• Quejarse

Emilio Gentile - La mentira del pueblo soberano en la democracia

Aquí puedes leer online Emilio Gentile - La mentira del pueblo soberano en la democracia texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 2018, Editor: Alianza Editorial, Género: Historia. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

No cover
  • Libro:
    La mentira del pueblo soberano en la democracia
  • Autor:
  • Editor:
    Alianza Editorial
  • Genre:
  • Año:
    2018
  • Índice:
    3 / 5
  • Favoritos:
    Añadir a favoritos
  • Tu marca:
    • 60
    • 1
    • 2
    • 3
    • 4
    • 5

La mentira del pueblo soberano en la democracia: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "La mentira del pueblo soberano en la democracia" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

La sociedad occidental moderna ha hecho de la democracia basada en la soberanía del pueblo la clave de bóveda de su sistema político. Fueron los Estados Unidos nacidos de la Guerra de Secesión quienes dieron la pauta para esta forma de gobierno «del pueblo, por el pueblo y para el pueblo» cuyo concepto ha acabado imponiéndose. Sin embargo, en las democracias actuales (apunta el prestigioso historiador Emilio Gentile en este combativo libro), el pueblo soberano no es más que una comparsa que interviene, muy encauzada, tan sólo en el momento del voto, observación no por redundante menos necesaria. En realidad prevalecen las oligarquías de gobierno y de partido, la corrupción de la clase política, la demagogia de los líderes, la apatía de los ciudadanos, la manipulación de la opinión pública, la degradación de la cultura política y de los anuncios. La democracia está enferma. ¿O no? ¿Y si todos estos rasgos perversos de las democracias (se pregunta el autor) no fueran contingentes, sino congénitos?

Emilio Gentile: otros libros del autor


¿Quién escribió La mentira del pueblo soberano en la democracia? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

La mentira del pueblo soberano en la democracia — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" La mentira del pueblo soberano en la democracia " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer
Emilio Gentile La mentira del pueblo soberano en la democracia Índice Por - photo 1

Emilio Gentile

La mentira del pueblo soberano en la democracia

Índice Por qué este libro El Genio del libro que vais a leer cansado de ser - photo 2

Índice
Por qué este libro

El Genio del libro que vais a leer, cansado de ser un receptor pasivo de las palabras que el Autor escribe en sus páginas, comienza una conversación para saber cuál será el argumento, y el Autor responde que tiene intención de proponer algunas reflexiones sobre la democracia y el pueblo soberano, en un momento en el que las democracias actuales dan muestras de sufrir un grave malestar; malestar que está transformando la democracia representativa en una democracia recitativa, en la que al pueblo soberano se le asigna solo el papel de comparsa en el momento de las elecciones.

* * *

¿Qué tienes intención de escribir en mis blancas páginas?

Algunas reflexiones sobre la democracia y sobre el pueblo soberano. Democracia significa poder del pueblo. Si el poder pertenece al pueblo, el pueblo es el titular de la soberanía. Así, pues, en un Estado democrático el pueblo es soberano y ningún gobernante puede estar por encima del pueblo o fuera del pueblo. De la voluntad de los gobernados deriva toda autoridad de los gobernantes. Es el pueblo el que elige y revoca a sus propios líderes, según el método de libres, pacíficas y periódicas elecciones.

Así, pues, para ti la democracia coincide con la soberanía del pueblo, que elige a sus representantes y a sus gobernantes.

Así se entiende hoy la democracia. Pero hay muchas definiciones de democracia, algunas sencillas, otras muy complejas.

Casi siempre, a la democracia la acompaña un adjetivo, que especifica sus peculiaridades como ideal y como método de expresión de la voluntad popular: democracia directa, representativa, deliberativa, participativa, liberal, oligárquica, popular, y otras.

Algunas definiciones prescinden incluso de referencias explícitas al pueblo soberano. Por ejemplo, según el economista austriaco Joseph Alois Schumpeter, la democracia consiste en «un método político», en el sentido de que es un instrumento constitucional para llegar a decisiones políticas, legislativas y administrativas, «en base al cual ciertos individuos obtienen el poder de decidir a través de una competición que tiene por objeto el voto popular».

Raymond Aron afirmó en 1960 que no estaba «seguro de que exista una democracia en el verdadero sentido de la palabra», porque si «conviene llamar así al poder del pueblo, se puede llamar democrático a cualquier régimen, incluido un régimen totalitario que se apoya en la voluntad popular». Por lo tanto, el sociólogo francés concretaba que «en el mundo en que vivimos, si se habla de democracia moderna, y no de la ateniense, los caracteres fundamentales de los regímenes democráticos son, precisamente, las elecciones, el régimen representativo, la lucha entre partidos y la posibilidad de cambio pacífico de gobierno». A esta definición de democracia me atendré a lo largo de nuestra conversación.

