En este seminario (1956-1957) Lacan trasciende una relación dual entre el sujeto y el objeto. Plantea la relación de objeto en términos de falta y de pérdida, lo cual da tres modalidades relacionales, jerarquizadas según los tres registros (real, simbólico e imaginario): la privación (la falta real de un objeto simbólico), la frustración (la falta imaginaria de un objeto real) y la castración (la falta simbólica de un objeto imaginario).
Jacques Lacan
Libro 4. La relación de objeto
1956-1957
El Seminario de Jacques Lacan - 04
ePub r1.0
Titivillus 31.03.16
Título original: Le Séminaire de Jacques Lacan, Livre IV. La relation d’objet
Jacques Lacan, 1994
Traducción: Enric Berenguer
Texto establecido por Jacques Alain-Miller
Editor asociado: Juan Granica
Diseño de la portada: Spleen
Editor digital: Titivillus
ePub base r1.2
JACQUES-MARIE ÉMILE LACAN (París, 13 de abril de 1901 —ídem, 9 de septiembre de 1981) fue un médico psiquiatra y psicoanalista francés conocido por los aportes teóricos que hiciera al psicoanálisis basándose en la experiencia analítica y en la lectura de Freud, incorporando a su vez elementos del estructuralismo, la lingüística estructural, la matemática y la filosofía.
Sus aportes los define él mismo como un «retorno a Freud» y a sus teorías, por un lado, y como su radicalización, nueva interpretación («Freud contra Freud») o desarrollo ulterior, por otro. Lacan buscó reorientar el psicoanálisis hacia la obra original de Freud, ya que consideraba que el psicoanálisis post-freudiano se había desviado cayendo en una lógica a veces biologicista, u objetivadora del sujeto propio del psicoanálisis. Lacan acusó a muchos de los psicoanalistas coetáneos por haber distorsionado y parcializado la teoría de Freud. Reinterpretó y amplió la práctica psicoanalítica. Incorporó además a nivel teórico nociones de origen lingüístico, filosófico y topológico que lo llevaron a redefinir muchos de los principales términos del léxico psicoanalítico y, por ejemplo, a formular la tesis: «El inconsciente está estructurado “como” un lenguaje».
Su obra, lejos de haber cosechado aceptación universal, es fuente de grandes controversias (incluso dentro de la comunidad psicoanalítica). Los filósofos Slavoj Žižek y Alain Badiou han sido algunos de sus más fuertes defensores. En contrapartida, Lacan fue objeto de críticas epistemológicas de los físicos Alan Sokal y Jean Bricmont así como del lingüista Noam Chomsky, y filosóficas por parte de Jacques Derrida y de autores feministas. Más allá de las críticas, resulta indiscutible su fuerte influencia en la práctica del psicoanálisis en algunos países europeos y latinoamericanos.
Notas
[1]… est la doblare… puede entenderse como «forro» o como «doble», en el sentido en que un actor dobla a otro en escena. (T.)
[2] Se alude a personajes reales del circo. Chocolat era un payaso de tez oscura y el señor Loyal un regidor de pista. (T.)
[3]Envie. (T.)
[4] En francés, ultime evoca la muerte (T.)
[5]Se refusser. También en el sentido de «dar calabazas». (T.)
[6]Fait-pipi. En adelante, cuando Lacan se refiere a petit Hans, lo llamaremos «Juanito», siguiendo la tradición instaurada por Ballesteros. En los casos en que Lacan dice sólo Hans, suprimimos el diminutivo. (T.)
[7]Attelage. Es el término que en adelante se utilizará para el caballo y los medios de transporte. (T.)
[8]appartenances: el plural de appartenance («pertenencia») tiene también el sentido de «dependencias», referido a las «dependencias de un edificio o finca». «Pertenencias» también permite un uso similar en español, pero es menos acentuado. (T.)
[9] Dibujante de gusto dudoso, que dibuja mujeres desmesuradas y señores pequeñitos. (T.)
[10]Néantisation. (T.)
[11]Appartenances. También «dependencias». Véase nota pág. 99. (T.)
[12] En adelante, Lacan utiliza el término leurre («señuelo») y sus derivados. Ante la imposibilidad de emplear un término único, se ha recurrido a distintas fórmulas, procurando evitar el verbo «engañar», por homonimia con la traducción del término tromper, que se suele emplear en otro sentido en este seminario. Leurrer: «hacer trampa»; de leurre: tramposo/a; leurrant: «engañoso»; leurre: «señuelo», «trampa» o «ilusión». Todos estos términos se incluyen en el campo semántico de leurre, y los matices quedan claros por el contexto. Trompeur se ha traducido como «falaz». (T.)
[13] Equívoco entre Tu es celui que tu es y Tu es celui qui tuais. (T.)
[14]Les affections, dans les deux sens du terme. (T.)
[15]Reçue es tanto «recibida» como «admitida», «aceptada». (T.)
[16]Parade/pariade (T.).
[17]Ah, le bon billet qu’a La Châtre! (en este caso, le petit Hans), evoca una promesa de fidelidad escrita y rota estrepitosamente por Ninon de Lenclos. (T.)
[18] Aquí y más adelante se juega con los dos sentidos de impasse: «obstáculo» y «salto», como en faire l’impasse sur, «saltarse». (T.)
[19] El término drôle es tanto «curioso», «divertido», como «raro», «extraño» o «dudoso». (T.)
[20] C… = con, palabra soez con el significado de «tonto». (T.)
[21] Homofonía entre un signifiant y insignifiant. (T.)
[22]Impasse. Ver nota pág. 293.
[23]Les embarque, literalmente, «los embarca». (T.)
[24]Pince. En los párrafos siguientes se juega con los distintos sentidos del término en francés, «pinzas» o «tenazas». (T.)
[25]Mis en boîte, literalmente, «metido en una caja». Tiene el sentido de «tomar el pelo» o «burlarse». (T.)
[26]Manque-a-être. (T.)
TEORÍA DE LA FALTA DE OBJETO
Los croquis de las paginas 265 («La jirafa con el hacepipí»), 313 («La rampa de carga») y 327 («La Untere Viaductgasse») se han tomado de «Analyse der Phobie eines 5-Jährigen Knaben», vol. 7 de las Gesammelte Werke de Sigmund Freud, publicadas por S. Fischer Verlag (Frankfurt am Main) (© 1941, Imago Publishing Co., London).
El plano de Viena (págs. 442-443) proviene de la edición de 1905 de la guía Baedeker Austria-Hungría, cuya portada reproducimos en pág. 441.
I
INTRODUCCIÓN
El esquema en Z.
El objeto perdido y vuelto a encontrar. Perlas.
El objeto, la angustia, el agujero.
El fetiche y el objeto fóbico.
Este año hablaremos de un tema que en la evolución histórica del psicoanálisis, o lo que así suele llamarse, podría adquirir, de forma articulada o no, una posición central en cuanto a la teoría y a la práctica.
Este tema es la relación de objeto.
Si ya era actual, primordial, crítico, ¿por qué no lo elegí cuando dimos comienzo a estos seminarios? Precisamente por la razón que constituye el motivo de la segunda parte de mi título, y las estructuras freudianas.
En efecto, este tema sólo se podría tratar después de haber tomado cierta distancia con respecto a esta cuestión. Primero teníamos que preguntarnos qué constituye a las estructuras en las que Freud nos mostró que el análisis se mueve y opera, y muy especialmente la estructura compleja de la relación entre los dos sujetos presentes en el análisis, o sea el analizado y el analista. A esto se consagraron nuestros tres años de comentarios y de críticas de los textos de Freud, que voy a recordarles brevemente.