• Quejarse

Miguel Sosa - El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto

Aquí puedes leer online Miguel Sosa - El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 2015, Género: Historia. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

Miguel Sosa El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto
  • Libro:
    El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto
  • Autor:
  • Genre:
  • Año:
    2015
  • Índice:
    3 / 5
  • Favoritos:
    Añadir a favoritos
  • Tu marca:
    • 60
    • 1
    • 2
    • 3
    • 4
    • 5

El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

Miguel Sosa: otros libros del autor


¿Quién escribió El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer
ÍNDICE Los sabios hablan porque tienen algo que decir Los estúpidos - photo 1
ÍNDICE
Los sabios hablan porque tienen algo que decir. Los estúpidos hablan porque tienen que decir algo. P LATÓN
Para Nuria y Alicia, con el amor de siempre. Y para Elena, con el de casi siempre.
PRÓLOGO
Querido lector: si has pensado que un libro como este no necesita un prólogo estás tan equivocado como el funcionario que aconsejó a Kennedy no poner capota al coche. Porque para entender bien este libro debes conocer primero al personaje que lo ha escrito, en adelante, «el autor».

Miguel Sosa, «Sosa». para los amigos. Este ínclito personaje fue director de comunicación de la Compañía Nacional de Teatro Clásico a los veintisiete años, siendo director de la misma Adolfo Marsillach. Formar parte del equipo directivo de Marsillach a esa edad tan temprana supongo que además de una responsabilidad es una excelente oportunidad de desarrollo. Antes ya había sido fundador del Festival de Otoño de Madrid y si hay una persona que sabe de teatro, ése sin duda es Sosa. Es un lector impenitente, capaz de devorar cualquier libro de una sentada, y se nota, vaya si se nota.

Es incapaz de leer un libro y no encontrar una errata, que por supuesto comunica a la editorial de inmediato para que la corrijan, él es así. Lo conocí siendo director del Teatro Bulevar de Torrelodones. Yo era un incipiente mago y trabamos buena amistad. Él me contrataba para hacer reír al personal y la verdad es que lo conseguía con creces... salvo una rara excepción: siempre había una persona en el patio de butacas que me miraba impertérrito sin esbozar sonrisa alguna. ¿Quién podía ser aquel extraño personaje al que le costaba sonreír?: el amigo Sosa.

Años más tarde descubrí que Sosa es como Buster Keaton, con su solemne cara de palo, no es que no le guste sonreír, es que le gusta observar hasta el más mínimo detalle y yo creo que si sonríe seguro que algo se le escapa. Esa pasión por el detalle la lleva hasta sus últimas consecuencias y por supuesto la vas a ver reflejada en este libro. Por cosas del destino empezamos a trabajar juntos y es mi mano derecha, de hecho a él le gusta definirse como mi «avatar»; nada más empezar a trabajar juntos le dije que lo iba a alejar del mundo de la cultura porque la cultura no lo iba a sacar de pobre. Después de tantos años de relación laboral se puede decir que no sólo no he conseguido alejarlo de la cultura sino que he sido fagocitado por él. Es imposible hablar con Sosa y no aprender algo. Como él dice, está lleno de conocimientos inútiles, pero siempre tiene la palabra exacta en el momento adecuado.

Al principio piensas que lo hace por vacilar, pero no, lo hace porque sencillamente no sabe utilizar una palabra que no sea exacta para definir una situación, un sentimiento, un objeto. En su afán de culturizar a los amigos creó un grupo de Whatsapp titulado «palabras raras como Sosa», y es que un tipo que se ha leído el diccionario en varias ocasiones, no nos engañemos, es raro de narices. Así pues, cada día nos regalaba una palabra «rara». Palabras de uso normal para él, pero ininteligibles para nosotros. Con el tiempo nos acostumbramos a sus palabras, no eran palabras tomadas al azar del diccionario, eran palabras que en muchas ocasiones tenían que ver con una noticia de actualidad o con una situación concreta. Un día alguien puso en el grupo una foto en un barco y casi instantáneamente apareció la palabra singladura , que es la distancia que recorre un barco en veinticuatro horas.

Otro día le dije que estaba en un cóctel y al momento tenía en mi móvil un mensaje diciéndome que tuviese cuidado con el luquete que no es otra cosa que la rodaja de limón que se echa en la bebida. Dando una charla comenté que hacía ciento cincuenta años Darwin había publicado El origen de las especies y me aconsejó que utilizase la palabra sesquicentenario » que es la palabra exacta para definir esos ciento cincuenta años. Un buen día decidió cerrar el grupo de Whatsapp y nos dejó huérfanos de sus palabras. Probé a buscar en el diccionario, pero no era lo mismo. Nunca encontraba la palabra que quería, siempre eran palabras aleatorias. Más tarde comentó que iba a hacer una edición para los amigos y le dije: «no seas egoísta, este conocimiento tienes que compartirlo» y esa fue la gestación de este libro.

