Camille David - La guerra de Palestina de 1948

Fotografía de David Ben Gurion, 1949.

David Grün, llamado «David Ben Gurion», es un hombre político israelí, fundador del Estado de Israel, donde ocupa el puesto de primer ministro de 1948 a 1953 y de 1955 a 1963. Es una de las grandes figuras que han marcado la historia de Israel.

Nacido en Płońsk (Polonia), David Ben Gurion se instala en Palestina con 20 años pero los turcos lo expulsan del país en 1915. De vuelta en 1917, funda el primer sindicato de los trabajadores israelíes (Histadrut) en 1921, antes de convertirse en secretario general del Partido de los Trabajadores israelíes (Mapai). Asimismo, se convierte en responsable político del Yishuv (término que designa la comunidad judía de palestina en la época del mandato británico). Presidente de la Agencia judía a partir de 1935 —uno de los órganos políticos encargados de la administración del Yishuv— es también el líder de la fuerza armada Haganá, que se encuentra bajo el mando de la Agencia Judía.

Gurion se encuentra en el origen del rechazo a los planes de partición que la ONU propone en 1947 y 1948, y de la declaración de independencia del Estado hebreo el mismo año. Ministro de Defensa, dirige igualmente las Fuerzas de Defensa de Israel que crea en 1948 a partir de varios grupos armados. Incita a sus soldados a combatir y sigue de cerca las operaciones militares de las fuerzas israelíes. A este líder incontestable del bando judío se deben todas las decisiones políticas y militares importantes tomadas por el Estado israelí durante la guerra.

En 1963, se retira de la vida política y fallece en Tel Aviv en noviembre de 1973.

Fotografía de Abdalá I, rey de Jordania.

Abdallah ibn Hussein o Abdalá I de Jordania nace en la Meca en 1882. Es emir y luego rey de Transjordania de 1921 a 1949 y finalmente rey de Jordania de 1949 a 1951, año de su asesinato en Jerusalén por nacionalistas palestinos. Es el hijo de Hussein ibn Ali (circa 1856-1931), jerife de la Meca, rey del Hiyaz (región situada en el oeste de Arabia Saudí) y uno de los promotores de la revuelta árabe de 1916 contra los turcos. Abdalá I es el líder de una Transjordania bajo mandato británico que, a pesar de la proclamación de su independencia, se convierte en su único aliado en el Oriente Medio durante la guerra de Palestina.

Antes de la entrada en guerra en 1948, lo nombran a título honorífico comandante en jefe del Ejército de Liberación de la Liga Árabe. El papel que desempeña durante la guerra de Palestina es importante: lidera el mejor ejército del campo árabe, la Legión árabe. Sus tropas están en todos los frentes, aunque se concentran esencialmente en Cisjordania y Jerusalén. Pero además de su importancia militar, Abdalá I ejerce una gran influencia política y diplomática. Su ambición es crear un gran Estado Árabe, la «Gran Siria», que agruparía Transjordania, Palestina, Siria y Líbano, y gracias a su ejército bien entrenado, tiene los medios para cumplir su sueño.

Sus intenciones respecto al Estado judío resultan, sin embargo, ambiguas: afirma que se opone a la creación de un Estado israelí, pero busca antes que nada impedir la de un Estado palestino para conseguir él mismo territorios. Así, quiere anexar Cisjordania, conformemente con un acuerdo aprobado en secreto con la ministra israelí de Asuntos Exteriores, Golda Meir (1898-1978). Este pacto estipula, efectivamente, que la Legión Árabe no entrará en conflicto con Israel más allá de Cisjordania, una vez el territorio haya sido conquistado. Transjordania reivindica esta región porque está formada por cerca de un 70 % de palestinos: Abdalá I querría integrarla a su país, bajo el pretexto de que se trata de un mismo pueblo. Pero sus ambiciones territoriales evidentes crean desconfianzas y desacuerdos en el propio campo árabe, especialmente en el líder de Siria y Egipto.

El rey Abdalá I, por sus ambiciones territoriales, su importancia militar y su actitud ambigua resultante de acuerdos secretos, es uno de los personajes más importantes del bando árabe durante la guerra de Palestina.

La guerra de Palestina transcurre entre Israel y los países árabes vecinos, tras la proclamación de independencia del Estado judío y la derrota de los palestinos. Las fuerzas militares presentes durante este conflicto son:

• para el bando judío, las Fuerzas de Defensa de Israel;
• para el campo árabe, grupos palestinos integrados en los ejércitos vecinos (como la Jaysh-al-Jihad al-Muqaddas o Santo Ejército), en los ejércitos de estado (como el de Transjordania, la Legión Árabe), en los de Irak, Egipto, Siria, Líbano y Arabia Saudí así como en el Ejército de Liberación árabe formado por voluntarios y organizado por la Liga árabe.

¿Sabías que…?

Las Fuerzas de Defensa de Israel fueron creadas el 26 de mayo de 1948 y en hebreo se llaman Tzáhal. Antes de la existencia del Estado judío, las fuerzas encargadas de defender al pueblo sionista eran grupos armados independientes como la Haganá, creada en los años veinte con el objetivo de defender a los emigrantes judíos contra los potenciales ataques árabes. La Haganá se encuentra en la base de la creación de las Fuerzas de Defensa de Israel y en 1948 se le unen otras fuerzas armadas clandestinas como el Leji y el Irgún.

La Legión árabe de Transjordania está formada, durante la guerra Palestina, por alrededor de 10 000 hombres repartidos en cuatro regimientos y con el soporte de 75 blindados. Dirigida por oficiales británicos, el ejército es experimentado y está bien equipado.

Esta guerra se desarrolla en varias etapas y está marcada por dos periodos de tregua.

Del 15 de mayo al 11 de junio de 1948, las fuerzas árabes pasan a la ofensiva tras la proclamación de independencia de Israel:

• en el frente central (alrededor de Jerusalén), el más activo durante la guerra, la batalla de Jerusalén enfrenta a los israelíes con la Legión Árabe transjordana. La toma del barrio judío de la Ciudad Vieja representa una importante pérdida en el plano simbólico. Los ejércitos transjordanos, que no pueden entrar en él por la fuerza, asedian otros barrios judíos de Jerusalén. En los pueblos de los alrededores —en especial en Latrún— tienen lugar varias batallas para hacer aprovisionar a la ciudad de hombres, material y alimentos, necesarios para los israelíes. Estas operaciones resultan igualmente útiles para mantener vías de comunicación entre las regiones que controlan. Las tropas transjordanas también se concentran en Samaria para tomar el control político de la región y anexionarla. A continuación, los iraquíes las reemplazan en algunas ciudades para permitirles concentrarse en Latrún y Jerusalén;
• en el frente noreste (alrededor del lago de Tiberíades) se encuentran las tropas sirias y transjordanas, pero esta región sigue bastante tranquila;
• en el frente norte (en Galilea), controlado por componentes del Ejército de Liberación árabe, la situación territorial evoluciona poco y los israelíes, aunque con una ventaja en esta región, no llegan a sacar provecho de ella para reforzar su enclave en Galilea central y conectar Nazaret.
• en el frente sur (en la región del Néguev), el ejército egipcio no encuentra demasiada oposición y se despliega en tres direcciones: a lo largo de la costa (la actual franja de Gaza), al norte del Néguev y hacia Judea, donde la presencia judía es bastante débil, lo que facilita el despliegue de los egipcios así como el de los transjordanos, que tienen objetivos expansionistas en la región.