¿Crees que vas a poder decir algo nuevo y original sobre la democracia?

No pretendo decir cosas originales, sino solo indagar si es verdad que en la democracia el pueblo siempre es soberano, hoy que la democracia parece triunfante en el mundo, donde casi todos los gobiernos afirman ser democráticos, y casi todas las constituciones de los Estados existentes declaran que la fuente de todo poder es el pueblo soberano.

Y ¿por qué crees que vas a poner en tela de juicio estas afirmaciones?

Porque temo que no sean más que palabras bonitas en un momento en el que, según muchos observadores, la democracia representativa está enferma, y son muchas las insidias que tratan de privar al pueblo de su soberanía. Entre todos los defectos que hoy se atribuyen a la democracia, a los gobernantes y al pueblo soberano mismo, pienso que los peores son la hipocresía, la mentira, el engaño y todo aquello que puede resumirse emblemáticamente en la palabra idola –que es el emblema de la colección en la que vas a aparecer–, referida a todo lo que produce una falsa o ilusoria percepción y comprensión de la realidad tal como es.

En el curso de nuestra conversación mostraré en qué sentido considero falsa la afirmación de que en democracia el pueblo es siempre soberano, citando ejemplos extraídos de la historia de la conquista de la soberanía popular. Sin embargo, procederemos en sentido inverso al curso de la historia: comenzaremos a andar desde el comienzo del siglo XXI , cuando la democracia resulta triunfante en el mundo con la derrota de sus enemigos, para remontarnos en el tiempo hasta el período de los orígenes, a las revoluciones democráticas del siglo XVIII , que fueron el inicio de la larga lucha para la conquista de la soberanía por parte del pueblo. En las conclusiones volveremos a la historia del pasado más reciente, a los primeros quince años del primer siglo del tercer milenio, deteniéndonos, en particular, en el estado de salud de la democracia italiana.

He elegido empezar con el ejemplo de la Organización de las Naciones Unidas porque es el más emblemático del éxito del pueblo soberano en el mundo contemporáneo, confirmado, como veremos, por la repentina y rápida multiplicación de los Estados considerados democráticos en el último cuarto del siglo XX .

Pero luego veremos cómo, en el momento mismo en que la soberanía popular parece triunfante, en las democracia reales se han manifestado los síntomas de un malestar: el principal y el más alarmante de todos es la desilusión, la desafección, la desconfianza del pueblo soberano respecto a los gobernantes, a las instituciones democráticas, a los partidos, junto a la cada vez más difusa convicción, en el propio pueblo, de que ya no es soberano.

De los ejemplos que citaré, resultará evidente que la enfermedad de las democracias actuales tiene su origen, sin duda, en acontecimientos y condiciones recientes, pero no es un fenómeno del todo nuevo, porque ya se ha manifestado otras veces en la historia de la democracia moderna, desde sus orígenes con la revolución norteamericana y la revolución francesa. En ciertos aspectos, podríamos decir que la democracia, por su propia naturaleza, vive en un estado de crisis permanente, porque constantemente debe renovarse para adaptarse a las nuevas situaciones, con frecuencia imprevistas, en las que el pueblo soberano ha de vivir.

Comenzaré haciendo una comparación, de forma emblemática, entre la Organización de las Naciones Unidas y el pacto de la Santa Alianza, para mostrar qué extraordinario progreso ha realizado en doscientos años la conquista de la soberanía popular. Pero veremos también qué sombras de hipocresía han envuelto y siguen envolviendo la conducta de quienes declaran gobernar en nombre de y por la voluntad del pueblo soberano. Y veremos, finalmente, cómo estas sombras se han ido haciendo cada vez más largas en los años más recientes, precisamente cuando el triunfo de la democracia, al difundir por el mundo el halo luminoso de su ideal, prometía disolver las sombras.

En cambio, hoy parece que la sombra de la hipocresía democrática se va extendiendo con la representación escenográfica de una democracia recitativa, que tiene como escenario al Estado, como actores protagonistas a los gobernantes y como comparsa ocasional al pueblo soberano, que entra en el palco solo para la escena de las elecciones, mientras que el resto del tiempo asiste al espectáculo como público. La democracia recitativa parece ser el próximo resultado de la crisis de la soberanía popular precisamente en la «era de la democracia», como la definió Norberto Bobbio a finales del siglo XX .

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «La mentira del pueblo soberano en la democracia»

Mira libros similares a La mentira del pueblo soberano en la democracia. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «La mentira del pueblo soberano en la democracia»

Discusión, reseñas del libro La mentira del pueblo soberano en la democracia y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.