Lo que lo convierte en un gran libro es la selección de citas literarias que acompañan a cada una de las palabras. Entre esas citas encontrarás a más de doscientos autores y doce premios Nobel. Casi nada. Las citas en la mayoría de los casos salen de su portentosa memoria, y es que es increíble que alguien al ver una palabra recuerde el autor, la editorial y el libro donde la leyó hace años. Ese es Sosa. Un hombre cuya memoria sólo ha sido superada por la de Napoleón, hasta el punto de que se han llegado a levantar monumentos a la memoria de Napoleón.

Tal es la inteligencia de Sosa que si hubiera nacido en Estados Unidos... hablaría inglés. Una hebdómada después (período de siete años) debo decir que soy un poquito más culto gracias a Sosa. Y gracias a este libro tú también lo vas a ser, o al menos lo vas a parecer, porque ya sabes que lo importante no es ser más culto sino parecerlo. Si no quieres acabar como mi madre diciendo alcánzame el «éste» que está en el «ése», cuando en realidad quieres decir «alcánzame el cartapacio que está en el anaquel» debes leer este libro. Este es un libro para leer y releer, para disfrutar y para regalar, porque ¿qué otra cosa más bonita se puede hacer que culturizar a todo tu entorno? No seas misoneísta (hostil a las novedades) y zambúllete en la lectura de esta joyita que sin duda disfrutarás, y si no lo haces al menos estarás mucho más preparado para ir a Pasapalabra .

Gracias Sosa, porque gracias a ti soy mejor persona, mejor profesional y muchísimo más culto. Gracias por regalarnos parte de tu sabiduría. M AGO M ORE

INTRODUCCIÓN, PROEMIO, EXORDIO O ISAGOGE
Cuatrocientos veinte millones de hispanohablantes (has leído bien: 420 millones) nos entendemos —o no— con algo más de 90.000 palabras (de promedio usamos unas 5.000). recoge, en efecto, un total de 93.111 palabras; nuestro primer diccionario, nacido en 1780, contenía 46.000. El idioma, como se puede ver, es algo vivo, mudable y en constante evolución. De las 93.111 palabras de nuestro DRAE he seleccionado (caprichosamente) 500 para ti.

Son palabras en uso aunque no sea frecuente encontrarlas ni escritas ni oídas. No encontrarás palabras anticuadas (aquellas cuya última documentación no es posterior al año 1500: galicinio: parte de la noche próxima al amanecer); ni tampoco palabras en desuso (posteriores a 1500 y hasta el año 1900: mendocino, na: que cree en agüeros, supersticioso). Ya digo que son 500 palabras tamizadas por mi capricho y que del mismo modo que no te toparás con palabras condenadas a su desaparición, tampoco encontrarás dialectismos españoles ( filandón: León. Reunión nocturna de mujeres para hilar y charlar), ni voces de Filipinas ( achara: encurtido), ni de América ( samuelear: C. Rica. Dicho de un hombre: Contemplar o tratar de verle las partes sexuales o los muslos a una mujer).

Son 500 palabras comunes a todos, sin prevalencia geográfica. Se sabe que en tres o cuatro generaciones el 10 por ciento de la población mundial hablará nuestro idioma; en el año 2050 el primer país hispanohablante será EE.UU. Y sí: habrá que acostumbrarse una vez más a este gozoso mestizaje de las palabras. Ya lo hicimos, por poner un ejemplo, con jonrón (del ingl. home run : Am. En el béisbol, jugada en que el bateador golpea la pelota de tal manera que le permite hacer un circuito completo entre las bases y ganar una carrera).

Si se nos acostumbra al oído conviviremos (aunque de momento nos parezca horrísona) con la tan repetida en y por los medios de comunicación amigovio , obviando o ignorando (no sé qué es peor) que ya el DRAE recogía: marinovio, via m. y f. coloq. Cuba. Persona con quien se mantiene una relación amorosa y sexual estable sin casarse. solo el m. m. pl. El Salv. El Salv.

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto»

Mira libros similares a El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto»

Discusión, reseñas del libro El pequeño libro de las 500 palabras para parecer más culto y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.