso fueron capaces de dejar sus planes y abrazar la soberanía de Dios.

Es así que, desde el momento en que nacemos, se empieza a desarrollar nuestra matriz de interpretación, es decir, los lentes con los que observamos nuestro entorno. Mucho de lo que pensamos que Dios cree de nosotras es más lo que nos enseñaron que Él cree, pero no exactamente lo que la Biblia dice que cree. Esa es la razón por la cual podemos estar perdiendo años de vida limitándonos a disfrutar la libertad gloriosa de ser hijas de Dios. Simple y sencillamente porque esa matriz —conformada por los antecedentes familiares, la cultura, la profesión, la sociedad y las creencias adquiridas— distorsiona lo que realmente somos y lo que Dios piensa de nosotras.